La pretendida unidad en Vox en torno a las decisiones de Santiago Abascal no se ha cumplido en la Comunidad Valenciana. Sí han aceptado la imposición de abandonar el Gobierno valenciano los tres consellers de Vox (Vicente Barrera, Elisa Núñez y José Luis Aguirre), pero no es algo compartido por muchos de los cargos que dependían de ellos, según ha podido constatar Vozpópuli.
El malestar es evidente entre muchos de los que han tenido que abandonar el puesto después de que hace apenas 11 meses (en algunos casos menos tiempo) Vox fuera a buscarlos ante las dificultades que tenían para cerrar sus cuadros de confianza.
Mazón los 'acoge'
Carlos Mazón ya daba en la presentación de la reestructuración de su Ejecutivo autonómico algunos nombres de personas que dependían de departamentos gobernados por Vox y que iban a continuar en otras funciones dentro de la Generalitat.
En primera instancia han sido cuatro los cargos que se quedan. Pilar Tébar pasa a ser la secretaria autonómica de Cultura integrada en la cartera de Educación y antes estaba como directora general en el departamento de Vicente Barrera.
Luis Cervera, que era director general de Deportes, también con Vicente Barrera, seguirá en el mismo puesto pero adscrito a Presidencia, directamente dependiente de Carlos Mazón.
Estaban en cargos dependientes de Vox, aunque no tuvieran el carné de esa formación. En la misma situación se quedan el que era subsecretario de Justicia e Interior, Ricardo García, que estaba en el departamento liderado por Elisa Núñez .
Juan Martínez que estaba con José Luis Aguirre como subsecretario de Agricultura, Ganadería y Pesca y tras la salida de Vox ocupará la subsecretaría de Medio Ambiente, Infraestructuras y Territorio.
Malestar en las Cortes
La digestión de la decisión de Abascal está siendo pesada para muchos cargos públicos que van a tener que dejar su puesto y no hay unanimidad en el apoyo al presidente nacional por su decisión de ruptura.
En las Cortes Valencianas también hay división. De los 13 diputados con los que cuenta Vox hay un grupo muy significativo (probablemente más de la mitad) que no apoyan la imposición de Santiago Abascal.
Llanos Massó, presidenta de la Cámara autonómica ha mostrado en público su apoyo al presidente nacional de su formación, al igual que el portavoz, José María Llanos.
Ahora bien, hay un nutrido grupo de diputados autonómicos que, según aseguran a este medio, estar en absoluto desacuerdo con la fractura propiciada con el PP. Es más, hay diputados que consideran que la continuidad de Llanos Massó en la Presidencia "no tiene sentido".
Esta es la misma posición que la presidenta balear, Marga Prohens, exhibe sobre la continuidad el presidente del Parlamento balear Gabriel Le Senne (Vox). Y también Carlos Mazón abre la puerta a la salida de Massó, aunque lo deja a su criterio.
50 diputados
El presidente valenciano va a tener que conseguir 50 diputados (el PP tiene 40) para sacar adelante las iniciativas parlamentarias. Atraer a 10 de los 13 diputados de Vox es una opción pero sin los populistas dentro del Gobierno valenciano se abre ley abanico de negociaciones con PSPV y Compromís.
Hay votaciones en las que la disciplina de partido de Vox se puede poner a prueba. Los Presupuestos de la Generalitat para 2025, que se negociarán a la vuelta de verano serán una prueba de fuego para ver cómo ha quedado de tocado el grupo parlamentario de Vox.
Incertidumbre
Esa tensión se está trasladando a diversos cuadros del partido en Ayuntamientos de referencia como Valencia y Elche en los que temen que haya "un efecto contagio" que acabe por suponer la ruptura del pacto de Gobierno con el PP.
Juanma Badenas, portavoz de Vox en el consistorio valenciano ya ha mostrado su desacuerdo con una decisión de María José Catalá en relación a la concesión de una licencia de obra para finalizar el nuevo estadio del Valencia CF sin consultarle.
No hay ruptura, aseguran, aunque el comunicado público de Badenas anticipa una cohabitación algo más tensa que en los últimos meses.
En una situación de incertidumbre se encuentran también los dos diputados de Vox en la Diputación de Valencia, que no forman parte del Gobierno, pero que dan apoyo exterior para que Vicente Mompó siga en la Presidencia.
Vox en la Comunidad Valenciana ha tenido algunos capítulos de rivalidades internas pero la decisión de Abascal ha horadado la estructura, aunque todos los que critican la imposición de su presidente nacional lo hacen, de momento, en privado.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación