Si hay un lugar donde se aúnen todos los males en Barcelona es en el metro. Las cifras recopiladas el año pasado cifran en 10.092 los hurtos, un 47,3% más que el año anterior, siendo la reincidencia de los carteristas un problema grave que los agentes no consiguen atajar. Son comunes las advertencias que se hacen desde la megafonía de las instalaciones públicas para invitar a los ciudadanos, especialmente turistas, que cuiden sus pertenencias.
La criminalidad en al ciudad ya ha hecho que el alcalde mueva ficha para atajar la multirreincidencia. En abril, el Consistorio constituyó la comisión de estudio sobre multirreincidencia para desarrollar una petición para un endurecimiento del Código Penal. Los grupos municipales están de acuerdo, en su mayoría, en ejecutar modificaciones legales para atajar los casos delitos leves que salen indemnes.
En datos, se llegaron a detectar 526 personas multirreincidentes de los cuales 487 estuvieron activos en 2023 y fueron imputados por 6.169 delitos penales de hurtos y robos. El 78,6% de los detenidos tenía antecedentes por robos con violencia o intimidación y el 71,9% de las causas de las detenciones fueron hurtos o robos. Gran parte de ellos en el metro.
Ante esta realidad, el PP municipal presentó un ruego en el Consejo Municipal este viernes. El regidor del PP Juan Bautista Milián Querol expresó que es preocupante la inseguridad que acampa en el subsuelo y que es inadmisible la impunidad de los carteristas. De esta forman han instado al Gobierno municipal al desarrollar un Plan integral de seguridad que contemple, entre otras medidas, la instalación de un botón del pánico en cada vagón con alarmas sonoras que adviertan de la presencia de carteristas. Entre las otras medidas también piden la presencia constante de todos los operadores que actúen en la protección de la seguridad en la red metropolitana y la extensión de sistemas de videovigilancia.
La extensión de la criminalidad es la mancha negra sobre la ‘marca Barcelona’ tan aclamada por el turismo. Sin embargo, Tanto Barcelona como Bruselas están encabezando la lista de las ciudades con mayores tasas de criminalidad en Europa. En concreto, Barcelona, que tiene una tasa de 326 robos por cada 100.000 habitantes, solo es superada por Bruselas, con 360 denuncias por este tipo de delito. Ambas sobresalen sobre el resto, ya que el 'bronce' en esta clasificación se lo lleva Melilla, con 239 robos por cada 100.000 habitantes.
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