El pasado martes, en el debate electoral para la presidencia madrileña, Rocío Monasterio (Vox) hizo constante hincapié durante sus intervenciones en la necesidad de mejorar la seguridad de Madrid. Pero, ¿es esta una alarma social ficticia o existe una creciente inseguridad en las calles de la capital? La conclusión es que hay motivos para dar la razón a la formación liderada por Santiago Abascal: desde 2019, el último año prepandemia, los delitos violentos han aumentado de manera preocupante en la región.
El eslogan 'vota seguro' cobra sentido al ver las cifras que arrojan los informes de criminalidad del Ministerio del Interior y cómo han aumentado los delitos relacionados con actos violentos -asesinatos, trifulcas, homicidios en grado de tentativa o agresiones sexuales-. En todos estos puntos, los porcentajes se han disparado. Dentro de la región, hay dos lugares que tienen un peso específico: la ciudad de Madrid, por un lado. y Torrejón de Ardoz, por otro, aunque en una medida mucho menor.
El balance de criminalidad del Ministerio del Interior de 2022 muestra cómo los homicidios dolosos y asesinatos consumados han aumentado en la región un 46,9% pese a que la criminalidad, en general, ha descendido un 8,7%. En el caso de estos delitos, pero en grado de tentativa, también se ha visto un crecimiento muy abultado: un 71,8% desde 2019, con un incremento especialmente notorio en 2022 respecto a 2021 (+42,6%).
En un porcentaje menor, pero también con crecimiento, están los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria: estos han pasado de 2.442 a 3.164 en tres años, con un aumento del 29,6%. Las violaciones, a las que también hizo referencia Rocío Monasterio durante su intervención, aumentaron en un 59,7% durante el periodo 2019-2022 (de 243 a 388).
En la ciudad de Madrid, esta situación se agrava más todavía: respecto a 2019, prácticamente se han duplicado los asesinatos en grado de tentativa (de 42 a 83) y en un año, el porcentaje ha aumentado de forma drástica: un 66% total -de 50 a 83-. Los delitos por riñas y lesiones han pasado de 1.447 a 1.753, un 21,1% en tres años, aunque el último año el repunte ha sido más agudo, con un 16,3% de la subida total.
Torrejón de Ardoz es otro de los puntos calientes de la Comunidad de Madrid, especialmente por la delincuencia relacionada con bandas. Allí se ha pasado de cero asesinatos en 2019 a un total de siete en 2022. Un repunte que se dio, principalmente, en el último año: en 2021, solo hubo un asesinato. En tentativa, también se ha duplicado el número: de 4 a 9 el número de homicidios en grado de tentativa y ha aumentado también el número de riñas en un 22,2%, siendo el mayor crecimiento en el último año (+19,6%).
Peleas con armas blancas
En Vox no han sido los únicos que han alzado la voz contra este problema. Desde la Fiscalía ya calificaron en su Memoria Anual que el aumento de estos casos es "preocupante", relacionándolo de manera directa con ajustes de cuentas y bandas organizadas. Según este mismo documento, en España, el número de homicidios por arma blanca plasmados en sentencias creció un 38% entre 2020 y 2021.
El Gobierno de la Comunidad de Madrid también ha expresado su preocupación. De hecho, Enrique López, consejero de Presidencia, Justicia e Interior en Sol, planteó la posibilidad de aumentar el castigo penal por portar armas blancas tipo machete por la calle. "Hay eventos con armas de fuego, pero están muy controlados, sin embargo, las armas blancas no y hay que controlar su porte", aseguró hace meses en rueda de prensa.
Por tanto, los datos, la Fiscalía y sus todavía socios de Gobierno dan la razón a Vox cuando dan la voz de alarma y piden más seguridad en las calles de la Comunidad de Madrid para evitar que la escalada de violencia continúe.
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