España

Sánchez Dragó y la cárcel compartida con Tamames: así se gestó la oferta de Abascal

El escritor, que forma parte del patronato del 'think tank' de Vox, puso el nombre del economista en la órbita de Abascal tras varias semanas en busca de un "candidato neutral" que pudiera encabezar la moción

Santiago Abascal y Ramón Tamames se han dado de plazo hasta el próximo martes para decidir si, finalmente, el primero de ellos registra una nueva moción de censura contra Pedro Sánchez y el segundo se presenta como candidato a presidente del Gobierno con el fin de convocar elecciones. Tal y como reveló Vozpópuli este miércoles, el presidente de Vox contactó con el reconocido economista en el marco de la ronda de conversaciones que está manteniendo con personalidades de distintos sectores y diputados de distinto signo para poner en marcha su iniciativa parlamentaria. La misma a la que recurrió en 2020, pero, en esta ocasión, con la intención de subir a la tribuna de oradores a un aspirante "neutral, independiente y de consenso". Que no milite en ningún partido y que sea capaz de recabar el mayor número de apoyos posible, incluyendo, el de algún despistado del PSOE.

Tamames (Madrid, 1933) conocía personalmente a Abascal y a Iván Espinosa de los Monteros, pero el encargado de poner su nombre sobre la mesa habría sido el escritor Fernando Sánchez Dragó, que forma parte del patronato de la Fundación Disenso, el 'think tank' de la formación. Así lo revelan fuentes cercanas al catedrático y doctor Honoris Causa. Ambos pertenecen a la 'Generación del 56', ese grupo de universitarios opositores a Franco que, en febrero de aquel año, promovieron un manifiesto para convocar un Congreso de Estudiantes y terminaron, tras una serie de altercados, en los sótanos del penal de Carabanchel por "jaraneros y alborotadores".

Fernando Sánchez Dragó.
El escritor Fernando Sánchez Dragó.

Una propuesta "constructiva"

Han pasado siete décadas y se han seguido la pista desde entonces. Poco queda de aquel Tamames activista ligado al PCE, aunque mucho de su defensa de la Transición y del amplio consenso del arco parlamentario que tuvo como fruto la Constitución del 78 vigente. En aquella legislatura, era diputado comunista y, poco después, teniente alcalde en el Madrid de Tierno Galván. En 1985, pasó a formar parte de Izquierda Unida, partido que él mismo ayudó a fundar y que, cuatro años después, abandonaría para ingresar en las filas de Centro Democrático y Social (CDS) son Suárez. Más tarde, el autor del histórico manual universitario 'Estructura económica de España' (conocido popularmente como 'El Tamames') decidió dejar la política.

Sánchez Dragó y Tamames pertenecen a la 'Generación del 56', ese grupo de universitarios "alborotadores" que, en febrero de aquel año, promovieron un manifiesto contra Franco y terminaron en el penal de Carabanchel

Ahora, a sus 89 años de edad y justo cuando acaba de publicar su libro 'La mitad del mundo que fue de España. Una historia verdadera, casi increíble', Abascal le vuelve a brindar la posibilidad de volver a la tribuna de oradores. Fuentes del entorno del catedrático madrileño aseguran a este diario que su idea no es cargar contra ningún partido, "para eso ya están los diputados", sino hacer una propuesta "constructiva" con vistas a "mejorar" la situación que atraviesan las instituciones del país.

Empujado por la crisis derivada de la reforma del Código Penal y en plena polémica por la ley del 'solo sí es sí' y por la renovación del Tribunal Constitucional, que ya ha perdido la mayoría conservadora, las voces consultadas por este medio insisten en que el histórico parlamentario estaría dispuesto a medirse con Pedro Sánchez en un debate parlamentario, pero quiere operar con "libertad".

En declaraciones a Vozpópuli el catedrático de economía ha explicado que en este momento se encuentra valorando la oferta de Abascal y que ambos están "explorando" y "estudiando" cuáles serían las ventajas y posibles inconvenientes de presentarse como candidato y las posibilidades de recabar apoyos para poner en marcha la moción contra Sánchez.

Preguntado por las críticas que se han vertido en las redes sociales en torno a sus 89 años, Tamames asegura que lo importante no es la edad, sino estar bien y tener bien la cabeza. "El científico James Lovelock se murió el mismo día que cumplió 103 años prediciendo el final del mundo", defiende en pleno arranque de otro febrero para marcar en su calendario.

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