El nivel de renta de los hogares de la Comunidad Valenciana empieza a alejarse significativamente de la media nacional en una progresión que se mantiene en los últimos cuatro años y que demuestra las dificultades de la economía en la región.
Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) al cierre de 2023 revelaban que la tendencia desde 2020 se mantiene. La brecha con las regiones que tienen las economías más prósperas del país se está abriendo con el consiguiente perjuicio para los habitantes de Valencia, Alicante y Castellón.
La renta de los hogares valencianos en 2023 era de 31.324 euros frente a los 34.821 euros que refleja la media nacional.
Una distancia sideral
En total, la distancia es de 3.497 euros y la Comunidad Valenciana ya tiene por encima en este indicador ligado a la calidad de vida a un total de diez Comunidades Autónomas –además de las ciudades de Ceuta y Melilla– y donde Madrid, Navarra y País Vasco lideran esa clasificación con rentas superiores a los 40.000 euros, mientras que Cataluña se acerca a los 39.000.
Por debajo en nivel de renta, los valencianos sólo encuentran ya a los ciudadanos de seis Autonomías.
Es el caso de Extremadura, Andalucía y Castilla-La Mancha que ocupan los tres últimos puestos y que no llegan al umbral de los 30.000 euros. Murcia lo supera por poco, al tiempo que Galicia y Canarias están por debajo de la Comunidad Valenciana pero a poca distancia superando mínimamente los 31.000 euros.
Desde 2020
La brecha con la media nacional, en el caso de la Comunidad Valenciana, se ha ido agrandando desde 2020. En ese año los hogares valencianos presentaban un nivel de renta de 27.948 euros y se situaban a 2.742 euros del conjunto nacional. Un año después la renta crecía hasta los 27.603 euros pero la distancia con la media española se elevaba hasta los 2.949.
En 2021 la renta de los hogares valencianos alcanzaba los 29.026 euros pero la distancia seguía alargándose hasta los 3.190 euros. Y en el último ejercicio contabilizado, el de 2023, los valencianos superaban ese nivel de renta y se situaba en 31.324 euros con una distancia ya de casi 3.500 euros con la media de las Autonomías.
Infrafinanciación
Este informe revela las dificultades que tiene la Comunidad Valenciana a nivel económico y donde la infrafinanciación autonómica que padece está jugando un papel crucial.
Con ese lastre la Generalitat no puede ayudar lo suficiente en el desarrollo del dinamismo económico y sus políticas están constreñidas desde hace más de quince años y centradas en la garantía de los servicios públicos fundamentales.
Las fuentes consultadas por Vozpópuli en el Gobierno autonómico que preside Carlos Mazón destacan que no quedan apenas recursos para implementar incentivos que mejoren las perespectivas económico-laborales valencianas.
Es una cuestión que también esgrimían los diferentes Ejecutivos presididos por Ximo Puig y que son la fotografía fiel de que el problema se ha cronificado.
Le sucede lo mismo a Autonomías críticas con el modelo de financiación –que está caducado más de una década–, como es el caso de la Región de Murcia, Andalucía, Galicia, Castilla-La Mancha que también ocupan el furgón de cola en el indicador de nivel de renta de los hogares en sus territorios.
Deuda galopante
La creciente actividad económica contribuye a que no haya un estancamiento serio en la Comunidad Valenciana, aunque la temporalidad de los empleos, por la importancia del sector servicios (especialmente el turismo), dificulta que suban los niveles de renta.
La deuda de la Comunidad Valenciana es la segunda en términos globales por detrás de Cataluña, pero la primera en relación al PIB regional (por encima del 42%) y las previsiones de los organismos oficiales auguran que seguirá aumentando si no hay medidas correctoras en la próxima década hasta situarse por encima del 53% del PIB.
El PIB per cápita de la Comunidad Valenciana también se aleja de la media nacional y ya está casi un 13% por debajo de la misma y donde el aumento demográfico también está teniendo una cierta incidencia.
Es por ello que desde el Gobierno valenciano inciden en la necesidad de obtener un fondo de nivelación que ayude a restañar esa distancia con la media nacional en los próximos años.
Es la única solución hasta que se afronte la reforma del modelo de financiación que permita no arrancar cada año con un déficit primario muy elevado que acaba teniendo afectación en todas las variables de la economía valenciana.
