El Ministerio Fiscal y la acusación particular y popular piden más de 2.000 años de cárcel para el exjefe político de ETA José Antonio Urruticoechea, Josu Ternera, por el atentado contra la casa cuartel de Zaragoza en 1987, en el que fueron asesinadas once personas, entre ellas seis niños.
En su escrito de calificación, al que ha tenido acceso Efe, el fiscal solicita para Josu Ternera 30 años de cárcel por cada uno de los 11 asesinatos consumados y 23 por los 88 asesinatos en grado de tentativa, lo que suman 2.354 años de prisión. La Fiscalía considera a Josu Ternera autor de estos asesinatos, tanto por inducción como por cooperación necesaria.
Tres días después del atentado, según recuerda el fiscal en su escrito, el comité ejecutivo de ETA reivindicó la autoría en un comunicado publicado en el diario Eguin, y el fiscal concluye que Ternera formaba parte de este comité, junto con los ya condenados Francisco Múgica Garmendia y José María Arregui Erostarbe. Los tres, añade el fiscal, "toman la decisión de llevar a efecto una acción terrorista de gran envergadura como respuesta a la detención del dirigente de la organización terrorista Santiago Arróspide (Santi Potros)" y dan la orden al comando Argala de trasladarse a Zaragoza para colocar un coche-bomba en la casa cuartel de la avenida de Cataluña.
Detenido en Francia
Josu Ternera fue detenido el 16 de mayo de 2019 en la localidad francesa de Sallanches, en los Alpes, y el Gobierno de España pidió su extradición por este atentado en junio de ese mismo año. El fiscal recuerda que las autoridades del país vecino aún no han remitido el decreto de extradición del etarra para ser enjuiciado en la Audiencia Nacional por este atentado.
El Tribunal Supremo de Francia autorizó en noviembre de 2020 la extradición por este atentado, pero también por su presunta implicación en el asesinato del directivo de la empresa Michelín Luis Hergueta en Vitoria en 1980 y en la financiación ilegal de ETA a través de las herriko tabernas.
Esta extradición, no obstante, solo se producirá cuando se solucionen varias causas abiertas que el exdirigente de ETA tiene en Francia.
Ternera, de 71 años y domiciliado en París, está en libertad vigilada, con brazalete electrónico de localización, desde julio de 2020.
Por su parte, la acusación particular en nombre de Antonio Frutos y Carmen Ortuño, supervivientes del atentado, y la popular en nombre de la Asociación Española de Guardias Civiles, que ejerce en ambos casos el abogado oscense Jorge Piedrafita, pide en su escrito 2.774 años, al elevar a 26 años la pena que solicita por cada asesinato frustrado, que considera que son 94 y no 88.
La acusación particular pide asimismo que se le apliquen las agravantes de alevosía, ensañamiento y premeditación.
Piedrafita, en declaraciones a Efe, ha advertido de que en vista oral mantendrá una "acusación firme y vigilante" para lograr justicia y resarcimiento a los guardias civiles y su familias, "que padecieron la masacre terrorista más grave en Aragón y llegan muchos años esperando".
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