El presidente valenciano Carlos Mazón, ha conformado un frente común con Isabel Díaz Ayuso y Fernando López Miras, contra el 'muro' ideológico que Pedro Sánchez levantó en su investidura en el Congreso de los Diputados.
Comunidad Valenciana, Madrid y Región de Murcia son tres territorios donde la gestión autonómica y la del Gobierno de España van a tener una difícil convivencia.
Críticas frente a "docilidad"
Mazón no quiere coger el testigo de Ximo Puig en cuanto a "docilidad" respecto al Gobierno, según ha expresado recientemente el presidente valenciano, y anticipa una legislatura en la que "nos vamos a oponer al ninguneo de Pedro Sánchez. Se ha acabado, es el fin de la sumisión en la Comunidad Valenciana".
La victoria electoral de Carlos Mazón el pasado 28 de mayo, unida a la reelección de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno –y las alianzas necesarias para alcanzar tal fin–, han supuesto un agrio enfrentamiento institucional que no tiene visos de remitir.
Carlos Mazón considera que "en lo único que Pedro Sánchez ha sido constante y coherente es en negar recursos a la Comunidad Valenciana".
9 millones de ciudadanos
La lista de agravios es larga y la gestión política del presidente valenciano le ha llevado a completar un tridente con su homóloga madrileña y su homólogo murciano para defenderse de lo que considera un "desprecio de Sánchez" a los algo más de 9 millones de ciudadanos que residen en las tres regiones, según han confirmado a Vozpópuli fuentes de los tres gobiernos regionales.
Ayuso es, sin duda, el espejo en el que Mazón se mira para hacer frente a Sánchez desde la gestión autonómica "sin complejos", apuntan las mismas fuentes.
Junto a la presidenta madrileña ha ido tejiendo complicidades en los últimos meses y culminará con la cumbre bilateral que se celebrará en la capital de España el próximo día 12 de diciembre.
Empresas, turismo y fiscalidad
La alianza con la presidenta madrileña es más en clave económica. Madrid necesita que el Puerto de Valencia complete la ampliación norte y posibilite una salida más eficaz de los productos que exporta a través de este recinto portuario.
Las sinergias empresariales entre Valencia y Madrid son elevadas y tanto Ayuso como Mazón quieren aprovecharlo.
El turismo es otro frente común contra el Gobierno de España. Muchos residentes de la capital de España acuden cada periodo vacacional a las playas de la Comunidad Valenciana que llevan varios años de desatención del Ejecutivo central por la regresión del litoral que requiere de actuaciones urgentes.
La mejora de los tiempos del recorrido en AVE hasta Alicante desde la capital de España es otro objetivo en el que ponen el acento ambos dirigentes, así como la llegada de viajeros de Valencia y Alicante a Madrid a través de la estación de Atocha y no desde Chamartín como se realiza en la actualidad.
La política fiscal es otro de los puntos que les une y la libertad a la hora de rebajar los impuestos les enfrenta al control férreo que quiere ejercer Pedro Sánchez –que defienden líderes socialistas como el valenciano Ximo Puig– que no quieren que haya competencia fiscal entre Autonomías.
Agua e infraestructuras
Hacia el sur, Mazón ha establecido lazos fuertes (siempre los ha tenido) con el presidente murciano, Fernando López Miras. La complicidad se extiende a cuestiones de primera necesidad como la falta de agua.
La desertización de parte del territorio murciano y del sur alicantino obliga a recibir agua del trasvase Tajo-Segura que está más cuestionado que nunca por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
López Miras y Mazón han realizado varias reuniones de coordinación de los recursos jurídicos planteados ante los recortes del citado trasvase para que puedan ser más efectivos.
El campo valenciano y murciano configuran gran parte de la denominada 'huerta de España' y garantizar aportes hídricos sin la gravosa utilización del agua desalada, o minimizarla al máximo posible, es un reto irrenunciable para esta legislatura.
Una infraestructura como el Corredor Mediterráneo también une a la Región de Murcia y la Comunidad Valenciana para hacer competitiva y eficaz la salida de sus productos de exportación hacia Europa.
La red ferroviaria avanza con muchos retrasos desde hace años y por ello, Mazón y López Miras se unieron para denunciarlo este pasado jueves en Madrid junto a los empresarios de sus respectivas regiones.
Mazón tiene claro que el Corredor Mediterráneo, la libertad fiscal, la garantía de agua necesaria, la ampliación del Puerto de Valencia y la pujanza del turismo son cuestiones que marcarán su agenda esta legislatura.
Financiación, sector cerámico y nuclear
Junto a esas materias, coloca en el primer escalón de las reivindicaciones la reforma del modelo de financiación que penaliza en la actualidad a la Comunidad Valenciana provocando un déficit estructural en las cuentas anuales de la Generalitat.
Las ayudas al sector cerámico, la mejora de las inversiones de los Presupuestos Generales del Estado en la región o la continuidad de la central nuclear de Cofrentes más allá del horizonte de 2030 completan ese ramillete de peticiones que Mazón articulará contra Pedro Sánchez.
Conferencia de Presidentes
El presidente del Gobierno tiene el reto de solventar algunas de esas problemáticas que necesitan una urgente solución. La primera medida que Mazón le ha reclamado es la convocatoria de una Conferencia de Presidentes Autonómicos para conocer de primera mano los acuerdos a los que Sánchez ha llegado con PNV, Bildu, ERC y Junts y cómo afectarán al resto de regiones.
Si Sánchez se somete a las peticiones de los independentistas catalanes y vascos quedará poca parte de la caja común para repartir en otros territorios y (sin una explicación clara y compromisos para cumplir una 'agenda valenciana') se enfrentaría a una situación política muy complicada para el PSOE en la Comunidad Valenciana que muchos dirigentes del PSPV advierten en los últimos días.
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