El activista musulmán Amarouch Azbir quedó en libertad el sábado después de prestar declaración durante siete horas en los juzgados de Vilanova i la Geltrú, en Barcelona, según informa Catalunya Ràdio. La Policía detuvo el pasado martes a Azbir por su presunta radicalización, en una operación en la que también se arrestó a Mohamed Said Badaoui.
En el caso de Said Badaoui, uno de los líderes de la comunidad islámica en Cataluña, el juzgado de instrucción de Reus (Tarragona) acordó ayer su ingreso en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Barcelona, a la espera de la ejecución de la orden de expulsión. Azbir también está pendiente de una orden de expulsión.
Tras conocerse las detenciones, Unidas Podemos reclamó al Ministerio de Interior frenar las expulsión de Badaoui, al entender que su arresto y el de Amarouch Azbir es un "atropello a sus derechos". "Instamos otra vez al Ministerio de Interior a frenar su expulsión", reclamó en redes sociales el presidente del grupo confederal en el Congreso y dirigente de En Comú Podem, Jaume Asens.
El parlamentario aludió también a que la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional (AN) para que se suspendiera la expulsión de Said, al que la Policía perfila como "uno de los principales referentes en España del salafismo más ortodoxo", hasta el punto de que, "desde su llegada, se ha producido un aumento del radicalismo en la región de Tarragona a causa de su discurso", así como la de Amarouch Azbir.
La Junta de Portavoces del Parlament catalán aprobó el miércoles una declaración de apoyo a este líder de la comunidad islámica. Y es que ERC, CUP, comunes y Junts denuncian que es víctima de "represión política mediante la Ley de Extranjería" y por ello instan a la Generalitat a "activar todas las herramientas administrativas, jurídicas y diplomáticas para velar por sus derechos", informa Europa Press.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación