El Ministerio de Defensa no puede asumir la compra de nuevas capacidades para las Fuerzas Armadas que comprometan "grandes pagos" antes del año 2028, debido a las deudas que arrastra el departamento desde los años 90 con los denominados programas especiales de modernización.
Así lo ha avanzado la secretaria de Estado de Defensa, Esperanza Casteleiro, en su comparecencia ante la Comisión de Defensa del Congreso para dar cuenta de las partidas que recibirá el ministerio dirigido por Margarita Robles el próximo ejercicio.
El proyecto de Presupuestos presentado por el Gobierno para 2022 concede un total de 10.155,3 millones de euros para Defensa, con un crecimiento del 7,9% respecto a 2021, según ha detallado.
Una de las partidas más importantes es la destinada a los programas especiales de modernización, con un total de 2.048 millones, un incremento del 21,6% respecto a las anteriores cuentas. El pago de estos compromisos adquiridos hace tres décadas agotan la partida para inversiones e impiden realizar "grandes inversiones" antes del año 2028.
En cualquier caso, la secretaria de Estado ha calificado de "notable" la dotación asignada para el ministerio en los Presupuestos para 2022, aunque ha reconocido que estas cantidades no atienden a su "nivel de ambición".
La número dos del ministerio ha explicado que el objetivo es asumir los compromisos internacionales que tiene adquiridos España, así como contar con los recursos humanos y materiales necesarios para hacer frente a "los riesgos y amenazas" del entorno.
Según ha defendido, las cuentas asignadas para Defensa en el proyecto de 2022 permitirán avanzar por esa senda, pese a que el impacto de la crisis sanitaria y económica generada por la pandemia del coronavirus no permite "atender el nivel de ambición del ministerio". Eso sí, ha asegurado que la "operatividad" de las Fuerzas Armadas está "garantizada".
Gastos corrientes
Casteleiro ha remarcado la reducción que sufrieron las partidas para gastos corrientes entre los años 2008 y 2014 y que no han podido ser recuperadas aún. En el año 2008 la dotación en este capítulo fue de 1.073 millones, frente a los 909 millones previstos para 2022. Pese a ello, su crecimiento es del 1,5% respecto a 2021. Con estos fondos se sufragan gastos de personal como su alimentación, vestuario o formación, los gastos de adiestramiento o los gastos fijos de las unidades.
Uno de los déficits que arrastran los presupuestos de Defensa desde hace años es el relativo al sostenimiento y mantenimiento de los materiales de las Fuerzas Armadas, que ha reconocido la secretaria de Estado también para 2022. En el proyecto presentado por el Ejecutivo, la dotación para este objetivo es de 573 millones, con un incremento de 60,4 millones respecto a 2021, distribuidos en función de unas prioridades establecidas.
Casteleiro ha remarcado la importancia de la inversión en la industria de defensa, que ve como "un instrumento clave para el impulso y recuperación económico y social del país" por sus retornos, contribución al Producto Interior Bruto (PIB) y generación de empleo.
En cuanto a los miembros de las Fuerzas Armadas, el ministerio incluye en gastos de personal un total de 133,7 millones, con un incremento del 2,7%. La secretaria de Estado ha reconocido que no cumple la aspiración de mejorar las retribuciones de los militares, aunque ha garantizado que siguen trabajando con este objetivo.
Precisamente esta ha sido la única crítica que ha hecho a los Presupuestos el portavoz de Podemos, Juan Antonio Delgado, quien ha defendido las cuentas presentadas por el Ejecutivo pero ha pedido "buscar dinero hasta debajo de las piedras" para mejorar las retribuciones en el seno de las Fuerzas Armadas.
Críticas de la oposición
No comparten esa visión de los Presupuestos los diputados del PP, Vox o Ciudadanos, que han acusado al Gobierno de basarlos en una previsión "irreal" de crecimiento. "Se conforma con unos Presupuestos que incluyen un déficit estructural para nuestras Fuerzas Armadas, ha censurado el portavoz naranja, Miguel Gutiérrez, quien ha remarcado las "carencias" en mantenimiento, sostenimiento o personal. Por su parte, el diputado de Vox Agustín Rosety ha definido las cuentas de "carentes de racionalidad y caóticas en su ejecución" y ha acusado a Defensa de "abusar" de la "disciplina y espíritu" de los militares. También el portavoz del PP, Juan Antonio Callejas, ha criticado que se trate de unos Presupuestos "lastrados" de salida por una previsión "excesivamente optimista" de crecimiento del PIB y ha repasado las partidas de Defensa que cree que tienen carencias.