La joven violada por el celador del Hospital Ramón y Cajal aún tiene graves secuelas del sucesos. El padre de la chica ha roto su silencio en una carta enviada a Vozpópuli donde expresa su "profunda preocupación y desesperación por la situación de su hija". El progenitor quiere levantar la voz para denunciar la "grave desprotección que sufren los pacientes psiquiátricos en nuestro sistema". Este hombre hace un llamamiento a las autoridades para que tomen las medidas adecuadas para la seguridad de la víctima.
En una carta remitida a Vozpópuli, el padre de la víctima expresa como es la situación actual de su hija tras conocerse que el celador ha sido condenado a 13 años de prisión por los abusos sexuales y por suministrar cocaína a la chica. "La condena no ha reparado el daño causado ni ha mejorado la situación de mi hija", subraya.
"Desde entonces, la vida de mi hija ha empeorado drásticamente. Vive casi en la calle, no sigue ningún tratamiento médico, y ha desarrollado una severa adicción a las drogas. La desprotección y la falta de apoyo adecuado han llevado a mi hija a una situación desesperada, y como padre, estoy impotente para cambiar su destino sin la ayuda adecuada", lamenta en esta misiva.
El progenitor quiere realizar un llamamiento "urgente a las autoridades y a las instituciones responsables para que tomen medidas inmediatas". "Solicito que se le otorgue a mi hija una plaza de larga estancia en un centro psiquiátrico donde pueda recibir el tratamiento integral que necesita. Es crucial que esté en un lugar donde pueda ser medicada y contenida adecuadamente para tratar su enfermedad y su adicción", pide el padre de la víctima del celador.
"La historia de mi hija no es única"
Así, el relato de este hombre es demoledor: "La historia de mi hija no es única". "Son muchos los pacientes psiquiátricos que, debido a la falta de recursos y la desprotección institucional, se ven expuestos a situaciones de abuso y abandono. Es necesario que se realicen cambios profundos en el sistema para garantizar la seguridad y el bienestar de estos pacientes vulnerables", reivindica.
"Por tanto, hago un llamado a la acción a través de esta carta abierta, con la esperanza de que mi testimonio pueda contribuir a generar un cambio positivo. Mi hija, y todos los pacientes psiquiátricos, merecen vivir en un entorno seguro y recibir el tratamiento adecuado", concluye el padre de la víctima del celador.
El progenitor explica que su hija se quedó sin el inyectable desde su alta en noviembre de 2023 del Hospital Rodríguez Afora. Una circunstancia que agravó su estado. El motivo es que estaba empadronada en Galicia y se borró este elemento de su tarjeta sanitaria en Madrid.
La Audiencia Provincial de Madrid dictó esta semana sentencia contra un celador del Hospital Ramón y Cajal. Este trabajador incurrió en un delito continuado de abuso sexual contra una paciente a la que también drogó con cocaína para conseguir sus propósitos. El hombre, de 38 años, fue condenado a 13 años de prisión por estos dos delitos y también tendrá que pagar a la víctima una cantidad de 10.000 euros, según la sentencia a la que tuvo acceso Vozpópuli.
La sentencia contra el celador
En la sentencia, que está fechada este 12 de junio, la Sección número 2 de la Audiencia Provincial de Madrid condena al celador por un delito continuado de abuso sexual. Por ello se le sanciona con la pena de siete años de prisión y la prohibición de acercarse durante ocho años a la víctima. También tendrá que indemnizar a la paciente con una cantidad de 10.150 euros. La Comunidad de Madrid (Consejería de Sanidad), responde del pago de la indemnización como responsable civil subsidiaria, conforme a lo previsto en el art. 121 del Código Penal, según la sentencia.
La novedad del caso es que también se le considera culpable de un delito de promoción, favorecimiento o facilitación de consumo de drogas tóxicas que crean grave daño a la salud. Por este delito se le amplía la pena a seis años y un día de prisión. Esta condena fue solicitada por el abogado de la víctima Juan Manuel Medina. "La sentencia no cumple nuestras expectativas. Nos vamos con un sabor agridulce", ha asegurado el letrado a Vozpópuli. La víctima solicitaba una indemnización de 60.000 euros y hasta 26 años de prisión.
Los hechos tuvieron lugar en las noches del jueves 29 de abril y del sábado 1 de mayo de 2021. El celador se había ganado la confianza durante días de esa interna de la que tenía ya el número de su móvil. Hablaba con ella y le ofrecía primero tabaco y luego cocaína para luego abusar sexualmente de ella.
El juicio a este celador se desarrolló durante el pasado mes de abril en la Audiencia Provincial de Madrid. Ahora, este hombre tendrá que ingresar en prisión por los graves hechos por los que ya ha sido considerado culpable.