Camps: "Puig debe irse inmediatamente a casa, es lo que nos pedía a nosotros"

El expresidente de la Generalitat Francisco Camps (Valencia, 28 de agosto de 1962), ha concedido a Vozpópuli una entrevista en un momento de agitación política en la Comunidad Valenciana por la presunta trama de financiación irregular del PSPV que se analiza en el caso Azud. Camps ha aprovechado la conversación con este medio para trazar las diferencias con la situación que él mismo padeció hace una década y que acabó con su salida de la presidencia del Gobierno autonómico.

También explica cómo encara el último de los juicios –el décimo– que le queda pendiente de la etapa en la que dirigía el Ejecutivo autonómico valenciano. Hasta la fecha los nueve anteriores han sido favorables a sus intereses y ha quedado absuelto.

Pregunta: ¿Cómo está viviendo las informaciones que han salido sobre la presunta financiación irregular del PSPV que lidera en la actualidad Ximo Puig?

Respuesta: Sensaciones encontradas. La primera es la de sentir un desigual trato mediático entre el que tiene el PSPV de Ximo Puig y el que sufrí yo. Y me parece grave porque la democracia se basa en la igualdad de trato. Hace unos años, porque presumiblemente me habían regalado cuatro trajes, tenía a todos los medios de comunicación detrás mío, sin posibilidad de moverme por ningún sitio ya fuese en mi calle, en el Palau..., todo el día preguntándome sobre los trajes. Y ahora veo con estupor cómo Ximo Puig va pasando con tranquilidad por todo este lío y no me parece serio.

P: Usted, sin embargo, siempre ha defendido que lo lógico hubiera sido actuar con moderación y sin persecuciones.

R: Sí, sigo pensando lo mismo. Esa persecución es completamente injusta la sufra quien la sufra. Pero ha existido una gran diferencia de trato. Y recuerde que Carmen Alborch, que tuvo una campaña electoral presumiblemente con fondos negros tiene una calle en Valencia que se le niega a Rita Barberá, que fue la gran alcaldesa de la ciudad durante 24 años. Y la campaña de Teresa Fernández de la Vega también se nutrió de esos fondos opacos, presuntamente, y encima va dando lecciones de no sé qué cosas desde el Consejo de Estado.

P: ¿Hay paralelismo entre los hechos que se investigan sobre la financiación del PSOE valenciano y lo que pasó con usted al frente del Gobierno valenciano?

R: No tiene nada que ver lo que pasó en el Consell que presidía yo y lo que supuestamente ha pasado con el PSPV.

P: Al PP también le han dicho los tribunales que en esas campañas acudía 'dopado'

R: Cuando hablas de la financiación del PP, para que no quepa la más mínima duda, no tiene nada que ver con la del PSOE valenciano. No hay un solo contrato de la Administración Pública de mi etapa bajo sospecha de haber financiado al Partido Popular. El PP nunca fue condenado por este motivo, por mucho que digan. Unas personas del Partido Popular han sido condenadas por delito electoral.

En el caso del PSPV lo que estamos viendo es que después de cada contrato se van a cobrarles a las empresas y esto es un cambio de paradigma muy importante

P: Eso le comentaba, por ir 'dopado'...

R: No. Han sido condenados por delito electoral, es decir, por gastarse más dinero del que podían gastarse en la campaña electoral. Por eso, no por financiación irregular del partido. Ninguna empresa de las que pagaron hipotéticamente aquellas facturas recibieron un solo contrato de la Administración a cambio de esto, según consta en esa sentencia, o sea que no ocurrió nunca. Y en el caso del PSPV lo que estamos viendo es que después de cada contrato se van a cobrarles a las empresas y esto es un cambio de paradigma muy importante. O sea que nosotros íbamos dopados de la ilusión de la gente y los socialistas iban dopados con dinero.

Presuntamente pagaron con dinero la campaña de Unión Valenciana. Eso sí que es una malversación del sistema electoral, pagando a un competidor de mi enemigo para que no saque tantos votos

P: En esta pieza del caso Azud también aparecen pagos a Unión Valenciana en una etapa que usted conoció de primera mano porque era un partido que dividía los votos a la derecha del PP.

R: Esto ha pasado muy desapercibido y es muy grave. Presuntamente pagaron con dinero la campaña de Unión Valenciana para quitarnos votos a nosotros. O sea encima con trampas, como los equipos de fútbol que pagan a otros para que se dejen ganar. Eso sí que es una malversación del sistema electoral, pagando a un competidor de mi enemigo para que no saque tantos votos y me pueda ganar al final.

P: ¿Qué le sugiere que la empresa Acuamed esté en el ojo del huracán de los investigadores?

R. Pues que Cristina Narbona se cargó el Plan Hidrológico Nacional para crear una empresa llamada Acuamed y ahora parece ser que esa empresa pagaba campañas del PSPV. O sea, que el dinero que iba para llevar agua a las comarcas del sur de la Comunidad Valenciana sirvió para hacer campañas electorales del PSOE.

P: ¿Y qué piensa sobre la circunstancia de que una década después quienes le acusaban de practicar la corrupción estén ahora en una tesitura parecida?

R: Mire, Ximo Puig es el jefe de la acusación popular contra mí desde el año 2009. Hasta que llegó a la Presidencia y entonces como ya esas acusaciones las pagábamos todos los valencianos a través de la Abogacía de la Generalitat, no le hacía falta tener otros abogados. Pero él es el jefe político de la Abogacía de la Generalitat y desde allí siguió marcando el paso.

P: ¿Debería dimitir Ximo Puig por la sombra de sospecha que se cierne sobre la financiación del PSOE valenciano?

R: Ahora recuerdo cuando con un desahogo bestial me pedía la dimisión e intentaba que no entrara en el Consejo Jurídico Consultivo. Ahora, al ver que aparece su nombre en los papeles del recaudador del PSOE y no pasa nada me parece impresionante. Debería irse a casa inmediatamente porque es lo que nos pedía a nosotros por la millonésima parte de la presunción de algo que podría haber sido y que luego se ha demostrado que no era cierto.

P: Bueno algunas cuestiones sí se han demostrado que eran ciertas y hay condenados por ello...

R: Estoy hablando de mí. Estoy analizando el tema desde el prisma de Ximo Puig y Francisco Camps. Ya tenía que haberse ido a casa por la imputación de su hermano por recibir dinero de la Generalitat que él preside. Y también debería haberse ido por su gestión, en la que no ha hecho hospitales, colegios, y ha pasado de una deuda de 20.000 millones de euros en mi etapa (haciendo 420 colegios y 8 hospitales), a 70.000 millones de euros y ellos no han hecho nada.

P: ¿En qué ha cambiado el clima social en la última década para que esa 'presión' a la que alude haya bajado tanto?

R: Ha cambiado en que el afectado es el PSOE. Ese es el único factor. Cuando hay un dirigente de la izquierda en apuros hay una especie de 'omertá' mediática.

Cuando es un líder de centroderecha el titular es súpercomprensible. Ahora hay un rinconcito el periódico, se lía con los titulares

P: ¿Por qué lo dice? Yo sí veo a muchos medios y compañeros informando de la financiación presuntamente irregular del PSPV.

R: Preguntároslo vosotros los periodistas. Ahora hay titulares imposible de entender, pero cuando es un líder de centroderecha el titular es súpercomprensible. Cuatro palabras, el nombre del político y el hecho presunto como si se hubiese cometido, y a eso le añades la insistencia de un día y otro día. Y ahora hay un rinconcito en el periódico, se lía con los titulares, la gente no sabe si se trata del cobrador del PSPV o de la comunidad del norte de la Comunidad Valenciana.

P: ¿A qué se refiere?

R: Porque cuando dicen Cataluña la gente no sabe a qué se refiere. En cambio en nuestro caso salía el nombre del político conocido: Camps, Rita, Cotino, Zaplana..., esa es la diferencia.

P: ¿Es esto que denuncia lo que 'protege' a Irene Montero de una exigencia de dimisión que parecería clara después de los efectos de la denominada ley del 'solo sí es sí'?

R: Insisto, la izquierda pasa de todo, pase lo que pase. No tiene límites, nunca la ha tenido. La izquierda se siente dueña del sistema.

P: Usted dice que Puig todavía no ha abonado las costas a las que le condenó a pagar el Supremo. ¿Cómo está esa situación?

R: Es un moroso: ¡encima!. Puig recurrió el archivo de la pieza de los trajes por la que tuve que dejar de ser presidente y la Fiscalía Anticorrupción no siguió adelante. Pero él recurrió, junto a los otros tres dirigentes socialistas que firmaron la denuncia inicialmente, y el Supremo ratificó la absolución y condenó en costas a Ximo Puig.

Es un moroso. Ximo Puig no le ha pagado a Francisco Camps una condena del Supremo. Los 6.000 euros serán para Cáritas

P: ¿Ha pedido la ejecución de la sentencia?

R: Sí y habrá pasado el plazo. Es un moroso. Ximo Puig no le ha pagado a Francisco Camps una condena del Supremo.

P: Perdone. ¿Se puede saber la cantidad?

R: No la recuerdo exactamente pero será en torno a 6.000 euros. Si lo pagara lo daría a Cáritas al minuto siguiente. Es dinero, los 6.000 euros, serán para Cáritas.

P: Esta situación que pone. otra vez. a la Comunidad Valenciana en el foco de la corrupción hace daño, sin duda, a la clase política.

R: No, mire, otra vez no. Son los mismos, ellos nos acusaron y ellos presuntamente han hecho cosas.

P: ¿Cree que este clima tendrá incidencia en las elecciones?

R: No. El PP va a ganar las elecciones. María José Catalá va a ser alcaldesa de Valencia y Carlos Mazón presidente de la Generalitat, seguro. Feijóo también será presidente del Gobierno, esto se ha acabado, lo sabe todo el mundo y ellos también lo saben.

La única expectativa que tengo del juicio en la Audiencia Nacional es la absolución porque no hay nada, de nada, de nada y, por lo tanto, no cabe más que la absolución

P: ¿Cómo afronta el último de los juicios contra usted que tendrá lugar a partir del próximo mes en la Audiencia Nacional?

R: La única expectativa que tengo del juicio en la Audiencia Nacional es la absolución porque no hay nada, de nada, de nada y, por lo tanto, no cabe más que la absolución.

P: ¿Le agobia volver a hacer el 'paseíllo' durante la sesiones que tiene previstas el juicio?

R: Pues hombre..., entiendo que lo van a intentar. Marearme y salir de nuevo en la prensa durante toda la precampaña electoral. Está todo muy bien organizado, pero seguiré luchando y peleando como estos últimos 12 años. No he hecho otra cosa durante este tiempo que hacer 'paseíllos' de estos.