La Fiscalía de Menores se encuentra "colapsada" por el caso de los inmigrantes de Barajas. Los funcionarios, con una plantilla ya mermada por la falta de efectivos, centran sus esfuerzos en esclarecer las edades de los solicitantes de asilo que han desembarcado en masa en las últimas semanas al aeropuerto madrileño. "Nada más llegar a España tiran su documentación a la papelera o incluso de la comen y después acuden a pedir esta condición", según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Fuentes de la Fiscalía de Menores han expresado a Vozpópuli su preocupación por las circunstancias actuales ya que en los últimos años se ha reducido la plantilla del Ministerio Público. "El problema se presenta a la hora de verificar la auténtica edad de los menores", señalan estas fuentes.
Para esclarecer los casos, la Fiscalía está trasladando a estas personas al Hospital Gregorio Marañón, que también presenta un desborde importante. Es el lugar donde se le hacen las pruebas radiológicas. Este informe médico es clave. También se realizan exámenes odontológicos. Todo con el objetivo de verificar la edad de los solicitantes.
Una edad que está en entredicho en muchos de los casos. "Nos hemos encontrado con hombres con canas que nos dicen que tienen 17 años", critica uno de los agentes de la Policía Nacional destinado en Barajas que se encarga de la seguridad de estas personas.
Los inmigrantes destruyen su documentación
Uno de los detalles que han observado estos funcionarios es que los inmigrantes vienen con la lección aprendida. Nada más aterrizar en España destruyen las pruebas sobre su identidad y origen. El objetivo es ganar tiempo en nuestro país y prolongar su estancia ante las diligencias de las autoridades.
Conocedores de la irregularidad de su situación han desarrollado todo tipo de artimañanas para poder fugarse. El sábado 13 de enero, 17 marroquíes se fugaron de las salas de inadmitidos. De este grupo de fuga, sólo se ha conseguido localizar a uno que se lesionó durante la escapada. Volvió al lugar cojo para recuperar su teléfono móvil.
Estos intentos han sido frenados con éxito en las últimas horas. Un grupo de estos inmigrantes realizaron un butrón en uno de los baños para poder escapar al exterior. Los agentes de Policía Nacional descubrieron sus intenciones.
La cifra de las salas habilitadas en Barajas sigue con un balance constante. En la Sala 4 hay 170, en la Sala 3 pernoctan 110 asilados y en la Sala 2 conviven 86 mujeres y niños. Un total de 362 personas siguen hacinadas en malas condiciones de salubridad.
De Barajas al CIE de Aluche
Para solucionar este problema, el Ministerio del Interior ha decidido reabrir las puertas del CIE de Aluche. Sin embargo, solo han podido trasladar a este complejo a cuatro personas por las dudas jurídicas que existe entorno a estos envíos.
Fuentes jurídicas aclaran a este medio que los juzgados madrileños disponen de competencias en los Centros de Internamiento de Extranjeros para vigilar y controlar que las personas internas en estos centros dispongan de unas condiciones y trato adecuados. Sin embargo, la titularidad para ordenar o no un traslado de estas características recae en el Ministerio del Interior. Si finalmente se ejecuta la orden de Marlaska, los jueces -a posteriori- podrán reclamar que se ofrezcan las garantías de acondicionamiento necesarias.
El sindicato JUPOL denunció que la reapertura del CIE de Aluche (Madrid) se ha llevado a cabo de "manera precipitada", sin haber realizado "una evaluación de riesgos laborales tras las obras y sin llevar a cabo simulacros de emergencias que garanticen la seguridad tanto de los internos del centro como de los agentes que presta servicio en el mismo". Del mismo modo, JUPOL critica que actualmente este CIE no cuenta con el personal policial suficiente para asumir con garantías la llegada de internos. "Una falta de personal que el sindicato ha cifrado en un 30 por ciento de los funcionarios actuales", añaden.
El SUP ha denunciado que las "infraestructuras de cartón no sirven para evitar salas hacinadas de personas" que no se encuentran "sometidas a una privación de libertad bajo régimen penitenciario". Este sindicato critica que AENA no dota de "infraestructura para evitar puntos débiles por donde puedan fugarse, tales como sellar los falsos techos o las ventanas".
Este sindicato también lamenta que "sigue sin resolver la situación en la Sala 2 provisional, habitáculo cerrado sin ventilación ni duchas". "Los policías estamos dando el 300% y nos encontramos con un muro en forma de trabas por distintas instituciones", añaden sobre la situación en Barajas.
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