Las defensas de los ocho acusados de agredir a dos agentes de la Guardia Civil y a sus parejas en la localidad de Alsasua han cargado este miércoles contra la juez de la Audiencia Nacional que les condenó. Los letrados han basado parte de su estrategia ante el Tribunal Supremo en desacreditar a la magistrada, a quien acusaron de imparcial por su matrimonio con un agente del Instituto Armado y un premio que recibió del Cuerpo. La Fiscalía ha defendido a la juez y ha calificado de sin sentido las acusaciones de los abogados.
El representante del ministerio público ha hecho hincapié en que las defensas se han mostrado más críticas con la magistrada que en recursos anteriores y ha desestimado los señalamientos. También ha rebatido los argumentos de los letrados contra el reconocimiento fotográfico practicado durante la instrucción. Los abogados han denunciado ante el Supremo varias irregularidades, particularmente la diferencia étnica y fenotípica del resto de sujetos incluidos en las rondas de reconocimiento.
El Alto Tribunal se ha reunido este miércoles para revisar las condenas de los ocho jóvenes acusados de agredir en 2016 a dos agentes y a sus parejas en el bar Koxka en la localidad de Alsasua, Navarra. En concreto, las sentencias dictadas en junio de 2018 por la Audiencia Nacional en las que se establecieron penas de entre dos y 13 años de prisión para Jokin Unamuno, Ohian Arnanz, Adur Ramírez, Julen Goikoetxea, Jon Ander Cob, Iñaki Abad, Aratz Urrizola y Ainara Urquijo.
En primera instancia se les condenó por delitos de atentado a agentes de la autoridad, lesiones, desórdenes públicos y amenazas. Y fueron absueltos del delito de terrorismo presentado por la Fiscalía, que renunció a su petición en el recurso de casación.
Tres años del caso
Tras aquel fallo, las defensas de seis de los acusados pidieron revisar de la sentencia y en octubre solicitaron la recusación de los magistrados de la Sala de Apelación, tribunal a cargo de la revisión. Dos meses después, la Audiencia Nacional la rechazó y, al haber apreciado "mala fe" en la acción, impuso una multa de 600 euros. De cara a la vista pública celebrada en enero, los condenados también solicitaron diversas pruebas. Solo las presentadas por Ohian Arnanz (condenado a 13 años de prisión), Julen Goikoetxea y Jon Ander Cob (sentenciados a 9 años de cárcel) fueron consideradas.
Finalmente, solo se modificó la condena de Iñaki Abad. El joven vio rebajada su pena de los 10 años a los que fue sentenciado inicialmente a seis años de prisión, ya que los magistrados apreciaron solo dos de los cuatro delitos que se le atribuían. Ahora, los ocho de Alsasua han acudido al Supremo para revisar las decisiones de la Audiencia Nacional.