Los Mossos d'Esquadra no compartieron casi información con la Policía Nacional una vez que fracasó la 'Operación Jaula' para detener a Carles Puigdemont. Vozpópuli ha tenido acceso a la notificación que se envió varias horas después de la fuga del expresident con los escasos datos que proporcionaron los efectivos de la policía autonómica catalana. Los apuntes proporcionados ya eran públicos cuando se difundieron ya que las televisiones captaron el momento de la huida del independentista.
Esta comunicación de hechos relevantes está difundida por la Dirección Adjunta Operativa (DAO) de la Policía Nacional. El formulario se envió a los miembros de la Jefatura Superior de Cataluña por el Sistema Consulta Imputado Conocido (SCIC). El asunto que marca el documento es la 'Activación de la Operación Jaula'.
Este dispositivo fue el que desarrollaron los Mossos d'Esquadra para detener a Carles Puigdemont. En el marco de este operativo, la policía catalana informó a la Policía Nacional que habían activado a los agentes por regiones y en el global de Cataluña por la presencia del líder independentista que tenía una orden vigente. También se comunicó el modelo, color y la matrícula del vehículo que se buscaba con tres ocupantes, "uno de los cuales sería Carles Puigdemont".
"Mossos d'Esquadra no aporta más información", finaliza brevemente el documento al que ha tenido acceso Vozpópuli. Y es que los datos que compartieron con los agentes de la Policía Nacional eran básicamente los conocidos por todo el panorama mediático ya que la fuga de Puigdemont fue captada por varios medios de comunicación. No se aportó características físicas de los ocupantes del coche ni detalles que pudieran ayudar a su detención.
Los mensajes para detener a Puigdemont
Fuentes policiales consultadas por Vozpópuli destacan casi dos horas después, en torno a las doce de la mañana, fue cuando se avisó a los miembros de la Unidad de Intervención Policial (UIP) para que vigilaran los puntos de Cataluña. A pesar de eso, no se dispuso un dispositivo acorde a la detención de Puigdemont ya que el peso de la operación fue desarrollado por los Mossos.
Precisamente, en los días previos al discurso de Puigdemont de hace una semana, tanto Interior como los mandos de la Policía Nacional y la Guardia Civil ofrecieron ayuda a la policía regional para colaborar en su detención. Se rechazó una vez por vía oficial y varias de forma extraoficial, lo que generó cierta incertidumbre entre los funcionarios.
Existe cierto malestar entre los agentes ya que consideran que hubo inacción de funciones y no precisamente por su parte. Es más, el mismo día del discurso de Puigdemont se difundió de forma masiva por sus grupos de mensajería la fuga del expresident. "Está vigente su reclamación judicial y en caso de ser visto se proceda a su inmediata detención y comunicación a UCOT", detallaron los funcionarios en estos textos.
Se pidió especial atención a los agentes desplegados en "puestos fronterizos terrestres, marítimos y aéreos". Todo ello mientras los Mosso elaboraron 'Jaula' sin éxito. Una de las claves que citan y critican las fuentes policiales consultadas es la poca vigilancia que se dispuso en la frontera con Francia que podría haber ayudado en la detención de Puigdemont.
"Ha derivado nuevamente en una situación escandalosa y vergonzosa, permitiendo la fuga de Puigdemont tras regresar a España a pesar de estar reclamado por la justicia por diversos delitos", afirmaron desde el sindicato policial Jupol a Vozpópuli.
Esta situación, según su portavoz, Ibón Domínguez, demuestra una vez más que "para el Ministerio del Interior existe una policía de primera, como son los Mossos d´Esquadra, que nunca está cuando se le necesita y una policía de segunda, Policía Nacional y Guardia Civil, que siempre está cuando es necesario, a pesar de seguir discriminados por el Gobierno, sin la Equiparación Salarial, la Jubilación Digna ni el reconocimiento como profesión de riesgo". Unos derechos, ha añadido, "que sí que tienen reconocidos los Mossos d´Esquadra", quienes no pudieron apresar a Pugidemont.
El "objetivo operativo" de Puigdemont
A pesar de todas estas circunstancias el informe del Ministerio del Interior remitido al juez Pablo Llarena se muestra tajante. "Ha sido, es y será, hasta su cumplimiento, un objetivo operativo para todas las unidades y servicios policiales del Ministerio del Interior", dictaron.
Cabe recordar que Puigdemont se encuentra incluido en la Base de Datos de Señalamientos Nacionales desde el 3 de noviembre de 2017, con sucesivas modificaciones posteriores en función de las distintas situaciones procesales.
El informe de Interior detalla que, por los canales y medios habituales de comunicación, los Mossos d’Esquadra informaron al ministerio del diseño de su dispositivo específico y especial para proceder a la detención del expresident una vez fuese localizado. Se ofreció "cualquier apoyo operativo" por parte de Policía Nacional y de Guardia Civil que precisase, "sin que fuesen requeridos tales apoyos más allá de los habituales prestados a través de la mesa de coordinación operativa y de intercambio de información e inteligencia".
"No realizaron operativos paralelos específicos para garantizar la seguridad del acto de investidura en el Parlament y la detención, en el marco de dicho servicio", afirmó Interior. Una afirmación correcta que es cuestionada por los agentes ya que consideran que se podría haber hecho mucho más para evitar la fuga de Puigdemont.
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