Izquierda Unida (IU), partido coordinado por el ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha sido la única formación española que ha votado en contra de recrudecer las sanciones contra Putin en respuesta a la invasión de Ucrania y tras salir a la luz numerosas imágenes de civiles asesinados en localidades como Bucha. La Eurocámara reclamó este jueves la imposición de más castigos a Rusia, incluido un embargo "total e inmediato" de las importaciones rusas de petróleo, carbón, combustible nuclear y gas. Pero los eurodiputados de IU Sira Rego y Manu Pineda no están de acuerdo. Tampoco Miguel Urbán, de Anticapitalistas. Pernando Barrena, de EH Bildu, ha optado por la abstención.
La resolución ha sido aprobada con 513 votos a favor, 22 en contra y 19 abstenciones. Además, el Parlamento Europeo considera que las sanciones deben ir acompañadas de un "plan" para seguir garantizando la seguridad del abastecimiento energético de la Unión Europea (UE) y una "estrategia" para levantar las sanciones en caso de que Moscú adopte medidas para restablecer la independencia, soberanía e integridad territorial de Ucrania, dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente y retire "completamente" sus tropas del territorio ucraniano.
La postura de Izquierda Unida ante la guerra de Ucrania también se pudo ver reflejada en una resolución anterior, cuando se abstuvieron en la votación para proveer ayuda financiera a Ucrania para la compra de armas y a concederle el estatuto de país candidato a la UE. Tampoco apoyaron la suspensión de licencias de emisión de los medios de propaganda rusos.
Apenas una hora antes de arrancar de que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, arrancase su intervención ante el Congreso de los Diputados, la formación envió un comunicado para arremeter contra este por "suprimir la actividad de 11 partidos políticos", un gesto "antidemocrático inaceptable" para un país que quiere ingresar en la UE, según IU.
Izquierda Unida critica a Zelenski
Izquierda Unida sí expresó su "absoluto respeto institucional" por el presidente Zelenski al comienzo del texto: "Ucrania se encuentra invadida por una potencia extranjera como es Rusia y el pueblo ucraniano cuenta con toda nuestra solidaridad". A ese mismo "respeto institucional" apeló Alberto Garzón para justificar su presencia en la Cámara Baja y también su aplauso al mandatario ucraniano en el día 41 de la guerra. Algunos miembros del partido se manifestaron en contra del comunicado oficial.
El ministro de Consumo y coordinador de IU criticó que "la situación de emergencia" provocada por la guerra en Ucrania "no puede justificar la prohibición de partidos políticos", lo cual, a su juicio, es independiente de apoyar al pueblo ucraniano ante la "salvaje agresión". Una "salvaje agresión" en la que su formación no ve motivo para recrudecer las sanciones contra Rusia a tenor de sus votos en contra en Bruselas este jueves.
El discurso del ex comediante convertido en mandatario de Ucrania tampoco fue aplaudido por el secretario de Estado de Agenda 2030 y diputado de Unidas Podemos, Enrique Santiago, que además es secretario general del Partido Comunista. Su gesto coincidió con el de algún parlamentario de BNG, CUP y Bildu. Otros dos diputados de Unidas Podemos/Izquierda Unida no asistieron a la intervención de Zelenski por -dicen- "conciencia antifascista".
Rusia, fuera del G20 y de Interpol
Además de pedir el embargo de gas y petróleo rusos, la Eurocámara reclamó este jueves a los dirigentes de la Unión y de otros Estados que excluyesen a Rusia del G20 y de otras organizaciones de cooperación multilateral, como el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Interpol, la Organización Mundial del Comercio y la Unesco, entre otras, lo que constituiría una "señal clara de que la actitud de la comunidad internacional con respecto al Estado agresor no volverá a la situación anterior".
Para incrementar la efectividad de las sanciones, el Parlamento insta a excluir a los bancos rusos del sistema SWIFT, a impedir a cualquier buque conectado con Rusia la entrada en aguas territoriales de la UE y el atraque en puertos de la Unión, y a prohibir el transporte de mercancías por carretera desde y hacia Rusia y Bielorrusia. Piden, asimismo, la incautación de "todos los activos pertenecientes a funcionarios rusos o a los oligarcas asociados al régimen de Putin, sus representantes y testaferros, así como a los vinculados al régimen de Lukashenko".
Dada la implicación bielorrusa en la guerra en Ucrania, la resolución señala que las sanciones a Bielorrusia deben reflejar las impuestas contra Rusia para evitar que Vladimir Putin utilice la ayuda de Lukashenko para eludirlas.
Asimismo, los eurodiputados consideran que la entrega de armas debe continuar y acelerarse ante las "atrocidades" cometidas por las fuerzas militares rusas en Ucrania y en particular en Bucha "que constituyen indiscutiblemente crímenes de guerra".
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