Lío en la plaza Sant Jaume de Barcelona. El alcalde Jaume Collboni convocó el sábado un minuto de silencio frente al ayuntamiento por las víctimas del terremoto de Marruecos para este domingo a las 12.00. Lo que 'olvidó' es que ese día, a esa hora y en ese mismo lugar había organizada una manifestación contra una posible ley de amnistía que permitiese a Sánchez obtener el apoyo del independentismo en una investidura.
Buscado o no, el alcalde socialista ha generado una polémica que podría haber evitado convocando su minuto de silencio en cualquier otro momento para esquivar que los dos actos coincidiesen en espacio y tiempo. Lo que ha ocurrido era lo esperable: cuando Collboni ha salido a la plaza para celebrar su acto, ya había cientos de manifestantes lanzando proclamas contra la amnistía.
Mientras sonaban cánticos como 'Puigdemont a prisión', Collboni ha accedido a la plaza junto a varios miembros de su equipo para pedir silencio a los manifestantes, que han hecho caso omiso al alcalde. Ante la imposibilidad de celebrar el minuto de silencio, el alcalde y sus acompañantes han regresado al ayuntamiento, desde donde ha calificado como "inadmisible" que no se haya podido celebrar el homenaje.
Una situación de tensión que se podría haber evitado celebrando el minuto de silencio otro día, en otro lugar o a una hora distinta, ya que la manifestación estaba convocada desde el pasado martes, tres días antes de que ocurriese el desastre natural que azota a Marruecos.
Aunque el minuto de silencio estaba organizado por la Federación de Municipios para el domingo a las 12.00, los ayuntamientos han colocado el acto como han querido en sus agendas. Hay varios ejemplos. En Terrasa, el minuto de silencio se celebró ayer sábado, mientras que ayuntamientos como el Tarragona o Sabadell convocaron el acto a las 13.00. Otros, como Valls, lo han celebrado por la mañana, a las 11.30. Por tanto, Collboni podría haber escogido 'no coincidir' y evitar de esta manera la situación vivida. Es por este motivo que en otras ciudades catalanas no se han vivido situaciones como la de Barcelona.
Con esta 'coincidencia' a la hora de convocar el minuto de silencio, Collboni ha conseguido generar una ola de reproches hacia los manifestantes -que protestaban contra el líder de su partido, Pedro Sánchez-, además de lograr que se hable de la polémica y no de que en Barcelona hay ciudadanos que rechazan una posible amnistía a Carles Puigdemont a cambio de los votos de Junts.
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