El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha rebajado de 15 a 3 millones de euros la fianza que impuso al dueño de Viajes Marsans, Ángel De Cabo, para que pueda salir de la cárcel, han informado este lunes fuentes jurídicas a Efe. Asimismo, el magistrado, que investiga el vaciamiento patrimonial del grupo turístico, ha fijado esta misma cantidad para el que fuera su mano derecha, Iván Losada, para quien la Audiencia Nacional había fijado una cifra de 10 millones de euros, la misma que tiene establecida el expresidente de la CEOE Gerardo Díaz Ferrán.
Sin embargo, Díaz Ferrán, que también se encuentra en la cárcel desde el pasado 5 de diciembre -cuando fue detenido junto con los otros dos imputados en el marco de la ‘Operación Crucero’-, se encuentra pendiente de que la Sala de lo Penal decida sobre la petición de su defensa para que le pongan en libertad o bien le reduzcan la fianza a 50.000 euros y le retiren el pasaporte. Velasco ha tomado esta decisión a instancias de la Fiscalía y después de escuchar a De Cabo y Losada el pasado mes de abril, cuando ambos declararon voluntariamente tras haberse negado a hacerlo la primera vez que comparecieron ante el juez en diciembre.
De Cabo aseguró al magistrado que Díaz Ferrán le engañó al venderle Marsans y otras sociedades, puesto que ya las había vaciado de bienes, pese a lo cual le entregó 8 millones de euros en concepto de préstamo. Según Velasco, Díaz Ferrán y su socio Gonzalo Pascual, ya fallecido, acordaron con De Cabo el traspaso del grupo turístico y de su patrimonio para eludir el pago a sus acreedores a cambio de recibir "cien mil euros mensuales hasta alcanzar la suma de ocho millones de euros".
De Cabo y Losada declararon voluntariamente ante el juez Velasco tras haberse negado a hacerlo la primera vez que comparecieron
El empresario valenciano negó que pactara esos pagos con Díaz Ferrán y declaró que los préstamos fueron garantizados con las hipotecas sobre los bienes de los hijos del expresidente de la CEOE, del que dijo que también le vendió su barco y que él le permitió seguir utilizándolo. Mientras tanto, los préstamos a Pascual -aunque no consta que éste llegara a recibir ningún dinero- tenían como aval los muebles y los trofeos de caza intervenidos en una nave de Ribarroja del Turia (Valencia).
Por su parte, Losada aseguró, cuando fue interrogado el pasado 30 de abril, que intentó hacer un plan de viabilidad para el grupo después de comprárselo a Díaz Ferrán, pero que no salió adelante. El juez sostiene que Losada -representante de Teinver, la matriz de Marsans, y administrador único de Viajes Marsans desde junio de 2010, por lo que recibía un salario bruto anual de 500.000 euros más un 5% de beneficios-, era "una de las personas de máxima confianza de Ángel De Cabo y, por tanto, uno de los pocos con poder de decisión en la organización" sin consultar al empresario valenciano.
Así, ordenaba a los presuntos testaferros y "era el depositario o custodio de bienes, documentación, dinero o cheques que tienen origen o vinculación con los fondos o activos de las entidades alzadas y adquiridas por la organización de De Cabo".
