El presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, ha reaccionado al escándalo como se esperaba de él: ha pedido que no se vincule a Convergencia con los fondos irregulares que este viernes el expresidente Jordi Pujol confesaba disponer en el extranjero, fruto supuestamente de una herencia de su padre. "Es un tema estrictamente privado, personal y familiar, que no tiene nada que ver ni con Convergència, ni con el partido. Son ellos y él concretamente, el que ha creído oportuno dar estas explicaciones", ha asegurado el líder de CiU.
Ninguna mención al famoso 3% de comisiones aplicadas a todas las obras y concesiones otorgadas por la Generalitat durante los 23 años largos de "reinado" de Pujol en la Generalitat, de acuerdo con la no menos famosa imprecación lanzada en el Parlament por Pascual Maragall a la cara precisamente de Mas: "su problema se llama 3%..." Ninguna mención, tampoco, a esa expresión casi tópica que en Madrid y Barcelona se refiere a una parte de CDC como "Convergencia Sección Negocios". La pasta que la familia Pujol ha acumulado en estos años, que algunas fuentes cifran en "varios cientos de millones de euros" no tienen, según Mas, nada que ver con Convergencia, ni con la Generalitat, ni con la inmoralidad de una elite política que, acorralada por la evidencia, se ha echado al monte de la independencia.
"Es un tema estrictamente privado, personal y familiar, que no tiene nada que ver con Convergència"
Mas en su mejor versión de consumado caradura. La frase con La confesión de Pujol llegaba tan solo unos días después de que su hijo Oriol Pujol renunciara de manera definitiva a la secretaría general de CDC dada su imputación en el caso de las ITV. Mas optó por situar a Josep Rull como número dos del partido en sustitución del vástago de Jordi Pujol.
Desde que se hiciera público el comunicado que entonaba el mea culpa, distintas voces en la oposición claman por que se inicie una investigación para esclarecer los hechos. El portavoz del PP en el Parlament, Enric Millo, pidió una investigación de la Agencia Tributaria que aclare "cuál es el origen y la fecha de los fondos, así como su evolución durante los últimos 30 años", ya que considera que las explicaciones del expresident "son confusas".
“La confesión del expresident es el reconocimiento de un engaño a todos los catalanes que ha durado demasiado tiempo", aseguraba Millo.
Por su parte, el portavoz de C's, Matias Alonso, pidió también una investigación de Hacienda, y afirmó que el anuncio del expresidente es "fruto de las presiones judiciales a sus hijos".