Las Cortes de Castilla-La Mancha han aprobado, con el voto de los populares y en contra de la oposición, la reforma de la ley electoral de Castilla-La Mancha, que reduce de 49 a 33 el número de diputados en las Cortes autonómicas para la próxima legislatura.
La reforma ha provocado las críticas de la oposición, tanto PSOE como IU. Los socialistas han presentado un recurso de anticonstitucionalidad por la medida llevada a cabo por el gobierno de la comunidad, según informa Efe.
La presidenta, María Dolores de Cospedal, ha defendido, en el pleno de las Cortes, que se trata de una norma justa, plural, objetiva, representativa, equilibrada y adecuada para los tiempos de crisis, que supone un “paso histórico”, que permite a los políticos “tener un comportamiento ejemplar para los ciudadanos” y, además, la considera una medida que acerca la política a la ciudadanía.
Esta norma es la segunda ley electoral en la comunidad y va en contra de la anterior que aumentaba el número de parlamentarios
Esta norma es la segunda ley electoral aprobada en Castilla-La Mancha en lo que va de legislatura y que va en contra de la anterior, que subía los parlamentarios de 49 a 53. Además, la presidenta ya ha llevado a las Cortes otras medidas impopulares para la oposición, como la decisión de dejar sin sueldo fijo a los diputados autonómicos en los presupuestos, apoyada por el Tribunal Constitucional.
Críticas
El secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha recurrido ante el Tribunal Constitucional la reforma del Estatuto de Autonomía, que según Page, permite a María Dolores de Cospedal ser reelegida presidenta "con menos votos que otro partido".
Pedro Sanchez critica que la reforma sea para "blindar el poder" de María Dolores de Cospedal
El nuevo secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, también se ha pronunciado contra esta reforma a través de un comunicado, donde ha expresado que cree que con esta medida Cospedal ganará en diputados las elecciones “aunque las pierda claramente en votos”, y ha calificado la reforma de "un auténtico atropello constitucional", hecho "única y exclusivamente para blindar el poder" de la presidenta autonómica, María Dolores de Cospedal.
El líder de los socialistas ha añadido que "es evidente que Cospedal tiene miedo del voto de los ciudadanos en las elecciones autonómicas, después de que hayan sufrido sus recortes en sanidad, en educación o en dependencia”.
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, ha acusado al PP de aprobar el "mayor pucherazo electoral de la democracia" y ha destacad que lo que pretende el PP en Castilla-La Mancha es "garantizarse la mayoría robando la voluntad democrática de los ciudadanos".
La norma
La ley aprobada cifra en 33 los parlamentarios castellanomanchegos, que se reparten con un mínimo de tres para cada una de las cinco provincias y los 18 restantes, en función de la población.
La reforma de la ley electoral para reducir el número de parlamentarios autonómicos llega tras la modificación del estatuto de Castilla-La Mancha, que situó en una horquilla de 25 a 35 el número de diputados autonómicos, frente al anterior intervalo que recogía de 47 a 59 parlamentarios.
Según el portavoz del PSOE en las Cortes regionales, José Luis Martínez Guijarro, la fijación de 33 en el número de diputados no se ha debido a criterios objetivos basados en la Ley Orgánica de Régimen Electoral General, sino que ha acusado al PP de "hacer cálculos y después intentar revestir el resultado con visos de legalidad".