España

Urdangarin exige más dinero en el divorcio y que Cristina sufrague los 3.000 € de escolta

Las exigencias del exduque de Palma forman parte de la estrategia para mantener la protección de dos policías y el vehículo que le garantizo el Ministerio del Interior

Iñaki Urdangarin ha redoblado la presión contra la infanta Cristina para lograr una 'manutención' mensual cifrada en 25.000 euros y, además, una indemnización por el divorcio. Las exigencias del exduque de Palma, más que elevadas, están postergando un acuerdo que puede enquistarse y, más allá de otras razones más personales, el todavía cuñado de Felipe VI tiene una razón de peso para pedir tanto dinero: poderse pagar una escolta privada cuyos gastos superarían los 3.000 euros.

Así lo confirman a Vozpópuli fuentes próximas al servicio de escoltas del Ministerio del Interior, que hablan de un "sueldo neto" de 1.800 euros que, unido a los "gastos de seguridad social", y al hecho de que sea el propio Urdangarin el que aporte el vehículo para sus desplazamientos, hace que el exduque de Palma deba 'rascarse el bolsillo' si quiere conservar la protección de la que dispone en estos momentos.

Cabe destacar, en ese sentido, que el todavía marido de la infanta Cristina cuenta con dos escoltas de la Policía Nacional y un vehículo para sus desplazamientos, que aporta el Ministerio del Interior. La cartera dirigida por Fernando Grande-Marlaska, sin embargo, avisó hace unas semanas a Urdangarin, en plena negociación del divorcio, que perdería ese privilegio al separarse de su mujer.

Desde entonces, el exduque de Palma "se ha informado" y "ya sabe que, por menos de 3.000 euros, no tiene escolta privada". A día de hoy, añaden las fuentes consultadas, "ya no hay tantas empresas de seguridad privada en el País Vasco tras el fin de ETA" y, por tanto, "los precios son elevados". Un coste que 'justifica', en parte, las exigencias económicas de Urdangarin a la infanta Cristina.

Seguridad cara y "no completa"

De inclinarse definitivamente por contratar a un escolta privado, Iñaki Urdangarin tendrá una "nueva seguridad" pero, en ningún caso, "la misma seguridad": será, evidentemente, más cara -es el Estado el que paga casi 8.000 euros al mes por la escolta a Urdangarin con dinero dinero público- y "no completa".

El escolta privado que contrate Urdangarin debe hacer la labor de conductor y vigilante; debe tener permiso de Interior para tener un arma, y no tiene relevos

En ese sentido, desde el equipo de escoltas del órgano que dirige Marlaska explican a este medio que "el escolta privado que contrate Urdangarin debe hacer la labor de conductor y vigilante; debe tener permiso de Interior para tener un arma, y no tiene relevos".

Por otra parte, su actuación está "mucho más limitada" que la de un escolta de la Policía Nacional: "No puede, por ejemplo, cortar el tráfico en un desplazamiento".

La estrategia de Iñaki Urdangarin

Urdangarin, afirman las fuentes consultadas, es plenamente consciente de esta circunstancia y, por ese motivo, "está tratando de alargar lo máximo posible la escolta del Ministerio del Interior pidiendo más dinero a la infanta Cristina", con el objetivo de no perder uno de los grandes privilegios que aún mantiene.

En todo caso, añaden, "el Ministerio ya ha dejado claro que no puede ponerle ya un coche y dos escoltas", pero, al no haber acuerdo con el divorcio, "de momento lo mantiene".

Motivos de la falta de acuerdo

La seguridad del exduque de Palma, en todo caso, no es el único motivo de fricción entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina en la negociación de su divorcio.

Así, el periodista Juan Luis Galiacho desveló que hay "un dinero que está fuera" de España y que están estudiando cómo lo traen para dárselo a Iñaki Urdangarin, asunto que te contamos más adelante.

El periodista señaló en el programa 'Cuatro al día', que el exmarido de la infanta Cristina no solo pide dinero sino también propiedades, entre las que se encuentran el chalet de Bidart, en Francia, y el poder usar la casa de Baqueira Beret, que es de un particular pero que usa la familia real.

"A día de hoy no hay ningún acuerdo de divorcio. La cuestión está complicada porque el último gesto lo tuvimos recientemente cuando Iñaki Urdangarin se presentó en la casa de Baqueria, una casa que él quiere dentro del acuerdo del divorcio. Quiere para él esta propiedad, por eso se presentó en esta casa... Urdangarin no solamente ha pedido dinero para que pueda vivir si no también varios inmuebles", señaló Galiacho.

Por otra parte, la edad de la menor de las hijas del matrimonio, Irene, también sería clave: al cumplir los 18 años, "tiene que dar el visto bueno a los pactos que le afectan, a lo que le van a pagar o no le van a pagar. A veces se chantajea con eso", afirmó el colaborador en 'Cuatro al día'.

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