El Ministerio de Defensa ha tramitado de urgencia y con financiación en base a fondos europeos un contrato para la mejora de las comunicaciones vía satélite en los peñones e islas de soberanía nacional próximos a Marruecos, que el reino alauí reclama para sí. Con un presupuesto estimado próximo a los 600.000 euros, las mejoras se centrarán en aquellos espacios en los que hay presencia militar permanente, ya sea del Ejército de Tierra o de la Armada: los peñones de Alhucemas y Vélez de la Gomera, así como Islas Chafarinas o la de Alborán.
De acuerdo a la documentación a la que ha tenido acceso Vozpópuli, el objeto del contrato de Defensa se centra en los nodos satélite de la I3D de estas islas y peñones; una tecnología “única” -según detalla el departamento que dirige Margarita Robles-, de “carácter estratégico”, que permite que la información llegue a todos los usuarios del Ministerio, incluidas las Fuerzas Armadas, “en tiempo y forma, y respetando la seguridad de la información requerida en cada caso”.
Aunque en estos peñones e islas ya se instaló una parte de esta tecnología, aún quedaría una segunda fase de implementación. Y este contrato licitado por la Subdirección General de Gestión Económica del Ministerio de Defensa se centra en la adquisición de estas capacidades.
Sin entrar en detalles operativos específicos, este órgano de Defensa afirma que la adquisición de esta infraestructura permitirá la “potenciación de la capacidad de transmisión satélite en Islas y Peñones [sic] de soberanía nacional”, así como “la transmisión efectiva de los diferentes tipos de servicios demandados por el Ministerio de Defensa”.
Visita de la ministra de Defensa
Cabe recordar que las Fuerzas Armadas tienen asignadas la protección y salvaguarda de los espacios de soberanía nacional próximos a Marruecos. Así, el Ejército de Tierra mantiene un destacamento de forma constante en los peñones de Alhucemas y Vélez de la Gomera -éste último unido al territorio marroquí mediante un istmo-, así como en Islas Chafarinas.
La Armada, además, mantiene sus misiones permanentes de vigilancia y disuasión con una presencia naval en la región, así como un destacamento de efectivos que protege la Isla de Alborán; la relevancia estratégica de este último espacio quedó patente con la reciente visita de la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien afirmó que “la isla ha pasado a ser una prioridad” debido al fortalecimiento del flujo migratorio irregular que alcanza esta posición.
“Esto es como un barco en medio del mar con unas condiciones complicadas, me voy muy impresionada con lo que hacen, sé que donde hay un soldado español hay mucha profesionalidad y mucha humanidad”, afirmó Robles.
Plan de recuperación y mantenimiento
Lo cierto es que después de años en los que apenas había fondos para el mantenimiento de las instalaciones militares en espacios próximos a Marruecos, el Ministerio de Defensa ha puesto en marcha una batería de proyectos para mejorar la calidad de vida de los efectivos destacados en islas y peñones, así como para reforzar algunas de sus capacidades estratégicas.
Algunos de ellos fueron tan delicados como el traslado de los restos mortales de ciudadanos españoles localizados en cementerios de estos peñones, que amenazaban derrumbe sobre el mar. También se han mejorado las instalaciones eléctricas, el suministro de agua y se ha procedido a la demolición de espacios tan significativos como la torre del reloj, en Alhucemas, cuya estructura se encontraba al borde del colapso.
Unas islas y peñones que no sólo son vestigios de tiempos pretéritos, al albergar en el pasado a comerciantes, a ciudadanos españoles del ámbito civil o, incluso, un presidio político; también representan espacios especialmente sensibles en la soberanía nacional, con el precedente de la crisis de Perejil en julio de 2002.
Y que ahora, con la mejora de las comunicaciones vía satélite -como adelantó Infodefensa y ha podido confirmar este diario a través de la documentación anexa al procedimiento-, verá reforzada una capacidad clave para el despliegue de las capacidades militares.
El Ministerio de Defensa ha tramitado de urgencia el proyecto, lo que permite acortar los plazos en los procedimientos, y contará con financiación del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea.
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