La Policía Nacional ha detenido este martes a los dos presuntos autores del mediático y millonario robo de 45 botellas de vino perpetrado el pasado mes de octubre en la bodega Atrio de Cáceres, la pareja sustrajo un botín valorado en 1.648.500 de euros.
Los arrestados fueron localizados en Croacia y según detalla el propio cuerpo policial, estos contaban con una gran profesionalidad, especialización y perfecta planificación del robo. Además, se pudo comprobar que visitaron tres veces el restaurante antes del robo para hacer un estudio previo del lugar. Asimismo, la Policía Nacional apunta que la detención fue dificultosa ya que los autores del robo abandonaron España tras acometer el robo.
La detención llega tras cinco meses meses de investigación a cargo de la Unidad Central de Delincuencia Especializada y Violenta de la Policía Nacional y después de que los propietarios del restaurante Atrio de Cáceres, Jose Polo y Toño Pérez, dierán por cerrado el asunto del robo al no encontrar las botellas sustraídas.
Dentro de las 45 botellas, destaca el vino más valorado por Atrio: el Chateau d'Yquem de 1806, tasado en 350.000 euros en la carta del restaurante, ya que es considerado el mejor caldo dulce del mundo. El restaurante cacereño, de dos estrellas Michelin y con una de las bodegas de vino más importantes del mundo.
El robo
El hotel restaurante Atrio de Cáceres, sufrió hace cinco meses un robo en su bodega de donde se llevaron 45 botellas de vino --38 de Romanée Conti y 7 de Château d'Yquem-- una de ellas de 1806 comprada en Londres en el año 2000 y valorada en unos 310.000 euros.
Los hechos se produjeron en la madrugada del 26 al 27 de octubre cuando una pareja que se alojaba en el hotel pidió algo de comer hacia la una de la madrugada y la persona encargada de recepción, con el ánimo de atenderles, fue a la cocina por si podía proporcionarles algo rápido para picar.
El objetivo de la petición era apartar al recepcionista del visionado de las cámaras, momento que aprovecharon para bajar a la bodega y perpetrar el robo. Después, se marcharon del hotel a pie en torno a las cinco de la madrugada y, desde entonces, no ha trascendido nada de los ladrones y del botín.
En aquellos momentos, Jose Polo, uno de los propietarios de Atrio, aseguró que, aunque no se ha podido cuantificar el precio del botín, es de un "alto valor económico" pero, sobre todo, "sentimental", ya que muchas de las botellas no se pueden sustituir porque son series limitadas y es difícil cuantificarlas en el mercado.
"Nos han hecho mucho daño pero me voy a dar un día de luto porque la vida continúa y seguiremos contando nuestra historia y, ahora ya, hasta el robo formará parte de la historia de Atrio", subrayó Polo el día después de los hechos.
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