“Aquí no sabemos nada. Nadie nos ha dicho nada. Pero yo he leído el programa y en ningún sitio dice que los cerditos correrán por los campos de golf”. El que habla es un trabajador del Club de Campo, una de las mejores instalaciones deportivas de España, alarmado por la noticia publicada esta semana de que Ahora Madrid quería convertirlo en una granja escuela. Pese a los rumores, los empleados están tranquilos, aunque algunos socios no. Muchos han llamado e incluso han acudido a las oficinas a preguntar si realmente se va a convertir el club en una granja escuela, tal y como dice una de las propuestas que se hicieron durante el debate previo a la elaboración del programa de la agrupación que encabeza Manuela Carmena.
Carmena, sobre la propuesta: "Ya veremos. No tenemos alternativa. Lo iremos diciendo, lo iremos viendo. No hay ese planteamiento, desde luego que no”
En el programa electoral del grupo se dice en el apartado dedicado a potenciar y mejorar el uso de espacios públicos: “Revisar las concesiones, en particular, la del Club de Campo”. Sí que es verdad que existía la propuesta de convertirla en una granja escuela, pero también hubo otra para desarmar a la policía municipal que no está finalmente en el programa y otras muchas que no pasaron el corte. La propia jueza Carmena dijo hace unos días en la Cadena Ser, después de afirmar que “hay que ser prudentes” y “hacer las cosas bien desde el principio”, sobre la posible granja escuela: “Ya veremos. No tenemos alternativa. Lo iremos diciendo, lo iremos viendo. No hay ese planteamiento, desde luego que no”.
“Hoy la derecha –añade el empleado- está rabiosa y han lanzado esa primera propuesta como algo que está hecho. Han perdido la batalla de las municipales y quieren ganar la de noviembre, pero le aseguro que no tenemos ningún miedo". Lo que en los años del franquismo era un club de élite se fue democratizando con la llegada del PSOE al poder con el primer gobierno socialista municipal con Tierno Galván y Juan Barranco. Posteriormente las instalaciones han ido creciendo, con el PP, con el golf y los caballos como especialidades más elitistas, hasta el punto de que la propia infanta Elena guarda sus caballos en sus instalaciones. El suelo del club es de la ciudad de Madrid, que cedió su gestión a una sociedad anónima mixta de la que el Ayuntamiento tiene un 51% de participación, Patrimonio del Estado un 24,5% y la Real Sociedad Hípica el otro 24,5%. La concesión vencía en el año 1993. El Ayuntamiento decidió ese año gestionarlo de la misma manera hasta el año 2025, que es cuando vence la nueva concesión.
El nuevo Ayuntamiento podría convertir el Club de Campo en una granja escuela o en una escuela de hostelería o en lo que quisiera porque tiene la mayoría de la sociedad gestora, pero si lo hiciera se tendría que enfrentar con los socios que han comenzado a organizarse tras conocer las propuestas de Ahora Madrid. “Antes de que haya un cerdito en el campo de golf tendrán que enfrentarse legalmente con muchos de nosotros que pagamos nuestra cuota de ingreso y anual, y estamos a gusto en sus instalaciones”. La frase es de un distinguido socio, muy alejado de los planteamientos de Ahora Madrid, y que está dispuesto a pelear en los tribunales por mantener sus derechos si considera que se han vulnerado.
“Antes de que haya un cerdito en el campo de golf tendrán que enfrentarse legalmente con muchos de nosotros que pagamos nuestra cuota", defiende un socio
El número de socios estaba cerrado hace unos años y el PP abrió la lista de espera. Desde entonces, coincidiendo con la presidencia de José Manuel Berzal, han ingresado unas 5.000 personas, por lo que la cifra alcanza los 30.000 socios. La cuota de entrada es de 3.000 euros y el recibo anual de unos 700. Mucho más caro que los polideportivos municipales, pero también más lujoso, con más actividades, mejor cuidado y con menos gente por metro cuadrado. Los últimos tres años sus cuentas han sido positivas y el propio gerente, que ya prepara las maletas, declaraba hace unos días que este año cerrarán con un resultado positivo de tres millones de euros. Los sindicatos se quejan de que la gerencia les da poca información y que no saben el montante de la deuda. Han tenido algunos conflictos que se arreglaron, de momento, con la firma de un nuevo convenio.
En el Ayuntamiento del PP consideran que sería una barbaridad destrozar todo lo que se ha hecho, e invertido, en los últimos años. En la actualidad hay unos dos mil jóvenes y mayores que reciben clases de los 68 profesores que trabajan en las instalaciones, entre los que destaca algún profesor famoso, como el que dio clase gratis de golf a la familia Aznar, lo que provocó un gran escándalo a los pocos meses de que fuera nombrada alcaldesa Ana Botella. Otro escándalo fue el listado de enchufados para poder usar las instalaciones (mientras había lista de espera), entre los que se encontraban políticos, empresarios y también periodistas. Pero quizá el más divertido era el que relacionaba la rehabilitación de una de sus estancias con el interés de un político del PP de mantener un nido de amor para situaciones urgentes o casi permanentes.
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