Ni el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ni los conselleres. Tampoco la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. La marcha ecologista celebrada este domingo en Barcelona contra la ampliación de El Prat ha contado con miembros de ERC, pero los conselleres republicanos no ha consumado su amenaza de secundar la manifestación en nombre del Gobierno catalán. Se da la circunstancia de que la posible participación del Govern en la protesta fue uno de los argumentos que esgrimió Moncloa para suspender la inversión de 1.700 millones para ampliar el aeropuerto.
La manifestación, impulsada por las plataformas ecologistas 'Xarxa per la Justicia Climàtica' y 'Zero Port', ha reunido desde las 12 horas a miles de personas que han llenado la calle Tarragona de Barcelona, entre la plaza Països Catalans y la Plaza España. En concreto, los manifestados han rechazado toda reforma en el aeródromo que tenga un impacto medioambiental en el entorno.
La ampliación diseñada por Aena pretendía invadir parte de los terrenos protegidos de La Ricarda. Esta circunstancia dinamitó el plan inversor que, en un primer momento, acordaron el Gobierno central y la Generalitat. El proyecto contemplaba 1.700 millones para convertir el aeropuerto en un 'hub' de la movilidad aérea internacional y logístico. De hecho, el Ministerio de Política Territorial cifró en 83.000 los empleos directos que generaría el proyecto y un crecimiento del 2,1% del PIB catalán.
Sin embargo, el presidente Aragonès, de ERC, hizo saltar por los aires las negociaciones al exigir "explicaciones y la rectificación" del proyecto de Aena al afectar el espacio protegido de La Ricarda. Fue entonces cuando el Ejecutivo de Sánchez, como respuesta, suspendió la inversión. Los conselleres de ERC, a su vez, amagaron con secundar la manifestación de este domingo. Finalmente, ninguno de ellos ha asistido. Mientras tanto, Junts, sí que se han mostrado abiertos a "hablar del acuerdo para intentar reconducir la situación" con la inversión de El Prat.
La convocatoria de este domingo sí que ha contado con el apoyo de ERC, pero solo de miembros con perfil más bajo. En concreto, han participado una delegación encabezada por los exconselleres republicanos Raül Romeva y Meritxell Serret. Por su parte, Colau se ha limitado a escribir un mensaje a través de sus redes sociales. "Decimos sí a proteger nuestro territorio y diversidad, a tener un aire limpio, saludable y respirable, a defender una economía buena para la mayoría de la sociedad, que sea justa, diversificada y sostenible", ha argumentado.