Una policía en prácticas, su compañero veterano y un hombre subido en una torre de alta tensión con una soga. Estas tres personas vivieron este lunes momentos de tensión en el Parque Natural de Ribeira (La Coruña). La agentes estuvo hablando durante media hora con el individuo que tenía intenciones autolíticas y consiguió convencerle para que depusiera su actitud, según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Esta heroica intervención tuvo su origen en una llamada del COS de la Guardia Civil el pasado 15 de julio a las 14 horas. Estaban en el Mirado de San Alberto y comprobaron como un hombre estaba subido en un poste de alta tensión, a unos 10 metros de altura con una cuerda de color rojo atada en el cuello.
Hasta la zona llegó esta patrulla de la Policía Nacional de la Comisaría de Ribeira compuesta por un agente de prácticas y su compañero veterano. Los funcionarios actuaron con la mayor cautela posible. El hombre tenía un cuchillo en su cinturón y cualquier paso en falso podría haber sido una tragedia.
Esta agente en prácticas estuvo durante varios minutos hablando con el varón. Tenía una actitud muy agitada, nerviosa y presentaba una clara predisposición de precipitarse al vacío. Casi media hora después entregó el cuchillo, con el que se había hecho heridas, y bajó de la torre de forma voluntaria.
Después de la intervención de la policía en practicas llegaron a la zona la Policía Local y una ambulancia. El Equipo de Atención Domiciliaria del Hospital Santiago de Compostela también acudió porque la pareja sentimental de este hombre les llamó porque había recibido un mensaje de WhatsApp de despedida. La había encerrado en casa antes de irse.
Los sanitarios decretaron el traslado forzoso del varón al Hospital de Barbanza. Ese mismo día, este hombre había recibido el alta de otro centro sanitario donde había tenido innumerables intentos autolíticos son anterioridad.
Un día después de esta intervención la madre acudió a la Comisaría de la Policía Nacional para dar las gracias a los agentes que habían salvado la vida de su hijo. Además, también se ha redactado una carta para la Escuela de Ávila para elogiar el trabajo realizado por esta policía en prácticas, que ya había vivido con anterioridad otras situaciones de riesgo.
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