La Comisión Europea, a través de la intervención de su vicepresidente Margaritis Schinas -encargado de la promoción de "nuestro Modo de Vida Europeo"-, ha calificado como "muy preocupantes" las acusaciones a Puigdemont y el independentismo, que implicarían que un miembro de la Unión "podría estar trabajando en nombre de los servicios federales de seguridad rusos".
"Ahora conocemos todos los informes sobre los contactos estrechos y regulares, incluidas visitas organizadas entre funcionarios rusos y representantes del secesionismo catalán en España entre 2017 y 2020", comenzaba en su intervención Schinas. "Creo que es el deber de esta casa investigar quién más hizo qué y bajo qué condiciones para jugar el juego de Moscú", continuaba.
Bruselas, la salida política de líderes del independentismo como Carles Puigdemont, se ha visto agitada por la cercanía de los secesionistas con el régimen ruso. Como ya publicó este diario, los líderes catalanes recurrieron a contactos "de alto nivel" para fraguar los vínculos de Cataluña con políticos de extrema derecha alemana o italiana para cuando se independizara de España. A cambio, el independentismo se comprometía a respaldar la estrategia del Gobierno ruso para desestabilizar la democracia y la Unión Europea (UE) a partir de lo que entonces era una hipotética invasión de Ucrania y consiguiente limitación del gas ruso a Europa.
La Eurocámara votará el jueves una resolución sobre la injerencia rusa en la UE que salpica al independentismo
Como ha contado Vozpópuli este martes, el varapalo al Ejecutivo de Sánchez y sus socios independentistas puede llegar desde Europa. Este jueves la Eurocámara votará una resolución sobre la injerencia rusa en la Unión Europea que suponer la apertura de una investigación entre el grupo de los Veintisiete a Puigdemont, ya que los primeros borradores del texto incluyen referencias a los "eurodiputados catalanes" -el expresident-.
En el debate de este martes, impulsado entre otros por los liberales y el secretario General de Ciudadanos, Adrián Vázquez, se ha abierto paso en la agenda de los Veintisiete al revelarse los vínculos entre la eurodiputada letona Tatjana Zdanoka y los servicios secretos rusos.
Como telón de fondo, el caso Voloh, que versa sobre la injerencia rusa en la organización del 1-O -en el marco del desvío de fondos públicos para el procés- y cuya instrucción fue recientemente ampliada seis meses más por el juez.
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