La subida de la luz y el temor a un otoño caliente a causa de la inflación han hecho que la demanda de placas solares para autoconsumo se haya disparado. Un hecho que ha provocado que en el sector se froten las manos, aunque se enfrentan a un problema: la ola de peticiones es tan grande que les es imposible surfearla, por lo que muchas empresas ya han abierto listas de espera de hasta 6 y 8 meses.
El problema de la alta demanda es que el sector de los instaladores eléctricos carece de suficientes profesionales cualificados. Desde el sector de la construcción llevan años insistiendo en la falta de mano de obra, lo que produce que muchas empresas, aunque tengan pedidos, no tengan técnicos a su disposición que se encarguen de la instalación.
Charlamos con Alicia Perea, vicepresidenta de la Asociación Profesional de Empresarios de Instalaciones Eléctricas y Telecomunicaciones de Madrid (APIEM). Cuenta a este diario que desde su organismo tratan de convencer a más gente del atractivo de la profesión. "No se trata de tirar cables o cambiar bombillas, es muchísimo más, es un oficio muy importante: son claves en el futuro del mundo". Señalan como ejemplo que fueron los instaladores eléctricos los que se encargaron de montar el sistema necesario para instalar respiradores en los hospitales durante la pandemia.
Según una encuesta de Adecco, el 29% de las 27.000 empresas consultadas tiene problemas para trabajadores especializados en electricidad y electrotecnología. Este estudio cataloga que estas son las vacantes más difíciles de cubrir dentro de un sector de la construcción en cierto modo 'demonizado' por la crisis de 2008, que mandó a miles de profesionales al paro.
Tal y como señala Alicia Perea, esto se solucionará en los próximos años, ya que son cada vez más las personas interesadas en el sector. El atractivo de pertenecer a un oficio con pleno empleo hace que muchas personas se decanten por formarse en instalaciones eléctricas. Además, se está convirtiendo en una salida laboral para personas mayores de 45 años que han decidido reciclarse tras perder su empleo. "Hace poco estuve en una convención dedicada a este tipo de personas y hubo muchísimo interés en conocer más sobre este sector". Afirma que para la instalación de placas solares también ha sido necesario "reciclar a los trabajadores que ya había" mediante formación.
Según una encuesta de Adecco, el 29% de las 27.000 empresas consultadas tiene problemas para trabajadores especializados en electricidad y electrotecnología
El problema de encontrar personal cualificado se une a la falta de materiales y su encarecimiento. Según Alicia Perea, el 80% de las placas, inversores y baterías proceden de China, país que tiene parada su industria debido a unas fuertes restricciones contra el covid. Esto produce que algunas empresas tengan que empezar con retraso y que el coste de las obras haya crecido, aunque esto no ha frenado la demanda. El precio de la luz está tan alto que la sociedad española ha comenzado a ver con buenos ojos el autoconsumo.
La solución que plantean desde APIEM y que la Unión Europea ya ha puesto en marcha es "fabricar aquí para cortar la dependencia de China", pero el problema es que el gigante asiático también es dueña de las materias primas, de manera que "el problema seguiría siendo el mismo". De hecho, según señalan, la mayoría de fabricantes europeos tienen sus plantas de producción allí porque resulta más fácil exportar a Europa el producto que importar desde China más materias primas.
Gimnasios, colegios y fábricas: los que más apuestan por placas solares
Solo en Madrid, las tramitaciones de obra por instalación de placas solares ha crecido en un 30%, pero según APIEM, la demanda "es general de toda España". Según destacan, "el grueso de las solicitudes proceden de colegios, fábricas y casas unifamiliares", dejando en un segundo plano "las comunidades de vecinos" debido a las dificultades burocráticas de poner de acuerdo a todo el bloque o convencer al resto de sus habitantes para que cedan un espacio en la azotea.
De hecho, conseguir la independencia energética es algo que se está pidiendo desde las distintas patronales. Por ejemplo, Adecaff (Asociación de Empresas Catalanas de Actividad Física y Fitness), insta a los gimnasios a invertir en placas solares y avisan que los consumos “volverán a dispararse” a finales de este 2022. “Este tipo de inversiones se recuperan ahora mucho más rápido de lo que se podía prever en otros escenarios, con los precios actuales es una obligación hacerlo”, afirmó August Tarragó, presidente de esta patronal.
Si este 'empujón' para instalar placas solares procedente desde todos los sectores es fuerte y le sumamos que los convencidos de usar el autoconsumo son numerosos, el potente programa de subvenciones estatal y autonómico han terminado por abrir los incentivos a aquellos que dudaban si dar el paso. "En Madrid salió una subvención del 50% de la instalación y se completó en menos de dos semanas. Ahora lo que hay es una lista de espera para cuando salgan las próximas ayudas", señalan desde APIEM.
Las subvenciones permiten que la amortización de la inversión se produzca mucho antes. Aquellos que utilizan placas solares para generar energía consiguen reducir su factura de la luz entre un 50% y un 70%, además de conseguir que la vivienda se revalorice en el mercado de cara a una posible venta futura.
Apoya TU periodismo independiente y crítico
Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación