Juan Carlos I no volverá a residir en España aunque haya cambio de Gobierno y el PP de Alberto Núñez Feijóo alcance La Moncloa. El Emérito, que abandonó el país en agosto de 2020 después de dos meses de intensas conversaciones entre el gabinete de Pedro Sánchez y Zarzuela, tiene su domicilio fiscal en Emiratos Árabes y no piensa volver a ser contribuyente en su país. Su objetivo, eso sí, es multiplicar sus visitas a Sanxenxo y otras ciudades españolas.
Así lo confirman a Vozpópuli fuentes próximas al monarca, que conocen de primera mano su día a día en Abu Dabi y su intención de permanecer allí pase lo que pase en España. Una decisión "muy meditada" que confirmó el Juan Carlos I el pasado mes de enero, cuando comenzó los trámites para fijar su residencia fiscal en Emiratos Árabes. Desde entonces, el padre de Felipe VI se ha dedicado, en los últimos meses, a dejar "todas sus propiedades en orden", pero sin ninguna intención de establecerse de nuevo en su país.
Tal y como ha informado este diario, el Emérito se está centrando en desprenderse de propiedades a nombres de terceros y de liquidar cuentas bancarias para llevarse toda la liquidez posible a Abu Dabi... y que la futura herencia para sus hijas sea -Felipe VI renunció a ella pero no así las infantas Elena y Cristina- sea, fundamentalmente, económica y no patrimonial. Con esa hoja de ruta ya puesta en marcha, "una nueva residencia en España complicaría todo el proceso".
Sin presión fiscal ni política
Esa "complicación", advierten desde su entorno, nada tiene que ver con nada irregular, pero sí con el "ruido" que generarían nuevas declaraciones ante Hacienda... que probablemente acabaran en los medios de comunicación. En ese sentido, Juan Carlos I, que realizó varias regularizaciones ante la Agencia Tributaria, siempre ha pensado que la presión fiscal y las informaciones posteriores sobre sus acuerdos con el fisco contribuyeron decisivamente a que su imagen ante la opinión pública se devaluara y, en última instancia, tuviera que marcharse.
Manteniéndose en Abu Dabi, por tanto, evita esa presión fiscal a la espera de que también se rebaje, en su opinión y la de sus amigos, la "presión política" con el previsible cambio de Ejecutivo en España tras las elecciones generales del 23 de julio: "Una vez que llegue el nuevo Gobierno, cambiará la situación. La presión de Moncloa y de su actual entorno mediático contra el rey se van a acabar", afirman personas muy próximas al Emérito.
Una vez que llegue el nuevo Gobierno, cambiará la situación. La presión de Moncloa y de su actual entorno mediático contra el rey se van a acabar
Estas mismas fuentes afirman que "el PP de Feijóo ya ha dicho que Juan Carlos I puede venir a España cuando quiera y no van a criticar, como pasa ahora, cualquier visita". La clave, en todo caso, estará también en la reacción de Felipe VI: "Es previsible que también ponga menos inconvenientes a estos viajes al haber nuevo interlocutor en Moncloa".
Espera multiplicar sus visitas
Con su residencia fiscal establecida en Emiratos Árabes y la perspectiva de una mayor "libertad para viajar" cuando cambie el Gobierno, Juan Carlos I ha trasladado a su entorno más cercano la intención de multiplicar sus visitas a España en los próximos meses. Según personas próximas al monarca, su objetivo es "pasar temporadas" no solo en Sanxenxo, sino también en otras ciudades españolas, con Madrid y Barcelona a la cabeza.
Tal y como informó Vozpópuli, la idea del monarca es visitar la localidad pontevedresa el último fin de semana de septiembre -con las elecciones generales celebradas, las nuevas Cortes constituidas, y probablemente con nuevo Gobierno- para participar en la competición de vela que lleva su nombre: la Regata Rey Juan Carlos I.
Un mes después, el 31 de octubre, la princesa Leonor cumple los 18 años y, si se cumplen todas las previsiones, ese mismo día jurará la Constitución ante el Congreso de los Diputados. Un acto solemne en el que quiere estar presente el Rey Emérito.
El monarca, por tanto, quiere que su presencia en España se convierta en "habitual" y, de hecho, pretende acabar el año con una última visita que en absoluto pasará inadvertida: estando presente en la inauguración del nuevo Estadio Santiago Bernabéu tras las obras de remodelación, en un acto que está previsto para finales de diciembre y cuya fecha podría ser el 23 de diciembre, apenas unas horas antes del discurso de Nochebuena de Felipe VI.
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