Alberto Núñez Feijóo estuvo todo el jueves pegado al móvil antes de hablar con Pedro Sánchez y romper las negociaciones para renovar el CGPJ. La decisión se tomó una vez confirmadas las intenciones del Gobierno de rebajar el delito de sedición, y después de que el líder del PP recibiera un whatsapp de Ayuso en contra del pacto y hablará con diferentes dirigentes nacionales y autonómicos del partido.
Según confirman a Vozpópuli fuentes de Génova, la presidenta de la Comunidad de Madrid envió un mensaje a Feijóo en el que le transmitió, de forma directa, las dudas sobre el pacto que ya había reconocido públicamente en los días previos.
En concreto, Isabel Díaz Ayuso advirtió al líder nacional del PP que Pedro Sánchez no era de fiar y que consideraba una "barbaridad" la maniobra del Gobierno para pactar con ERC la rebaja del delito de sedición mientras negociaba con el principal partido de la oposición la renovación del CGPJ.
La dirigente madrileña afirmó después, en su intervención pública tras visitar el municipio gallego de Ordes, que ya había transmitido su opinión "y hablado con quien tenía que hablar", sobre ese asunto, dejando a las claras que ya había transmitido a Feijóo su disconformidad con el posible acuerdo.
Fuentes bien situadas en Sol confirman que existió una "comunicación" de Ayuso con Feijóo y que la presidenta madrileña manifestó lo que ya había dicho previamente en público: "Ya la semana pasada en los premios de El Mundo y en el foro de El Confidencial dejó claras sus dudas. Y, por lealtad, decidió hablarlo directamente con el líder nacional del partido".
Las llamadas de Feijóo
El presidente nacional del PP, por su parte, mantuvo contacto directo con Esteban González Pons para estar al tanto de las últimas conversaciones del vicesecretario institucional con Félix Bolaños.
La aparente rectificación de María Jesús Montero, aplazando la reforma del Código Penal reclamada por ERC, fue un espejismo, ya que al equipo de Feijóo le confirmaron que Sánchez había transmitido a los periodistas que le acompañaban en el vuelo de regreso a España desde Kenia que su voluntad era rebajar ese delito, tal y como reclamaba Esquerra.
Ya desde el lunes Feijóo tenía inputs sobre la imposibilidad de alcanzar un acuerdo si Sánchez estaba dispuesto a rebajar el delito de sedición
Para entonces, explican desde Génova, ya se había fijado la llamada entre Sánchez y Feijóo para las seis y media de la tarde de ayer. Y, en las horas previas, Alberto Núñez Feijóo contactó con otros presidentes autonómicos del PP, líderes regionales y miembros del comité de dirección para transmitirles que la situación de las negociaciones con el Gobierno había cambiado porque Sánchez había confirmado su intención de reformar el delito de sedición.
Las fuentes consultadas explican que Feijóo "recibió opiniones de todos ellos" en las horas previas a su llamada con el presidente del Gobierno. En todo caso, destacan, "ya desde el lunes tenía inputs de algunos de ellos sobre la imposibilidad de alcanzar un acuerdo si Sánchez estaba dispuesto a rebajar el delito de sedición". A pesar de ello, el PP mantuvo las negociaciones con el Ejecutivo hasta que tuvo confirmación del plan de Sánchez.
Un viraje "acertado"
Uno de los líderes regionales que ha hablado con Feijóo en las últimas 24 horas afirma que el líder nacional del PP "quería tener confirmación por parte de Sánchez de que efectivamente quería volver a complacer a Esquerra antes de romper las negociaciones".
La misma fuente señala que, efectivamente, el presidente nacional del PP anunció que "las condiciones de la negociación habían cambiado" por la voluntad firme del Gobierno a rebajar el delito de sedición y que, por tanto, "si el jefe del Ejecutivo le anunciaba que eso era así, nosotros nos teníamos que bajar del pacto".
En ese sentido, Feijóo transmitió a los diferentes dirigentes del partido con los que habló ayer que "no podemos consentir que un Gobierno esté pactando con los constitucionalistas por la mañana y con los independentistas por la tarde". Reconoció, además, que "Bolaños nos ha engañado".
El líder autonómico contactado por Vozpópuli destaca que "todos consideramos un escándalo la maniobra de Sánchez y así se lo transmitimos a Feijóo". Para varios dirigentes del PP, "todo estalla el lunes cuando El País publica las intenciones del Gobierno y, una vez confirmadas, no quedaba otra salida que romper". Una decisión que "todos consideramos acertada".
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