La transferencia de las prisiones y de la gestión de la Seguridad Social al Gobierno Vasco por parte del Ejecutivo central de Pedro Sánchez culminará el paulatino desplazamiento de los empleados público estatales en Euskadi. El la última década, el País Vasco ha perdido 4.183 efectivos al servicio de la Administración General del Estado (AGE). La cifra supone el doble que la media de todas las Comunidades autónomas, donde ha caído un 13,44%.
Según se desprende del último Boletín Estadístico del personal al servicio de las Administraciones Públicas, elaborado por el Ministerio de Función Pública y Política Territorial. Su titular, Carolina Darias, rubricaba este jueves con el consejero de Autogobierno y portavoz del Ejecutivo vasco, Josu Erkoreka, el calendario de trasferencias pendientes para alcanzar "el cumplimiento íntegro" del Estatuto de Gernika.
Las cifras de la última entrega del Boletín -actualizadas a julio de 2019- reflejan el adelgazamiento del personal de la AGE en todas las CCAA, aunque con una especial incidencia en el País Vasco. En Cataluña la bajada no alcanza el 20%, mientras que Asturias se queda en un 19%, en Castilla y León se queda en un 17,7% y en La Rioja un 17,1%. Donde menos ha bajado es en Canarias (6,2%), en Murcia (7%) o en Extremadura (8,5%).
En una franja media se encuentran Andalucía (9,35%), Comunidad Valenciana (10,42%), Aragón (10,68%) o Galicia (11,39%) o Madrid (12,56%). El número de empleados públicos estatales sólo ha crecido en la última década en Ceuta (1,4%) y en Melilla (2,9%).
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