La crisis de la pandemia del coronavirus y el estado de alarma para evitar su expansión han provocado que el Sistema de Atención a la Dependencia vuelva a decrecer en el mes de mayo como ya hiciera en abril, ya que los beneficiarios con derecho a prestación han caído en 18.307 este mes respecto a abril (-1,3%).
Así se desprende del informe 'Impacto del COVID-19 en el Sistema para la Autonomía y Atención a la dependencia (SAAD)', al que ha tenido acceso Europa Press, con datos a 31 de mayo de 2020 del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Asimismo, la estadística del Ministerio refleja que los beneficiarios con prestación han sido 10.656 menos en mayo que en el mes precedente (-1%) y los beneficiarios sin prestación pendientes de recibirla han decrecido en 7.651 (-2,9%).
De enero a mayo de 2020 han fallecido 120.022 personas que tenían una solicitud de dependencia, un 29,7% más que en el mismo periodo del año anterior (27.496 fallecidos con solicitud más). De ellos, 9.600 personas fallecieron sin haber sido aún valoradas, mientras que 110.422 ya tenían la resolución de grado.
En este sentido, el estudio revela que, de las 100.962 personas que fallecieron y que tenían derecho a prestación, 83.823 ya contaban con una resolución (21.545 personas más que en enero-mayo de 2019, lo que supone un incremento del 34,6%), mientras que 17.139 murieron pendientes de recibir la prestación (3.243 personas beneficiarias con derecho a prestación pendientes de recibirla fallecidas más que en el mismo periodo de 2019, lo que supone un aumento del 23,3%).
En relación con las solicitudes, el informe indica que han disminuido en mayo en 24.501 respecto a abril de 2020 (-1,3%), al pasar de 1.884.577 en abril a 1.860.076 en mayo. Las resoluciones también han registrado 21.389 resoluciones menos que el mes anterior (-1,2%).
Respecto a diciembre de 2019, las tasas de variación acumulada más negativas se han registrado en los beneficiarios con derecho a prestación pendientes de recibirla (-5,9% ) y en los beneficiarios con derecho a prestación (-2,%).
Por su parte, las solicitudes han caído en mayo un 1,8% respecto a diciembre de 2019 y las resoluciones han descendido un 1,5%. En el caso de los beneficiarios con prestación el descenso es del 1,1% respecto a diciembre del año pasado.
La última estadística publicada anterior al estado de alarma corresponde a 29 de febrero de 2020. Así, las tasas de variación a 31 de mayo respecto a febrero, ordenándolas de más negativa a menos han sido los beneficiarios con derecho a prestación pendientes de recibirla (-5,2%, con 13.870 menos), los beneficiarios con derecho a prestación (-2,3%, con 31.281 menos), las solicitudes (-2,1%, con 39.309 menos), las resoluciones (-2%, con 35.226 menos) y los beneficiarios con prestación (-1,6%, con 17.411 menos).
Caen las prestaciones
En materia de prestaciones, el informe señala que ha disminuido en mayo de 2020 en 11.919 respecto a abril de 2020 (-0,8%), hasta las 1.400.404. Supone una caída del total de las prestaciones del 1,4%, con 19.584 prestaciones menos que el 29 de febrero de 2020.
Por tipos de prestación, las que más han caído durante el último mes han sido la atención residencial (-3,9%, con 6.384 prestaciones menos); la promoción de la autonomía personal y prevención de la dependencia (-1,7%, con 1.108 menos); la ayuda a domicilio (-1,4%, con 3.396 menos); la prestación económica vinculada al servicio (-1,2% intermensual, con 1.877 prestaciones menos); los centros de día/noche (-0,8%, con 752 menos), y la teleasistencia (-0,4%, con 933 menos).
En el lado opuesto, los tipos de prestación cuyas prestaciones se han incrementado en el último mes han sido la prestación económica de asistencia personal (+1,1%, con 89 más), y la prestación económica de cuidados familiares (+0,6%, con 2.442 más que en abril).
La investigación indica que en todas las comunidades autónomas, así como en Melilla, ha crecido el número de solicitudes respecto a mayo de 2019 excepto en La Rioja (-4%, con 610 menos), Aragón (-3,9% , con 2.017 menos), Castilla-La Mancha (-2,9% , con 2.569 menos) y Galicia (-2,7% , con 2.135 menos). Así, donde más han crecido las solicitudes han sido en Murcia (+15,8%, con 7.199 más) y la Comunidad Valenciana (+15,4%, con 20.039 más).
Sin embargo, en todas las comunidades autónomas, así como en Ceuta y Melilla, ha disminuido el número de solicitudes respecto a abril de 2020 excepto en Canarias (1,4%, con 736 más) y la Comunidad Valenciana (0,1%, con 192 más).
Empleo en el sector de la dependencia
Por otro lado, el estudio recoge la evolución del empleo en dependencia en base a los datos de la Tesorería General de la Seguridad Social. Según los datos de afiliación a fin de mes de abril, han disminuido respecto a marzo las afiliaciones en Servicios sin alojamiento (-1,8%, 3.227 afiliaciones menos), mientras que las afiliaciones en Asistencia en establecimientos residenciales se han incrementado (0,6%, 1.562 afiliaciones más).
Por tanto, las afiliaciones a 30 de abril en los Servicios Sociales directamente ligados con la dependencia han disminuido un 0,4%, con 1.665 afiliaciones menos que en marzo de 2020. Además, los Convenios especiales de cuidadores no profesionales se han reducido un 0,1% intermensual, con 37 convenios menos.
Respecto a los datos anteriores al estado de alarma, las afiliaciones en los Servicios sin alojamiento han disminuido en 5.688 afiliaciones desde febrero de 2020 (-3,1%), mientras que las afiliaciones en Asistencia en establecimientos residenciales se han incrementado en 8.439 (3,3%).
Como resultado, las filiaciones a fin de mes en los Servicios Sociales directamente ligados con la dependencia han crecido en 2.751 afiliaciones (0,6%) respecto a febrero de 2020. Por otro lado, los Convenios especiales de cuidadores no profesionales han aumentado en 866 convenios respecto a febrero de 2020 (1,5%).
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