Comunidad Valenciana

El Gobierno de Puig muestra su "decepción" con Sánchez por la pobre inversión en Alicante

La portavoz del Consell, Aitana Mas, ha sido la encargada de verbalizar el enfado de Puig con Sánchez por unas cuentas que dificultan su discurso para la campaña electoral y pide "presionar" al Gobierno

El Gobierno valenciano de Ximo Puig ha realizado una valoración muy desfavorable de lo que suponen los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2023 para la Comunidad Valenciana. La encargada de verbalizar el enfado del presidente valenciano ha sido la portavoz del Ejecutivo autonómico, Aitana Mas, quien ha calificado estas cuentas para el próximo ejercicio como "una decepción" en la rueda de prensa posterior a la celebración del pleno del Consell que ha tenido hoy lugar en Crevillente.

Mas ha analizado que la inversión total en la Comunidad Valenciana para 2023 está cifrada en 1.269 millones de euros (el 9,4% del total) pero por debajo del 10,7% que supone el peso demográfico de la región. A nivel autonómico esa inversión "se acerca", ha dicho, aunque menos de lo que hubieran querido, al porcentaje de la población en el conjunto de España pero ha tildado de "muy preocupante" las inversiones previstas para la provincia de Alicante.

La última en inversión por habitante

Aitana Mas ha explicado que los Presupuestos Generales del Estado "son una decepción" y resultan "especialmente negativos para las comarcas alicantinas". Los PGE han previsto una inversión de 86 euros por persona en Alicante cuando ninguna otra provincia de España baja de los 100 euros por habitante y la media nacional se sitúa en los 283 euros.

El enfado entre la sociedad civil alicantina es considerable porque del total de inversiones en la Comunidad Valenciana la provincia de Alicante se lleva el 12% pese a suponer el 40% de la población (la quinta más habitada en España). Ese retroceso en las inversiones respecto a 2022 sitúa a Alicante en una encrucijada en cuanto a sus oportunidades de crecimiento.

Ximo Puig es consciente del enfado que han mostrado empresarios y diversos sectores de la sociedad alicantina y teme que la elaboración de las cuentas estatales dificulte su discurso de vertebración para la próxima campaña electoral. Sánchez ha puesto una piedra grande en el camino de Puig en su intento de repetir como presidente autonómico y el político de Morella no lo ha encajado nada bien, según las fuentes consultadas por Vozpópuli.

Hay que hacer un 'lobby' para presionar al GobiernoAitana Mas

Por eso, Aitana Mas, ha sido poco diplomática y ha instado "a la sociedad civil y a todos los grupos políticos en el Congreso para que hagan de 'lobby' para presionar al Gobierno y que suba las inversiones en Alicante" durante la tramitación parlamentaria del anteproyecto de Ley.

Más aún, la portavoz del Gobierno valenciano ha recordado que además las previsiones recogidas en los PGE no han tenido luego una correspondencia con la ejecución. "Tenemos un grave problema de falta de ejecución de las partidas previstas".

Confío en que se atiendan algunas reivindicaciones históricas a través de enmiendasXimo Puig

Puig también se ha manifestado al ser cuestionado por los PGE al finalizar su visita al museo Mariano Benlliure en Crevillente y ha confirmado que hay que "subsanar" las necesidades de la provincia de Alicante y ha confiado en que "se atiendan algunas de las reivindicaciones históricas a través de enmiendas".

Este es el segundo desencuentro grave que tiene el Gobierno de España con el Ejecutivo autonómico valenciano en apenas dos semanas. El primero llegó a cuenta de la reforma fiscal que Ximo Puig planteó pese a la oposición de Sánchez a que la anunciara porque rompía el discurso en materia fiscal del Ejecutivo que lidera. Fue la escenificación pública de la ruptura de los barones territoriales del PSOE con su jefe de filas.

Hoy ha llegado el segundo por las escasas inversiones de los Presupuestos Generales del Estado en la provincia de Alicante que se queda a la cola en España. Y está por ver cuál será la reacción del Gobierno de Pedro Sánchez a este nuevo pulso que le ha lanzado el Gobierno valenciano de Ximo Puig.

Ribó se suma a las críticas

Las críticas a estas cuentas estatales para 2023 también han llegado por parte del alcalde de Valencia, Joan Ribó, quien ha advertido que los PGE son "insuficientes" y censura los "agravios comparativos" con Madrid, Barcelona o Canarias y ha lamentado que Valencia "siempre está a la cola en la ejecución de inversiones de infraestructuras".

Ribó ha pedido a Sánchez que "mejore el trato" para los valencianos y que "atienda de una vez por todas las reivindicaciones históricas de la ciudad". Ha puesto como ejemplo la partida prevista para la Autoridad del Transporte Metropolitano de Valencia, que va a tener una cantidad de 38 millones de euros, la misma que en 2022, y ha avisado que cifra es "totalmente insuficiente e inasumible en una situación de emergencia climática e inflacionaria".


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