La pizarra del despacho del Grupo 13 de la Policía Nacional se llena cada día de los diferentes robos que se cometen en la Comunidad de Madrid. Los nueve agentes que conforman esta unidad analizan cada uno de ellos para ver pautas comunes y comenzar a investigar los hechos. Estos especialistas se encargan de recopilar la información relativa a bancos, hoteles y salones de juego; al final acaban dandos con estos delincuentes "más pronto que tarde", según informan fuentes policiales a Vozpópuli.
Su última hazaña fue detener a una banda que aterrorizaba a los hoteles. Entraron a punta de pistola en el Hotel La Princesa y en el NH de Alcorcón. Sus miembros llegaron a encañonar a familias y niños. "Los niños se pueden llegar a pensar que son gente disfrazada. No podemos permitir esas cosas", comentaron este grupo de agentes.
Analizan las pautas de los ladrones
Semanas más tarde, los policías habían detenido a los cuatro miembros de la banda. El cabecilla, un joven angoleño, era un viejo conocido de los agentes. Se intentó fugar, pero al interceptarle fue todo "hospitalidad". "Él entiendo que nuestro trabajo es dar con ellos y espera que se pase todo lo más rápido posible".
El líder de la banda comenzó con asaltos a salones de juego con arma blanca. Después decidió ir por objetivos más grandes como los hoteles de diferentes puntos de la Comunidad de Madrid. Cuando pasó a disposición judicial quedó en libertad a los dos días. No llegó ni a pasar por prisión. En poco tiempo volvió a la carga con sus hechos delictivos.
Reclutó a tres marroquíes, dos de ellos de nacionalidad española, pra sus nuevos delitos. Actuaron de enero hasta abril. Cometieron un total de 10 robos: cinco en hoteles, tres en salones de juego y dos en gasolineras. Había cambiado su selección para intentar arrastrar más beneficios económicos. Ahora ya se encuentra en prisión tras esta última operación de la Policía.
Este grupo de agentes es de nueva creación, ya que hace dos años había dos unidades. El especializado en robos a bancos se fusionó con el 13 que se encargaba de los atracos en establecimientos. El común denominador de todos los hechos es la gran cantidad de dinero que manejan los locales de las víctimas.
Tienen su propia base de datos de robos
Por las manos de estos agentes pasan todos los atracos que se cometen en la región y se quedan con los casos en los que los autores roban en diferentes establecimientos. Su primer paso es solicitar las cámaras de seguridad de los locales. Ese punto de partida da pistas sobre los responsables. Para ello tienen que visionar horas y horas de video para encontrar patrones comunes. Esta circunstancia ha cambiado con el tiempo, ya que ahora es obligatorio tener un circuito de videovigilancia.
Y es que los ladrones siempre van antes a sus objetivos para vigilar qué pasa en estos ambientes. También tienen entre sus cometidos los asaltos a administraciones de lotería, joyerías o farmacias. Con estas informaciones crean sus propias bases de datos y ahí comienza su verdadero trabajo: analizar y detectar las reincidencias delictivas.
Las armas utilizadas, los colores de la vestimenta de los ladrones, tatuajes o simples métodos de camuflaje son los detalles en los que se fijan. Analizan los hechos y las personas que participan. Su objetivo es claro: presentar todas las pruebas posibles para que el juez tenga claro qué es lo que buscan. "Nosotros llegamos hasta donde llegamos", reflexionan estas fuentes.
Ladrones de fiesta tras cometer los robos
Muchas veces también juegan contra el tiempo. Cuando un suceso es conocido por la sociedad los agentes aceleran en su cometido. Algunos de estos ladrones incluso analizan cómo trabaja la policía para aprender e ir mejorando sus métodos delictivos.
A otros delincuentes, les pierde la fama y el dinero. Los atracadores roban una gran cantidad de dinero y se van a disfrutar de la vida a sitios como Ibiza. Cuando se les acaban los fondos vuelven, pero siguen en el foco de la Policía Nacional. Este Grupo 13 de atracos esperan a que se relajen, que bajen la guardia y en ese momento actuan. Manejan investigaciones de gran complicidad, pero tienen un lema. Todos estos atracadores caen "más pronto que tarde".
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