¿Quién ha movido los hilos para intentar asesinar a Alejo Vidal-Quadras a plena luz del día en la madrileña calle Núñez de Balboa? Esa es la pregunta que la Brigada Provincial de Información de la Policía Nacional trata de resolver, con la presión añadida de tratarse de uno de los sucesos más mediáticos y de tintes políticos a los que se han enfrentado en los últimos años. La descripción del pistolero está clara, pero todos los indicios apuntan a que se trata de un sicario a las órdenes de un tercero. Y una de las hipótesis que manejan los investigadores se proyecta hasta Irán.
Vozpópuli ha localizado el escrito donde Teherán acusa al expolítico español de "apoyar el terrorismo" por su cercanía a la oposición del régimen de los ayatolás. Dicho documento está fechado el cuarto día de Aban de 1401, de acuerdo al calendario persa; convertido a estándares internacionales, corresponde al 26 de octubre de 2022, hace poco más de un año. Lleva por título el nombre de Declaración del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República Islámica de Irán sobre la imposición de sanciones contra determinadas personas e instituciones de la Unión Europea.
El escrito se emitió en el marco de una fuerte convulsión internacional tras la muerte de la joven iraní Mahsa Amini, tras ser detenida por la llamada Policía de la moral por no usar adecuadamente el hiyab, que a su vez suscitó un fuerte rechazo social en el país persa. El Consejo de la Unión Europea -al hilo de otras instituciones occidentales- aprobó la aplicación de sanciones contra personas e instituciones del régimen de Teherán.
En respuesta a esas sanciones, Irán publicó el documento donde también anunciaba sanciones contra instituciones y personas de la Unión Europea "debido a sus acciones deliberadas de apoyo al terrorismo y a grupos terroristas". En esa larga lista se recogen los nombres de empresas armamentísticas, parlamentarios europeos, periodistas... y el de Alejo Vidal-Quadras.
El expolítico, fundador de Vox, es una de las voces más críticas en España con Teherán. En estos últimos años ha mantenido contactos estrechos con la oposición iraní, entre la que destaca el Consejo Nacional de Resistencia de Irán. Su enardecido rechazo a los postulados del régimen de Teherán le ha servido para que éste califique de "terrorista" a personas y entidades que colaboran con el partido.
El mensaje de Vidal-Quadras
Esta clave alimenta la hipótesis que apunta hacia Irán. La Policía Nacional constituyó un grupo compuesto por agentes del Grupo V de Homicidios y de la Brigada Provincial de Información para hacer frente a las pesquisas. Sin embargo, este último grupo se ha quedado finalmente con las pesquisas del caso a raíz de las pruebas aparecidas. Los investigadores cuentan con el testimonio del propio Alejo Vidal-Quadras quien, una vez en el hospital Gregorio Marañón y en pleno estado de consciencia tras recibir un disparo en la cara, apuntó a su entorno más cercano que Irán era el responsable más probable de los hechos.
No es el único que ha apuntado en este sentido. Maryam Radjavi, presidenta del citado Consejo Nacional de Resistencia de Irán, calificó el suceso como "atentado terrorista": "Está claro que para la Resistencia iraní, el primer sospechoso y acusado es el fascismo religioso en el poder en Irán, contra el cual el Dr. Vidal-Quadras dedicó una parte importante de su vida", aseveró Radjavi en sus redes sociales.
La hipótesis iraní es una de las que barajan los investigadores, pero no la única. Los agentes de la Policía Nacional tendrán que tomar declaración al propio Alejo Vidal-Quadras, que se encuentra estable en el hospital Gregorio Marañón tras una compleja intervención quirúrgica que requirió la instalación de unas placas en la mandíbula. El disparo, con un proyectil 9mm, atravesó su cara sin alcanzar ningún punto vital.
"¡A ver si va a volver!"
Fuentes presenciales de los hechos detallan a Vozpópuli que el episodio se produjo antes de las dos del mediodía de este jueves, a la altura del número 42 de la calle Núñez de Balboa, en Madrid. Un individuo vestido con chaqueta negra, pantalón vaquero y casco de moto negro aguardaba a pie en la calle. Al ver a Alejo Vidal-Quadras, se acercó a él y le descerrajó el disparo en la cara, para después darse a la fuga a pie hasta la esquina con la calle Hermosilla, donde le esperaba otra persona con una moto en la que huyeron.
"¡A ver si va a volver!", llegó a pronunciar Vidal-Quadras, en pie, apoyado en un contenedor azul de obra, mientras sangraba abundantemente por la herida. Un joven en camiseta, con los brazos también llenos de sangre, trataba de taponar la herida con una prenda de vestir. Una persona que asistía al expolítico le preguntó si conocía al autor del disparo, a lo que éste respondió de forma negativa. La ambulancia tardó "3 o 4 minutos" en llegar, según indican los testigos.
La Policía localizó en Fuenlabrada la moto en la que el autor del disparo y su colaborador se dieron a la fuga. Estaba quemada, pero los investigadores estudian la trazabilidad de la pista para intentar dar con los supuestos sicarios.
Por el momento queda prácticamente descartada la opción relacionada con el crimen común: el pistolero fue directamente a por Vidal-Quadras y no trató de robarle ningún objeto, su objetivo definitivo era quitarle la vida. Ahora tratan de averiguar la identidad de los sicarios y quién los contrató para matar al expolítico español, con la pista iraní como una de las claves en las investigaciones policiales.
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