España

Los críticos de Garzón temen que IU se convierta en un apéndice de Podemos

Los llamazaristas y los firmantes de la 'Declaración de Zamora', entre ellos afines a Cayo Lara, reclaman una segunda consulta a las bases sobre los puntos ya pactados con la formación de Iglesias. "No podemos retroceder a un modelo de mera coalición de partidos ni ir a una IU evanescente, líquida", sostienen. La ubicación de Garzón, a quien Podemos relega como quinto por Madrid o cabeza de lista por Málaga, se torna en problema.

El curso de las negociaciones entre Izquierda Unida y Podemos para ir juntos a las elecciones generales del próximo 26-J ha instalado una percepción entre los críticos del portavoz de IU-Unidad Popular, Alberto Garzón. Este sector, integrado por lzquierda Abierta, que reúne a los llamazaristas, y los firmantes de la Declaración de Zamora, están constatando, según las fuentes internas consultadas por este diario, un "fenómeno del pasado que pensábamos que habíamos superado, el de convertirnos en un fuerza subalterna". "Se nos criticó esto en el pasado en relación al PSOE y ahora algunos parecen empeñados en que vuelva a darse con Podemos", recalcan.

"Se nos criticó esto en el pasado en relación al PSOE y ahora algunos parecen empeñados en que vuelva a darse con Podemos", dicen desde el sector crítico de Izquierda Unida

Las mismas fuentes subrayan que la coalición debe seguir creciendo, resultado atractiva, y mantener su independencia, sin conformarse con una actitud subsidiaria. Remiten, en texto contexto, a la Declaración de Zamora, la que sustenta el proyecto IU, sí con más fuerza, es decir, la alternativa a la opción oficialista de cara al debate de la XI Asamblea Federal de Izquierda Unida. Este cónclave tendrá lugar los días 4 y 5 de junio si no hay aplazamiento por la cercanía de las nuevas elecciones, algo improbable debido a la pretensión del aparato de afianzar su postura antes de la cita con las urnas.

Dicha declaración sostiene que "IU debe seguir apostando por la convergencia social con los sectores populares y de izquierda, pero será imposible realizarla si con algunos con quienes queremos hacerla no proyectan hacerla con nosotros, sino que pretenden nuestra desaparición como fuerza política". Todo un mensaje dirigido a Podemos, cuyo líder, Pablo Iglesias, decía el año pasado en una entrevista en Público: "Que se queden con la bandera roja y nos dejen en paz". "Cuécete en tu salsa llena de estrellas rojas y de cosas, pero no te acerques, porque sois precisamente vosotros los responsables de que en este país no cambie nada. Sois unos cenizos", afirmaba Iglesias refiriéndose en concreto a "los dirigente políticos de IU".

Para los críticos, por su parte, "el debate en IU no debe ser convergencia sí o no, sino cómo la hacemos, con qué programa, con quién, cuándo y para qué". Destacan aquí que "no podemos retroceder a un modelo de mera coalición de partidos ni ir a una IU evanescente, líquida".

Tanto la corriente Izquierda Abierta, con el excoordinador general Gaspar Llamazares al frente, como los integrantes del proyecto IU, sí con más fuerza, que encabeza la eurodiputada Paloma López, reclaman una segunda consulta a las bases sobre la confluencia con Podemos. También forma parte de esta facción José Antonio García Rubio, miembro de la Ejecutiva Federal de IU y una de las personas más próximas al todavía coordinador general, Cayo Lara. Esgrimen que el nuevo referéndum debe hacerse sobre acuerdos ya concretos y no en los términos genéricos del celebrado esta semana, donde apenas ha participado un 28% de los llamados a las urnas, entre militantes y simpatizantes.

Las negociaciones, pese a que ambas fuerzas aseguran que avanzan "favorablemente", están todavía abiertas en varios puntos

Creen que dicha consulta supondría "tres grandes beneficios": dotar de "mayor legitimidad democrática" a la decisión finalmente adoptada; constituir "una magnífica oportunidad para escuchar la voz de aquellas personas de Unidad Popular con las que trabajamos codo con codo en las elecciones del pasado diciembre" e incorporar "un elemento de movilización interna y externa" de cara a los próximos comicios.

Esta petición se escuchará este sábado el Consejo Político Federal de IU, donde se dará cuenta del avance de las negociaciones con Podemos tras una semana de conversaciones formales. La previsión inicial era que el Consejo Político Federal pudiera ya pronunciarse a favor o en contra de una propuesta cerrada de pacto con el partido de Pablo Iglesias y decidir si aceptaba las condiciones incluidas en él: puestos en las listas, reconocimiento, campaña, financiación... Sin embargo, las negociaciones, pese a que ambas formaciones aseguran que avanzan "favorablemente", están aún abiertas en varios puntos y los interlocutores alejan la posibilidad de que esta semana pueda darse ya a conocer un pacto final, según informa Ep.

Garzón, quinto por Madrid o cabeza de cartel por Málaga

En este contexto, la ubicación de Garzón en las listas se ha convertido en uno de los mayores problemas. Podemos lo relega al quinto puesto por Madrid (el tercero sería para Íñigo Errejón en una plancha cremallera) o a cabeza de cartel en la circunscripción de Málaga (su provincia de origen), algo que no contenta a la delegación andaluza de la formación morada que capitanea Teresa Rodríguez. El portavoz de IU-UP en el Congreso, no obstante, sigue insistiendo en que su lugar debe estar en los primeros puestos de la candidatura por Madrid.

El plazo legal para la inscripción de la coalición no finaliza hasta el día 13. De momento, y falta de que se cierre el acuerdo, Podemos ya ha anunciado que consultará a sus bases sobre la confluencia con IU los días 10 y 11, fecha para que tendría que estar ya pactado "fundamental" de la alianza, según ha manifestado el secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique.

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