Los cálculos electorales que ahora mismo tiene Compromís para la cita autonómica del 28 de mayo indican que Ximo Puig no será presidente sólo con el apoyo de los nacionalistas, sino que indefectiblemente necesitará la suma de los escaños de Podemos para mantenerse al frente de la Generalitat.
A finales del mes de noviembre y durante el mes de diciembre en el PSPV había confianza en que Ximo Puig pudiera ser por tercera vez presidente del Gobierno valenciano, incluso, si Podemos no entraba en la Cámara autonómica al no poder superar el 5% exigido por la Ley Electoral Valenciana. Los vaticinios en ese momento iban en torno a que el PSPV podría sacar entre 34-35 escaños y Compromís 15-16.
El paso del tiempo ha provocado que la percepción haya ido variando hasta el punto de que las encuestas de la formación nacionalista que lidera Joan Baldoví no le dan a los socialistas más de 33 escaños en una horquilla que, en su parte baja, es de 30 diputados.
Máximo 49 escaños
Las fuentes de Compromís consultadas por Vozpópuli entienden que Baldoví sí puede mantenerse en los 15-16 escaños que preveían hace unos meses, por lo que la suma máxima de PSOE y Compromís sería de 49, a uno de la mayoría requerida para formar el Gobierno que está situada en los 50.
La distribución más probable de diputados para Compromís sería, según sus estimaciones, de 4 diputados por la circunscripción de Alicante, 8 por la de Valencia y 3-4 por la de Castellón para esa cifra total de 15-16 escaños que supondría una pérdida de 1 ó 2 diputados respecto a los 17 que obtuvo en las elecciones de 2019.
En el caso del PSOE valenciano, esa misma muestra de los nacionalistas les otorga 11-12 diputados por Alicante, 11-12 por Valencia (la que encabezará Puig) y 8-9 en la circunscripción de Castellón. Los socialistas valencianos subirían entre 3 y 6 escaños respecto a la legislatura actual y bastante por encima de las estimaciones que el CIS otorga al PSOE a nivel nacional en intención de voto.
Podemos cae un 25%
Por ello, la suma de los escaños que consiga Podemos es clave para que el denominado Pacto del Botànic pueda repetir alianza por tercer mandato consecutivo. Las cifras de Podemos, según esta muestra, supondrían una bajada del 25% de sus apoyos para pasar de los 215.000 obtenidos en 2019 (7,9%) y 8 diputados a unos 155.000 votos, que representarían el 5,9% del total.
Sería suficiente para que la lista que encabeza Héctor Illueca superara el listón electoral y entrara en el Parlamento autonómico con 5 diputados que serían 2 de la circunscripción de Alicante, otros 2 de la de Valencia y 1 por la de Castellón. Ésta sería una situación muy parecida a la que se vivió con Izquierda Unida en el Parlamento autonómico en la cita electoral de 2011.
El PP será la fuerza más votada
En estos dos meses parece difícil que Podemos caiga un punto que les deje fuera de las Cortes Valencianas, aunque si ello sucediera, a juicio de las fuentes consultadas, sería el final de Puig como presidente de la Generalitat. Y es que, en ese contexto de sólo cuatro partidos en el hemiciclo, la distribución de los restos variaría y beneficiaría claramente al PP que encabeza Carlos Mazón como fuerza más votada, circunstancia que ya no parece discutir nadie.
En concreto, al PP le atribuyen entre 33 y 36 escaños, de los que 13-14 llegarían por la circunscripción de Alicante, 12-13 serían de Valencia y 8-9 de Castellón. Mazón parece que tiene garantizado el liderazgo en porcentaje de votos y número de diputados y se quedaría al borde de la mayoría absoluta en la suma con Vox. El PP crecería así entre 14 y 17 escaños gracias, en gran parte, al hundimiento de Ciudadanos que en esta muestra no alcanza el 3% y desaparece del hemiciclo.
A la lista autonómica de Vox, con Carlos Flores al frente, le atribuyen un total de 13 escaños con 6 diputados en Alicante, 5 en Valencia, más 2 que obtendría en la provincia de Castellón. La subida de Vox sería de 3 diputados respecto a los 10 que consiguió en 2019, aunque una de sus diputadas se pasó al grupo de no adscritos, junto a otros que cuatro que abandonaron Ciudadanos.
Lo estrecho de estas previsiones, que se asemeja a lo que proyectan otros estudios demoscópicos de empresas privadas, hace que el intento que Ximo Puig ha realizado para bajar el listón electoral al 3% cobre su verdadera dimensión porque garantizaría que Podemos entrará en las Cortes Valencianas. No obstante, todo apunta, que esa iniciativa no va a prosperar y ni siquiera se presentaría en el último pleno de la legislatura previsto para la última semana de marzo, al no tener los apoyos necesarios.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación