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El Gobierno español condena a Israel tras la explosión de dispositivos electrónicos contra Hezbolá

Exteriores emite un comunicado calificando los ataques de Israel contra objetivos de Hezbolá como "indiscriminados" y "contrarios al Derecho Internacional"

Un soldado abre paso a una ambulancia durante la crisis de las explosiones en Líbano.
Un soldado abre paso a una ambulancia durante la crisis de las explosiones en Líbano. EP

El Ministerio de Asuntos Exteriores, dirigido por José Manuel Albares, ha emitido un comunicado de condena ante los ataques mediante dispositivos electrónicos de Israel contra objetivos de Hezbolá en el Líbano, ocurridos los días 17 y 18 de septiembre. "Han causado decenas de muertos y miles de heridos, con numerosas víctimas entre la población civil", apunta.

"Los ataques indiscriminados son contrarios al Derecho Internacional Humanitario y amenazan la seguridad y la estabilidad del Líbano, de Israel y de toda la región", apunta el comunicado de Exteriores, en la línea de la valoración del presidente Pedro Sánchez tras su reunión con el presidente palestino Mahmud Abás.

"Llamamos a la contención a todos los actores. Es necesario evitar una escalada de la violencia aún mayor y el riesgo de una guerra abierta con consecuencias imprevisibles", añade Exteriores en su comunicado.

Ataques contra Hezbolá

Cabe recordar que en las dos pasadas jornadas se han registrado al menos una treintena de víctimas mortales y más de 3.400 heridos.

En la primera jornada, martes, la primera oleada se centró en la explosión de cientos de dispositivos buscapersonas empleados por los miembros de Hezbolá. Los integrantes de la organización habían adoptado este sistema para evitar la interceptación de sus comunicaciones. En este ataque murieron al menos una docena de personas y casi 3.000 resultaron heridas por las explosiones.

En la segunda jornada, miércoles, murieron al menos otras veinte personas, con un balance de 450 heridos. En esta ocasión, las explosiones se registraron en walkie-talkies y otros aparatos.

Las cadenas de ataques desataron el caos en el Líbano y sembraron el terror entre las filas de Hezbolá. Las autoridades nacionales han requerido los terminales de comunicación de características similares para destruirlos o neutralizarlos de forma preventiva. 

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