María Chivite ha decidido desaparecer de la escena pública tras el acuerdo entre PSOE y Bildu para arrebatarle a UPN la alcaldía de Pamplona. La secretaría general de los socialistas navarros tan solo ha hecho una aparición desde el pasado 12 de diciembre -el día previo a conocerse la noticia- y fue para aguantar el chaparrón ante Javier Esparza -llamó "escoria" a los dirigentes del partido-, a quien no dio réplica en el Parlamento Navarro. Por lo demás, silencio absoluto.
La última aparición de Chivite en la agenda pública de la presidencia navarra fue el pasado martes, según la propia web del Gobierno. Participó en la entrega de los premios Cámara Navarra 2023. Después no ha acudido a ningún acto oficial. Aunque sí estuvo presente en el anuncio del acuerdo en la sede del PSN del pasado 13 de diciembre, delegó en Ramón Alzórriz, portavoz de la formación, la comunicación de lo sucedido.
El propio Alzórriz ha sido el encargado de dar réplica en redes sociales a la manifestación de UPN en Pamplona y de atender a los medios de comunicación desde entonces, algo normal dada su posición de portavoz. Lo que sí es extraño es que Chivite esté desaparecida desde entonces. La secretaria general socialista lo está incluso en redes sociales. No publica nada en 'X' (antes Twitter) desde antes del acuerdo entre PSOE y Bildu, cuando no es habitual que se ausente tantos días.
Más de una persona le ha reclamado en la red social 'X', tanto a ella como a Pedro Sánchez, la entrada de Bildu en la alcaldía de Pamplona. "En Bildu están comprometidos con el respeto y la memoria de las víctimas", citaba un usuario al Partido Socialista navarro, incriminando a Chivite que deje la alcaldía a un partido que lleva "asesinos en sus listas". A pesar de todos los dedos que le señalan y la manifestación a favor de UPN que ha tenido lugar este mediodía -17 de diciembre-, la socialista no ha hecho ningún tipo de declaración.
Chivite gana las elecciones autonómicas gracias a Bildu
Al igual que Pedro Sánchez durante su investidura, María Chivite ha conseguido posicionarse en la presidencia navarra gracias a la abstención de Bildu. El pasado agosto, la secretaria general ganó la segunda votación por mayoría simple con 21 'síes' del PSN y sus socios de gobierno, frente a los 20 'noes' que recibió por parte de PP, Vox y UPN.
Este año no es la primera vez que la abstención de Bildu beneficia a Chivite para ocupar el puesto de presidenta de la comunidad. Cuando entró al poder en 2019, la abstención de los 9 escaños del partido independentista vasco le otorgaron la victoria.
¿El PSOE en silencio?
Ha habido un silencio notorio por gran parte de los socialista, además de Chivite. El ministro de Transporte y Movilidad Urbana, Óscar Puente, se ha hecho conocido por no morderse la lengua respecto a ningún asunto, y este no ha sido menos.
En el pleno del Congreso de los Diputados celebrado el 13 de diciembre, tras la moción de censura entre el PSOE y Bildu en Pamplona, Puente ha reconocido no tener "ningún problema en que un partido progresista democrático se haga con una alcaldía en España".
#EnDirecto | Óscar Puente, tras la moción de censura de PSOE y Bildu en Pamplona: "Yo digo sin complejos que no tengo ningún problema en que un partido progresista democrático se haga con una alcaldía en España. Ninguno" pic.twitter.com/XWTZfLnm83
— Europa Press (@europapress) December 13, 2023
Félix Bolaños, ministro de la Presidencia, se encuentra también en el foco de la polémica. Horas antes de que el PSOE pactase con Bildu la alcaldía de la capital navarra, Bolaños negaba las negociaciones. "Eso fue absolutamente público y notorio. Todos los acuerdos políticos que hemos llegado con otras fuerzas los hemos negociado con discreción, y hemos publicado los acuerdos", agregaba el titular de Justicia, en respuesta a la senadora del PP, Mari Mar Blanco. Bolaños aún no ha hecho ningún pronunciamiento para 'corregir su error'.
Los socialistas negaron negociar con Bildu en el pasado
Tal y como ha ocurrido con la ley de amnistía, más de un socialista se opuso a negociaciones con Bildu en el pasado. Además del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la presidenta navarra, María Chivite, la lista de los socialistas que pensaban que negociar EH Bildu era cruzar una "línea roja" se extiende.
"Ellos han sido los responsables de la violencia, no de la paz", exclamaba Patxi López a los medios de comunicación. Otros socialistas que se habían posicionado en contra de Bildu -y que no han hecho ninguna declaración respecto a la alcaldía en Pamplona- son Nadia Calviño, ministra de Economía y vicepresidenta primera, María Jesús Montero, ministra de Hacienda y vicepresidenta cuarta, Pilar Alegría, ministra de Educación, o Isabel Rodríguez, ministra de Vivienda.
Sevilla
Menuda pájara.
Berenguer
Chivite: una mala persona.