La exasesora de Podemos Dina Bousselham se ha opuesto a la petición de Vox de que el exlíder de la formación Pablo Iglesias declare en calidad de investigado ante el juez de la Audiencia Nacional que investiga el presunto robo de la tarjeta de su móvil en el marco del denominado 'caso Villarejo'.
"Entendemos que no procede en absoluto la declaración de Iglesias en calidad de investigado, puesto que no ha tenido ninguna participación en tres de cinco los hechos investigados más allá de la entrega de una tarjeta", ha señalado.
En un escrito de 10 de febrero, al que ha tenido acceso Europa Press, la defensa se ha mostrado en contra de la solicitud de Vox y ha asegurado que Iglesias es "perjudicado" y "no es objeto de investigación alguna". Así, ha recordado que Bousselham ha declarado que pudo acceder al contenido de su tarjeta y "comprobar que se trataba de información del teléfono móvil" que le habían sustraído, sin saber si era el original de la tarjeta o un duplicado.
Bousselham ha insistido en que en el marco de la investigación ha quedado acreditado que "no consta que exista ningún acervo indiciario que permita inferir una intervención humana" que hiciera que la tarjeta dejara de funcionar correctamente. Así, ha subrayado que solo consta el "lijado del lápiz óptico realizado por la empresa Recuperación Express". En este sentido, la defensa ha explicado que dado que Bousselham entregó la tarjeta a dicha compañía --"intacta y sin daños físicos-- y que "el único daño existente se corresponde con el lijado anteriormente reseñado, no es cierto que se produjera una entrega a mi representada de un tarjeta destruida o quemada o con daños".
La exasesora de Podemos ha indicado que es "ilógico" que Vox insista en dar a Iglesias "la oportunidad de ser oído ante un posible juicio oral". Según ha dicho, dichas afirmaciones "no tienen otra explicación que una actuación de 'mala fé', intentando la intoxicación informativa" y "continuando un juicio paralelo al judicial" contra ella y el exvicepresidente.
Ni ella ni su pareja
Asimismo, la defensa ha considerado que "no procede" que Bousselham y su pareja declaren "en relación a la responsabilidad de ningún delito", tal y como ha solicitado Vox. Ha recordado que ambos denunciaron el robo de sus terminales móviles y que ella amplió dicha denuncia cuando se difundió la información contenida en el teléfono que le habían sustraído. "No hay ningún hecho denunciado que sea falso", ha señalado la letrada.
En el escrito remitido al Juzgado Central de Instrucción Número 6, Bousselham ha mostrado su oposición parcial al recurso de reforma interpuesto por Vox. La exasesora, sin embargo, ha coincidido con los de Abascal en la necesidad de tomar declaración al ex director adjunto operativo de la Policía Nacional Eugenio Pino.
Ha señalado que con la testifical del ex alto mando "podrían surgir nuevos datos que precisen de investigación, inclusive, en su caso, previa desclasificación de la operación policial relativa a la financiación del partido político Podemos a la que se refieren los investigados, que presuntamente se estaría produciendo en esas fechas". Así, ha pedido que se revoque la decisión del juez de finalizar la investigación y, por ende, ha reclamado que se acuerde la prórroga de las diligencias para investigar la actuación del comisario jubilado José Manuel Villarejo.
Bousselham ha indicado que, al igual que sucede en la pieza 'Kitchen', "resulta probable" que el robo de su teléfono "se hubiese podido ordenar desde el Ministerio del Interior o la DAO, utilizando medios policiales y/o fondos reservados para conseguir información relativa a la financiación del partido político".
A su juicio, se podría haber utilizado el contenido de lo descubierto en la tarjeta con el objeto de realizar una "campaña mediática con fines claramente electorales y partidistas contra Iglesias en una maniobra de intoxicación informativa" cuando era candidato la presidencia del Gobierno, "facilitando la información (...) a los medios a través de la relación directa entre los periodistas y Villarejo".
Por ahora, está previsto que Bousselham, su pareja y el exDAO declaren en calidad de testigos ante el juez Manuel García-Castellón el próximo 9 de marzo. El magistrado acordó estas citaciones días después de que pusiera fin a la instrucción al considerar que estaba agotada después de varios años de investigación. El titular del juzgado tomó esta decisión tras recibir un informe de la Policía Científica que certificaba que la mini SD presentaba daños irreparables, por lo que fue imposible conocer su contenido y, por tanto, quién fue la última persona que tuvo acceso a la misma y cómo acabó inservible.
Reclama la expulsión de Vox
En el marco del escrito, la defensa de la exasesora de Podemos también ha solicitado al Juzgado Central de Instrucción Número 6 que, "en virtud del Estatuto de Protección a la Víctima", se proceda a la expulsión de Vox del procedimiento "por su clara utilización torticera del proceso".
A su juicio, la intervención de la formación liderada por Santiago Abascal "tiene claramente como fines la 'lucha partidista' y por tanto, se aparta de la legitimación que le se le confiere constitucionalmente para el ejercicio de la acusación popular".
En este sentido, ha reprochado a Vox que insista en la "investigación de las víctimas" y que afirme "la existencia de un delito de daños informáticos y otro de denuncia falsa sin tan siquiera utilizar presunciones respecto de los investigados", "vulnerando flagrantemente" los derechos de Iglesias y Bousselham.
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