Esther Blázquez está viviendo uno de los peores momentos de su vida. La tensión es constante y no sabe qué sucederá en las próximas horas, días o meses. Lleva desde hace semanas detectando como se crean páginas web con su nombre con contenido erótico. La Policía Nacional ha recibido la denuncia de esta psicóloga de Salamanca y ya está manos a la obra investigando el caso. "Llaman a la consulta solicitando servicios sexuales", explica la víctima de esta suplantación en una entrevista a Vozpópuli.
Esther no solo está sufriendo un problema personal sino también profesional. El dominio web de su empresa está cayendo en el posicionamiento de Google y es casi imposible percibir cuál es su página web entre la de contactos eróticos que se han creado en masa en los últimos días. Y va creciendo sin descanso a pesar de que se eliminan algunos de los enlaces.
Un ciberataque desde Bélgica
La psicóloga sospecha que detrás de este delito hay un intento de daño planificado. Sin embargo, al no tener enemigos, desconoce quién puede haber dado la orden a los ciberdelincuentes que trabajan sin descanso añadiendo estos dominios con su nombre.
Esther denunció la situación el pasado 22 de agosto en la Comisaría de la Policía Nacional de Salamanca. Explicó a los agentes que desde hace diez días había detectado como sus palabras clave "Esther Bázquez psicóloga" trasladaban en el motor de búsqueda de Google a páginas de contenido sexual. Afortunadamente, de momento, no se había publicado su imagen en los enlaces.
Previamente, contactó y denunció la situación a Google y a Incibe, donde le contestaron que es probable que se trate de un algoritmo. La psicóloga trasladó la sospecha a los agentes de que los servidores podrían estar alojados en Bélgica y Canadá.
Una campaña de desprestigio a la psicóloga
Esther estaba "preocupada por su reputación y por el menoscabo a su imagen que estas circunstancias puedan ocasionarle. Adjuntó a los policías las capturas de pantalla de los resultados de búsqueda con su nombre y la clínica de psicología. También los correos con las denuncias a las diferentes plataformas para que eliminen de forma rápida estos dominios.
Esta mujer relata a Vozpópuli el calvario que está sufriendo a raíz de esta situación. Y es que las páginas siguen apareciendo sin control a pesar de las denuncias de suplantación que realizan. Se eliminan unas pero aparecen otras. Una cascada de enlaces que generan que su dominio real pase a las últimas posiciones de los motores de búsqueda.
El informático que creó su página afirma que es una "estrategia de SEO negativa" pagada por alguien que la conoce y quiere hacerla daño a su negocio. En un primer momento acudió a la Guardia Civil pero estos agentes les remitieron a la Policía Nacional porque cuenta con un grupo de delitos cibernéticos. Unos especialistas que indagarán sobre el origen de este ciberataque planificado que busca mermar el negocio de esta psicóloga asentada en Salamanca.
Las llamadas a la consulta
"Estoy en alerta", asegura a Vozpópuli. Por el momento estos contenidos eróticos no están relacionados con ella ni incluyen fotos de montajes con sus fotografías. La peor situación la está llevando en su negocio. "Estoy recibiendo llamadas a la consulta en la que me piden servicios sexuales", lamenta.
A pesar de la dificultad de la investigación que tiene por delante la Policía Nacional, como es habitual en este tipo de hechos delictivos, la psicóloga espera que los agentes puedan desenmascarar a los protagonistas de este delito. Mientras esperan este desenlace, a ella y a su marido, solo les queda buscar su nombre cada día e ir denunciando a Google los dominios que van apareciendo de forma constante.
