Una ocasión perdida para la oposición. El día era propicio para que PSC, PP, ICV, Ciudadanos y la extrema izquierda radical de la CUP pusieran en aprietos al presidente de la Generalitat, Artur Mas, y que sus preguntas bien preparadas demostraran o provocaran que Mas pudiera estar relacionado con los casos judiciales de corrupción vinculados a la familia de Jordi Pujol y a la concesión de las ITV. Pero nada más lejos de la realidad.
“Hay que reconocer que se ha visto reforzado de esta comparecencia, tanto por haberse sometido a petición propia a la misma como por la claridad de sus respuestas”, comentaban fuentes socialistas a Vozpópuli en los pasillos del Parlament.
Artur Mas no se sintió incómodo ante ninguna pregunta de los diputados de la oposición catalana y contestó de forma tajante, en algunas ocasiones con evasivas fruto del pasado y provocando el silencio en la sala con su aparente ingenuidad: “He venido aquí tras comparecer en 21 otras ocasiones. Y todavía no me han dado pruebas de ninguna irregularidad en la contratación de obra pública en mis treinta años de carrera política ¿Eso dice mucho del sentido de esta comisión, no creen?”, llegó a decir Artur Mas.
De hecho, en una reflexión dirigida al abogado y presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, el presidente catalán apeló a lo que se conoce en argot jurídico como la “prueba diabólica”. Y argumentó así su estrategia de defensa: “Todos me acusan. Pero me encuentro en aquellos casos que se ven en la Justicia a propósito de lo que se conoce como ‘prueba diabólica’. Aquel que es inocente y lo sabe y no puede demostrar su inocencia”.
Luego, contestó a propósito de las preguntas que le vinculaban a la corrupción de Pujol por haber sido un “amigo íntimo y delfín político” y aprovecharse de las amistades empresariales y políticas del expresident: “Hablan de que, porque Jordi Pujol fue mi padre político, debía conocer a todos los que me rodearon en mi carrera que eran amigos suyos y eso me benefició, pero quizás yo me hice valer por mis méritos y no por mis padrinos. Si no, ¿cómo justifican que siendo el candidato de CiU en la oposición a la alcaldía de Barcelona el partido optara por no confiar en mi y sí en Miquel Roca, al que acabé apoyando?”.
Escudarse en el pasado y en la “ingenuidad”
El presidente de la Generalitat se escudó en el pasado y en una cierta “ingenuidad” para asegurar que “cree que la fortuna amasada por Pujol es personal y no privada; que no hay ninguna irregularidad en la financiación de Convergència Democràtica y que intermedió para salvar a empresas en los casos llamados de deslocalizaciones a petición de personas que me rodeaban y que no tenía que pensar en que tenían mala fe conmigo”.
“Lo que confesó Pujol le afecta a él y a su familia y no tiene nada que ver ni con CDC, ni con CiU, ni con el Gobierno catalán ni conmigo mismo”
Artur Mas hizo sonrojar en más de una ocasión a la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, y al líder de Ciudadanos, Albert Rivera, por la inconsistencia de sus preguntas al intentar vincularle con “los negocios de la familia Pujol, aprovechando sus sucesivos cargos de responsabilidad en la Generalitat”. “No vean verdades en comentarios que todavía nadie, ni siquiera la Justicia ha probado”, espetó Mas. Lo que sí quedó patente es que la intervención de Mas nada tiene que ver con el nerviosismo y la falta de explicaciones aportada en la comisión de investigación del pasado mes de octubre en que participó Jordi Pujol ante los mismos diputados.
Mas volvió a desmarcarse del caso de investigación judicial y policial de Pujol y sus hijos por supuesto fraude fiscal y defendió que tampoco se relacione a la Generalitat con este escándalo ni a su gobierno. “Lo que confesó Jordi Pujol el 25 de julio le afecta a él y a su familia y no tiene nada que ver ni con Convergència Democràtica, ni con Convergència i Unió, ni con el Gobierno catalán ni conmigo mismo”, señaló Mas.
La comparecencia de Mas se centró en aportar datos y detalles documentales de los llamados casos Pujol de fraude fiscal, ITV de presunta concesión irregular de servicios de inspección de vehículos y otros escándalos relacionados con Convergència i Unió.
El presidente catalán tampoco aportó novedades respecto al caso de las ITV, que salpica al exsecretario general de CDC, Oriol Pujol. Mas aseguró que su gobierno no se dejó influir por las “supuestas influencias” que había por parte de empresas relacionadas con Pujol.
El president defendió la actuación de su Govern en las llamadas deslocalizaciones de empresas –Sharp, Sony, Yamaha, Alstom-, por las que se investiga también al exsecretario general de Convergència, Oriol Pujol, en relación al 'caso ITV': "Puedo defender con la cara bien alta la actuación del Govern. Lo que he hecho para salvar empresas lo he hecho, lo hago y lo seguiré haciendo".
“El Govern de la Generalitat, bajo mi mandato, siempre actuó como tenía que actuar”, dijo Mas, para desmarcarse de todo lo referente a las deslocalizaciones de empresas, que Oriol Pujol presuntamente contribuyó a realizar bajo la confianza de Mas. Admitió, sin embargo, que se reunió con empresarios implicados en estos casos, pero siempre “para evitar que se perdieran puestos de trabajo”.
Las seis causas judiciales del entorno de Mas
Oriol Amorós, de ERC, señaló, sin ponerle ningún aprieto en sus preguntas ni concretando vinculaciones directas con la corrupción, que el caso Pujol “no es un asunto privado porque tiene gran trascendencia política”, y recordó a Mas que su entorno tiene abiertas hasta seis causas judiciales.
Mas defendió la gestión de la Generalitat en los concursos públicos en sus anteriores etapas como conseller de Obras Públicas y Economía. “Es muy difícil saber si una empresa trabaja directa o indirectamente por una administración”. “Tengo tres hijos, dos de ellos en edad laboral, y no puedo fiscalizarles cada día para saber si las empresas en las que trabajan colaboran con administraciones”, dijo.
El portavoz del PSC, Miquel Iceta, insistió en las sombras que siguen existiendo en la relación entre CDC y el 'caso Palau'. También citó la investigación judicial que se abrió hace tiempo sobre cuentas bancarias en el extranjero del padre de Artur Mas.
En ese punto, el presidente catalán respondido de forma tajante: “La causa se archivó a los pocos meses de abrirse, y no seguí el caso porque no me afectaba a mí”. Aclaró luego que la beneficiaria de la herencia de su padre fue su madre, así como su hermana. “No he visto ni un céntimo de euro”, dijo, tras lamentar que este tipo de preguntas no se formulen a otros dirigentes políticos.
“No es creíble que usted no sabía nada, como la señora Ana Mato; como la infanta Cristina, o el señor Rajoy con Bárcenas”
La presidenta del PP, Alicia Sánchez-Camacho, insistió en las cuentas del padre de Mas en el extranjero. El presidente catalán admitió entonces que fue “beneficiario” de una de ellas, pero que “ser beneficiario de algo no implica nada, yo nunca recibí ni un euro”.
El jefe de Iniciativa per Catalunya, Joan Herrera, pidió a Mas explicaciones sobre su relación con la familia Pujol, especialmente con el menor de sus hijos, Oriol. Por su parte, el presidente de Ciudadanos, Albert Rivera, repitió algunas de las preguntas de los diputados que le precedieron en su turno y se limitó en asegurar: “Es imposible pensar que una persona inteligente como usted no se entere de nada”. “No es creíble que usted no sabía nada como la señora Ana Mato; como la infanta Cristina, o el señor Rajoy con Bárcenas”.
Así se gestionó la confesión de Jordi Pujol
"El 7 de julio, cuando aparecieron informaciones que vinculaban a miembros de la familia Pujol, tuve una reunión con Pujol y le dije: 'Vuelven a ser informaciones a las que tú y yo estamos acostumbrados y que después son puras invenciones. ¿Lo desmentimos categóricamente?'. Fue un día de reunión de los órganos de dirección del partido. Y esta vez me dijo: 'Ya te hablaré de ello en los próximos días'", reveló Mas en un momento de su intervención.
“Yo nunca he sido titular de una cuenta fuera, ni mi mujer, nunca hemos recibido nada de cuentas que estén fuera, ni en el momento de la muerte de mi padre"
El presidente catalán reiteró que no conocía el origen de la fortuna de la familia Pujol en el extranjero, y negó que CDC se haya financiado irregularmente a través del Palau de la Música. El president entró en cuestiones personales como explicar que conocía las actividades de su padre, del que ha reconocido que se abrió un proceso judicial contra él que acabó archivado.
Mas niega ser titular de cuentas en el extranjero
"Yo tengo un testamento hecho. Respeto a mis hijos. Y respeto a mi pareja. Mis hijos no tienen por qué ser conocedores en todo momento de qué dice el testamento y pueden ser beneficiarios de cosas. Pero yo nunca he sido titular de una cuenta fuera, ni mi mujer, nunca hemos recibido nada de cuentas que estén fuera, ni en el momento de la muerte de mi padre", afirmó.
La Agencia Tributaria catalana actúa contra Pujol
Mas ha afirmado que la Agencia Tributaria Catalana está actuando en relación a la confesión de Pujol sobre su fraude fiscal: "Les puedo decir que en las semanas siguientes, una vez conocido este caso a partir de julio, la Agencia Tributaria catalana actuó como actúa una agencia tributaria, por escrito, en defensa, del erario público catalán".