Juan Carlos I lleva semanas reclamando una 'recompensa' por haber buscado trabajo a Froilán en Abu Dabi: poder viajar a Madrid a "arreglar papeles". La intención del Emérito es pasar por Zarzuela para "poner orden a sus pertenencias y documentos", pero también para localizar a viejos contactos para deshacerse de propiedades en Cataluña y Galicia.
Así lo confirman a Vozpópuli personas próximas al monarca, que tiene como "prioridad" desprenderse de una serie de bienes inmuebles para dejar "todo cerrado" de cara a su "herencia".
Las fuentes consultadas recuerdan que solo Felipe VI ha renunciado a la herencia de su padre, pero no así sus hermanas: las infantas Elena y Cristina. El objetivo de Juan Carlos I es legar a sus hijas "únicamente dinero", ya que algunas propiedades "las tiene a nombres de terceros y eso hay que arreglarlo".
Quiere deshacerse de lo que tiene allí a su nombre, o a nombre de sus amigos. Está en esa fase
Esos bienes inmuebles de los que quiere desprenderse Juan Carlos I, explican desde su entorno, están situados en Galicia y Cataluña: "Quiere deshacerse de lo que tiene allí a su nombre, o a nombre de sus amigos. Está en esa fase. Pero quiere venir. Y, si viene, todos nos vamos a enterar".
En todo caso, las fuentes consultadas apuntan que "ya ha arreglado algunos papeles con sus hijas Elena y Cristina" y, añaden, además, que "probablemente aprovechó sus viajes a Ginebra y París para ello".
Los 'testaferros' del Rey
Tal y como informó Vozpópuli el pasado mes de febrero, Juan Carlos I se está apoyando, para estas gestiones sobre sus recuerdos y su patrimonio en Nicolás Murga, excoronel del Ejército del Aire y antiguo asistente personal, para que actúe de "intermediario" y le informe, también, de las pertenencias que posee en Zarzuela.
Cabe recordar, en ese sentido, que Murga, al que se ha calificado como el "testaferro" de Juan Carlos I, viajó junto a Froilán a Emiratos Árabes el pasado 10 de febrero. Su presencia en Barajas sirvió para destacar no solo su buena relación con el Emérito, sino también con un Froilán para el que él, según se ha publicado, es casi un "segundo padre".
Las personas del entorno de Juan Carlos I consultadas por Vozpópuli destacaron entonces, sin embargo, que el papel de Murga es el de "informador" y "enlace" para el monarca, que "quiere preparar el terreno" para un regreso de unos días a Madrid. Las mismas fuentes añaden, ahora, que el excoronel también tendría información sobre otras propiedades del Emérito fuera de Madrid.
En Casa Real, en todo caso, no son ajenos a las intenciones del padre de Felipe VI y a los movimientos de Murga, al que "le dejan hacer". Desde el entorno de Zarzuela afirman a este medio que "es preferible esa mediación para que en esos 'arreglos' no intervengan otros con peores antecedentes".
Es preferible esa mediación para que en esos 'arreglos' no intervengan otros con peores antecedentes
Se refieren estas fuentes a Allen Sanginés-Krause el amigo mexicano de Juan Carlos I al que se señaló en 2020 por estar detrás de muchos de los pagos que el Emérito y otros familiares habrían realizado con tarjetas de crédito opacas y que fue objeto de investigación por la Fiscalía Anticorrupción.
Ahora, señalan, "no se trata de pagar sino de vender", pero "es mejor" que personas como el mexicano, o con perfiles similares, queden fuera de esas negociaciones.
El regreso a Sanxenxo
Más allá de su viaja a Madrid, Juan Carlos I no se olvida de Sanxenxo y, según se ha publicado, habría comunicado ya a sus amigos del municipio pontevedrés que tengan a punto El Bribón para las regatas del penúltimo fin de semana de mayo -días 19, 20 y 21-, en la que quiere participar.
Según explican a Vozpópuli personas que han visto recientemente al Emérito en Sanxenxo, el padre de Felipe VI está, a día de hoy, "muy limitado físicamente" para competir en las regatas: "A él le gustaría navegar, pero una cosa es que él tenga esa intención y otra que pueda".
A él le gustaría navegar, pero una cosa es que él tenga esa intención y otra que pueda
Este deseo, en todo caso, sí que está provocando nuevas tensiones entre Juan Carlos I y su hijo, que insiste en que los desplazamientos del Emérito tienen que estar vinculados a actos institucionales, pero no para "venirse de fiesta" con sus amigos.
Un evento de esas características puede ser la ceremonia de coronación de Carlos III de Inglaterra el 6 de mayo, o el acto de jura de la Constitución de Leonor en el Congreso.
Tal y como avanzó Vozpópuli, Juan Carlos I quiere estar presente en la Cámara Baja y, según un amigo del monarca, esa sí es su máxima prioridad: "Él sabe que no está bien. Está con tratamiento de corticoides y cada vez le es más difícil viajar. Pero sí le veo haciendo un esfuerzo cuando Leonor jure la Constitución".
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación