Más de un tercio de los españoles de entre 25 y 34 años se enfrenta al mercado laboral sin una cualificación mínima suficiente, pues han conseguido graduarse como máximo en la Secundaria Obligatoria (ESO), y no siempre, según apunta la OCDE. Los datos del Informe Intermedio Panorama de la Educación 2015 "confirman que el sistema educativo español tiene un grave problema de formación educativa" de estas personas, constata a su vez el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (INEE) en un análisis de esta cuestión. España, con un 35%, dobla el índice medio de la OCDE de personas de ese tramo de edad en la mismas circunstancias (empiezan la vida laboral sin un nivel mínimo de cualificación), que es del 15% en la UE, según datos de 2013.
El 44% de los españoles tan solo ha llegado a cursar la Secundaria Obligatoria, el doble que en la UE y la OCDE
Cuando se estudia toda la población adulta (25-64 años), se comprueba que el 44% de los españoles tan solo ha llegado a cursar la Secundaria Obligatoria, el doble que en la UE y la OCDE. "Los países tienen muchas buenas razones para evitar que la gente joven caiga en la trampa de entrar al mercado laboral y en la etapa adulta sin una buena cualificación", explica el director del Departamento de Innovación e Indicadores de Progreso de la OCDE, Dirk Van Damme, en un artículo recogido por el INEE.
Esto se debe a que los datos del informe muestran que el riesgo relativo de desempleo continúa siendo muy alto entre los adultos de un nivel educativo bajo. "De hecho, muchos países han identificado el problema del abandono temprano de la educación y la formación como uno de los mayores retos educativos", agrega este responsable de la OCDE.
España ha conseguido reducir el abandono en nueve puntos en los cinco años últimos, hasta situarse en el 21,9% (2014), pero sigue alejada de la media de la UE (12% en 2013). Como promedio, prácticamente el 14 % de las personas que tienen únicamente formación básica están paradas en la OCDE, el 8% de los bachilleres y titulados de FP media y el 5% de los graduados superiores.
En España se da la paradoja de que el 41% de los jóvenes (25-34 años) ha terminado enseñanzas superiores, cuando más de un tercio ni siquiera ha completado FP media o Bachillerato
En España, la tasa de desempleo de las personas con formación de ESO como máximo es del 33%. Pero además, la inserción laboral de los titulados en Secundaria postobligatoria es inferior a las medidas internacionales. Así, trabajan el 64,5% de los españoles de entre 25 y 64 años con estudios de FP media (75% en la OCDE y 75,6% en la UE). Sin son bachilleres, están empleados el 64,4 % de los españoles, mientras que son el 69,4 % en la OCDE y el 70,1 % en la UE.
El informe también llama la atención sobre que el 9% de la población española adulta tiene un título FP media, cuatro veces menos que la media comunitaria (39%). Y en Alemania llega al 60%. Otro problema de la juventud española es el de los ninis (no estudian y están desempleados), que son el 24,5% entre los 20 y 24 años (11,3% en la UE-21) y el 27,1% entre los 25 y 29 años (10,9 % en la UE-21). En España se da la paradoja, además, de que el 41% de los jóvenes (25-34 años) ha terminado enseñanzas superiores, cuando más de un tercio ni siquiera ha completado FP media o Bachillerato.
"El mensaje es claro, si los países quieren mejorar de forma sostenible e inclusiva el crecimiento económico y el progreso social deberían, no sólo expandir sus sistemas de educación terciaria (superior), sino, además, trabajar en la reducción de la tasa de gente joven con niveles educativos bajos", recomienda Van Damme.