Las Cortes de Castilla y León se han convertido en territorio comanche. Los debates parlamentarios de la comunidad son noticia o trending topic semana sí y semana también, en buena parte por las respuestas airadas de la bancada de Vox al que fuera vicepresidente durante la pandemia de covid-19, Francisco Igea. La tensión es notable en los pasillos de la moderna sede del poder popular castellanoleonés -otrora situada en el Castillo de Fuensaldaña-. "La cosa ha llegado a tal extremo que hay procuradores de Vox que me han escrito avergonzados por lo que está sucediendo con Gallardo y el presidente de las Cortes", afirma Igea a Vozpópuli.
"Incluso dentro de Vox da vergüenza lo que está sucediendo. Es un odio personal contra mí, pero no me importa, ya estoy mayor para estas cosas. Yo seguiré defendiendo los pilares de la democracia liberal", añade. Las Cortes empiezan a parecerse demasiado a un cuadrilátero en el que, en los últimos días, se han podido escuchar exabruptos como "imbécil" o "a tomar por culo".
Este jueves la Mesa de las Cortes deberá decidir si se le impone una sanción al vicepresidente de Castilla y León, Juan García-Gallardo, por llamar "imbécil" al diputado Igea mientras este se encontraba en su turno de palabra. Acto seguido, la mano derecha de Alfonso Fernández Mañueco le acusó de ser un "presunto delincuente". En aquel pleno de las Cortes, el presidente de la Cámara, Carlos Pollán, también de Vox, no llamó al orden a su compañero de bancada.
"El problema con procuradores como Gallardo es que se trata de parlamentarios inexpertos que no saben que el debate debe fluir. El propio presidente de las Cortes ha sido parcial e inexperto en la gestión de aquellos hechos, inauditos en el seno político de una Cámara que representa a los ciudadanos. En Ciudadanos no queremos que este fango sea el centro del debate político, pero estas ofensas no pueden medrar", señala Igea.
El presente de Mañueco... ¿el futuro de Feijóo?
El divorcio de Igea y Mañueco es tan definitivo como el de Figo y el Barça. En otros tiempos fueron un equipo, trabajaron codo con codo en los peores momentos de la pandemia de coronavirus y formaron un tándem que se defendió siempre mutuamente. Pero la traición de Mañueco, inventándose un supuesto pacto de Ciudadanos con el PSOE y Por Ávila para hacerle una moción de censura, no tiene ni olvido ni perdón en las filas naranjas.
Mañueco utiliza la situación para parecer la reina madreFrancisco Igea, procurador de las Cortes de Castilla y León
En el campo de wrestling en el que se han convertido las Cortes castellanoleonesas, Igea cree que Mañueco tiene mucho que ver, aunque vaya de tapado. "Mañueco es el responsable de todo esto. Utiliza la situación para parecer la reina madre. Este jueves se verá si el PP de Feijóo es moderado, cuando la Mesa de las Cortes tenga que decidir si sanciona o no a Gallardo. Si no hay sanción, los responsables serán Mañueco y el PP del moderado señor Feijóo".
Ciudadanos advierte que si esta es la situación en Castilla y León con Vox en altos cargos del Gobierno, lo mismo podría ocurrir en el Congreso de los Diputados de ascender con Feijóo al Gobierno central.
La guerra sigue en Twitter
El enfrentamiento entre los procuradores de Vox e Igea no termina cuando cae el telón en las Cortes, la lucha continúa en redes sociales, el metaverso digital 24 horas activo. La última disputa ha terminado en los juzgados. El portavoz de Vox, David Hierro, compartió en Twitter una imagen de Igea en el banquillo de los acusados por una denuncia por amenazas por parte de otro miembro de Ciudadanos: "No estaba esperando que le sacaran a bailar, estaba en el banquillo de los acusados por una denuncia de amenazas a uno de sus militantes. Exvicepresidente macarra", rezaba el tuit.
Lo que Hierro omitió es que Igea fue absuelto de aquella denuncia, lo cual no fue óbice para que Pollán retuiteara en su cuenta el mensaje. El diputado de Cs considera que Pollán y Hierro vulneraron su honor, y que además el presidente de las Cortes no cumple con el papel imparcial que demanda su cargo. Ello ha llevado a Igea a presentar en el Juzgado de Primera Instancia un acto de conciliación "previo" a otras futuras acciones futuras.
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