Contra todo y contra todos. Pablo Casado y Teodoro García Egea encabezarán este lunes un comité de dirección, confirmado ayer domingo en plena manifestación contra ambos y a favor de Isabel Díaz Ayuso en Génova. El presidente y el secretario general del PP han decidido emprender una huida hacia adelante que, según advierten desde diferentes territorios del partido, no servirá de nada: "Si el líder nacional no reacciona, nos veremos obligados a actuar nosotros".
Así de contundentes se muestran desde diferentes ejecutivas autonómicas del PP, que asisten atónitas a la "negación de la realidad" protagonizada por Pablo Casado y sus más estrechos colaboradores: "Ya no es una cuestión de que las presidencias regionales le digamos lo que tiene que hacer, es simplemente escuchar a la calle o leerse los editoriales de los tres últimos días para saber qué decisiones debe adoptar".
Casado, sin embargo, ha dado por bueno el cierre de la crisis con Ayuso que trató de escenificar la dirección nacional del PP y, pese a las presiones de los barones, altos cargos del partido y los propios votantes, ha mantenido a García Egea como secretario general y este lunes acudirá a Génova como si lo ocurrido desde el jueves no hubiera existido.
Activar los congresos regionales
Desde el sábado se lleva especulando con la posible convocatoria de una junta directiva nacional para poner fecha ya a un congreso extraordinario que una gran mayoría de dirigentes del PP ve ya como "inevitable". No obstante, la información que llegó el domingo a diferentes territorios, y a importantes barones del PP, es que Casado planea otro tipo de anuncio este lunes.
Según confirman a Vozpópuli importantes cargos del partido, el presidente nacional habría dejado caer que su intención, este lunes, no es otra que anunciar el desbloqueo del calendario orgánico del PP y poner en marcha los congresos autonómicos pendientes: el de Extremadura, primero; y después los cinco que quedan por celebrarse en regiones uniprovinciales: Cantabria, La Rioja, Asturias, Murcia y Madrid.
Las mismas fuentes destacan que, de confirmarse este plan del presidente nacional, se demostraría que "ha perdido la conexión con la realidad" y que "no ha escuchado a los dirigentes autonómicos", cuya reivindicación es muy distinta: "Junta directiva nacional para convocar de inmediato un congreso extraordinario". Y, "por supuesto", el cese de García Egea: "Era una forma de demostrar que tiene presente la opinión del resto del partido. Es increíble que vaya a sentarse este lunes en la reunión del comité de dirección".
A la espera de los barones
Altos cargos del PP, que en su día se mostraron muy próximos a Pablo Casado y que ahora marcan distancias con él, afirman que el presidente nacional "se expone a una manifestación diaria en Génova si sigue actuando de esta forma", algo que consideran "totalmente insostenible".
Advierten, eso sí, que "Casado ha decidido atrincherarse porque los barones no han dado un paso al frente". Y añaden: "Hasta que referentes del partido más allá de Ayuso, como pueden ser Alberto Núñez Feijóo o Juanma Moreno, no den un golpe en la mesa, Pablo va a tratar de seguir, aunque cada vez esté más solo".
Hasta que referentes del partido más allá de Ayuso, como pueden ser Feijóo o Juanma Moreno, no den un golpe en la mesa, Pablo va a tratar de seguir, aunque cada vez esté más solo", sostienen altos cargos del partido
Los entornos de diferentes barones regionales afirman a Vozpópuli que si este lunes el presidente nacional del partido no anuncia medidas drásticas, habrá llegado, definitivamente, el turno de los barones: "Si al terminar el comité de dirección todo sigue igual, va a haber movimientos. Incluso, este mismo lunes".
Estrechos colaboradores de Alberto Núñez Feijóo advierten, eso sí, que el presidente de la Xunta no lideraría esa rebelión de barones: "A nosotros nos están situando como parte de la solución. No podemos ponernos al frente de una revuelta contra el actual líder nacional".
Feijóo, añaden, "siempre se ha ofrecido para ayudar al partido y a la actual dirección". No obstante, reconocen que "no siempre que ofreces ayuda, la otra parte está dispuesta a aceptarla".
Un partido roto
La resistencia de Pablo Casado a dar un paso atrás, cesar a Teodoro García Egea, o convocar una junta directiva nacional para fijar la fecha de un congreso extraordinario, está pasando factura a un PP que se desploma en las encuestas y que cada vez está más roto.
A esa división está contribuyendo Génova, según denuncian fuentes del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso: "Las presiones para que los diputados muestren su apoyo público a Casado son enormes y se retomaron este domingo, en plena manifestación a favor de Ayuso".
Este domingo había 26 diputados que se negaban a publicar ningún tuit de apoyo al presidente y al secretario general y han sido totalmente acosados por ello
La vigilancia a los propios diputados llega a tal extremo que la dirección nacional tiene "fichados" a aquellos que han respaldado a Casado y a García Egea y los que no: "Este domingo había 26 diputados que se negaban a publicar ningún tuit de apoyo al presidente y al secretario general y han sido totalmente acosados por ello".
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