Koldo García confesó que el recientemente cesado director de la Guardia Civil, Leonardo Marcos, le dio el chivatazo de que estaban investigando a los miembros de la trama. El que fuera asesor de José Luis Ábalos así se lo trasladó al comandante de la Guardia Civil imputado en esta causa, quien pudo saber que era la Unidad Central Operativa (UCO) la que les estaba investigando por la trama de mascarillas.
Así se desprende de una conversación que mantuvieron el 25 de enero de 2024 (semanas antes del estallido de la trama) el comandante de la Guardia Civil Rubén Villalba y Koldo García. En el marco de esta charla, el exasesor del Ministerio de Transportes le informó de que había una investigación en la Guardia Civil en curso y que la persona que le informó de la misma fue el entonces director general.
"Me llamó en más de una ocasión para que intentara confirmarle que era la UCO quien estaba tras sus pasos a lo que hice caso omiso hasta que en una llamada de Whatsapp del pasado día 25 de enero que mantengo con Koldo, él mismo, sin venir a cuento en la conversación, llegó a confirmarme que era la UCO (...). Tener en cuenta que Koldo es una persona muy conectada y supuestamente con muy buenas relaciones a altos niveles. Según Koldo, fue el actual director de la GC quien le informó de tales detalles", reza el extracto.
El chivatazo del caso Koldo
El informe de la UCO que recoge dicha conversación y al que ha tenido acceso Vozpópuli, determina que la instrucción policial que investiga el caso Koldo "no ha hallado indicios" que corroboren el extremo defendido por el que fuera asesor de José Luis Ábalos. Además, recuerdan que éste ya mintió en episodios anteriores "para darse cierta importancia".
Un ejemplo lo constituye cuando dijo que se había reunido con el Director Adjunto Operativo de la Guardia Civil. "Fue una afirmación falsa por cuanto esta Unidad mantuvo un control de actividades sobre este investigado durante ese día, corroborando la no existencia de esa entrevista", alegan en este nuevo informe aportado a la Audiencia Nacional.
El oficio policial se centra en el papel que tuvo Rubén Villalba dentro de esta trama a la que se investiga por el pelotazo de 54 millones de euros con los contratos de mascarillas. La UCO detecta al respecto que cobró en 'b' de la red a cambio de proveerles de teléfonos protegidos.
Dichos terminales los habrían suministrado con ayuda de subordinados suyos dentro del Instituto Armado.
De hecho, de las conversaciones incautadas se desprende que utilizó a estos agentes para ir a cobrar el dinero en metálico. El mismo lo recogían en unas oficinas que Víctor de Aldama posee en el centro de Madrid. Se trata de una cuantía que iría destinada a sufragar los terminales (a los que aludían con el sobrenombre de 'cafeteras'), aunque Villalba también ingresó gran parte de este dinero en 'b' en sus cuentas.
Cese del director de la Guardia Civil
El fugaz paso de Leonardo Marcos por la Dirección General de la Guardia Civil dejó pocos amigos. Su carácter autoritario le granjeó muchos enemigos: "He venido a mandar, no a escuchar". Fue la frase que profirió en su primer encuentro con los representantes de las asociaciones de la Guardia Civil en el Consejo del Cuerpo.
Marcos fue nombrado el 13 de junio de 2023 director del Instituto Armado. El 17 de septiembre de 2024 fue cesado de forma abrupta y volvió a ocupar su puesto Mercedes González. El relevo se desarrollo de forma discreta y Leonardo Marcos pasó a un segundo plano a recuperar su puesto de funcionario. El ambiente con el 'núcleo duro' de la Institución tampoco era más cordial. "No le soportaba nadie", desvelan estas fuentes. De forma paralela siempre tuvo un segundo plano en la carga mediática. Tampoco gustó dentro del Cuerpo cómo abordó el asesinato de los dos agentes por unos narcos en Barbate.
Es más, Leonardo Marcos manifestó en diversas entrevistas a medios de comunicación que el dispositivo llevado a cabo el día 9 de febrero de 2024 en el Puerto de Barbate fue el correcto. Por estas afirmaciones, AUGC pidió que fuera citado en calidad de testigo en la causa abierta contra los mandos que diseñaron el dispositivo.
Su último acto público, difundido por la Guardia Civil, fue el pasado 7 de septiembre cuando Leonardo Marcos se desplazó hasta Villarcayo (Burgos) para felicitar en persona a los agentes que trabajaban en el dispositivo de seguridad de la Vuelta Ciclista a España.
Pocos días después ya corría como la pólvora su decisión de abandonar el Instituto Armado. Sobrepasado por los acontecimientos, con decenas de frentes internos no se vio capaz de llevar a cabo la reestructuración que el Cuerpo y sus agentes demandaban. Un puesto que "le venía grande" en una etapa marcada por las investigaciones mediáticas que se llevan a cabo desde el Cuerpo con el caso Begoña Gómez, Koldo o el hermano de Pedro Sánchez.
