España

El expresidente de Vox en Melilla acuerda dos años de cárcel y 80.000 euros por delitos en el colegio de médicos

La acusación representada por el Colegio de Médicos ha decidido retirar también los cargos contra el tesorero de la institución con Delgado Aboy, Salvador Saavedra Casado

El expresidente de Vox en Melilla, del Colegio Médicos de Melilla y de la sociedad pública de empleo Promesa, Jesús Delgado Aboy, ha alcanzado un acuerdo de conformidad con la fiscalía y la acusación particular por el que acepta ser condenado a dos años de cárcel y al pago de una indemnización de más de 80.000 euros tras ser acusado de apropiación indebida cuando dirigía la organización colegial médica melillense.

De esta manera, Delgado ha alcanzado un acuerdo de conformidad con el fiscal del caso y la acusación representada por los actuales dirigentes del Colegio de Médicos para ser penado con esos dos años de cárcel y el pago de algo más de 80.000 euros de indemnización, que es la cantidad que presuntamente se había apropiado, con el fin de evitar seguir con el juicio que le podría haber acarreado tres años de cárcel.

Por otro lado, la acusación representada por el Colegio de Médicos ha decidido retirar los cargos contra el tesorero de la institución con Delgado Aboy, Salvador Saavedra Casado.

Según el auto del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Melilla, Jesús Delgado Aboy fue denunciado por los nuevos responsables de la institución colegial por haber gastado más de 80.000 euros con la tarjeta bancaria del Colegio de Médicos para asuntos que no tendrían que ver con el mismo, como la compra de un perro valorado en 1.200 euros o una transferencia de cerca de 4.000 euros a la cuenta de Delgado con el concepto 'Teléfono presidente', todo ello "sin contar con la aprobación de la asamblea" de facultativos.

Tal y como recogía la resolución judicial, "de las diligencias instructoras practicadas, y especialmente de la documental obrante, así como de las declaraciones que constan en autos, se desprende la existencia de indicios racionales de criminalidad que permiten, con la provisionalidad propia del momento procesal en el que nos hallamos", imputar a Jesús Delgado Aboy y al que fuera su tesorero los hechos punibles antes citados.

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