El Gobierno ha denunciado que los teléfonos móviles del presidente Pedro Sánchez y la ministra de Defensa, Margarita Robles, han sido espiados con el programa Pegasus, un software que la empresa israelí NSO Group vende a clientes estatales. Moncloa descarta por completo que alguna institución del Estado -como el CNI, Policía u otra Administración- esté implicada en la intervención de los móviles de Sánchez y Robles y apunta "con absoluta seguridad" a un "ataque externo", aunque sin señalar a ningún país u organismo en concreto.
El teléfono del presidente, que dispone de un sistema de encriptación y seguridad avanzado al igual que los móviles de los ministros, fue intervenido dos veces en mayo del 2021 y el de la ministra de Defensa una vez en junio del año pasado. El volumen de información extraído del móvil de Sánchez fue de 2,6 gigas en la primera intervención y de 130 megas en la segunda. Al teléfono de Robles se le extrajeron apenas nueve megas. No obstante, el Gobierno no ha especificado qué datos fueron sustraídos.
La Moncloa ha justificado hoy la brecha de seguridad que supone este presunto espionaje señalando que existen decenas de casos similares que afectaron a líderes internacionales, como Emmanuel Macron o Boris Johnson, el expresidente de la Comisión Europea Romano Prodi y al presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, este cuando ejercía de primer ministro belga.
En el caso del presidente de Francia, Marruecos incluyó su nombre en una lista de objetivos del espionaje telefónico con Pegasus de los servicios secretos del reino alauí, según denunció en julio de 2021 el consorcio de medios Forbidden Stories y Amnistía Internacional. Rabat, aliado estratégico de París, negó la mayor tras las revelaciones, al igual que la empresa NSO Group. Tras las acusaciones, el Eliseo evitó citar a Marruecos.
Marruecos también se vio salpicado por el espionaje de Pegasus -un programa que ha sido utilizado para infectar al menos 50.000 móviles de políticos, activistas y periodistas de todo el mundo- cuando en julio de 2021 la Fiscalía de París abrió una investigación tras las denuncias de varios periodistas cuyos teléfonos habrían sido 'hackeados' por orden de Rabat.
Marruecos, México y Emiratos, los que más usan Pegasus
Al menos 22 países han sido atacados entre 2016 y 2021 con el software espía Pegasus en operaciones que habrían emprendido de forma encubierta gobiernos como Arabia Saudí, Marruecos, México, Emiratos o India. Una filtración de datos revelada por 16 medios internacionales en julio del pasado año denunció que México, Marruecos y Emiratos Árabes son los países que más habrían utilizado el programa de espionaje. La investigación reveló que la base de datos del software recoge los teléfonos móviles de 50.000 "personas de interés" para los clientes de NSO Group desde 2016
Oficialmente, NSO Group ha vendido el programa a al menos a una decena de países, algunos con regímenes autoritarios: Azerbaiyán, Bahrein, Kazajstán, México, Marruecos, Ruanda, Arabia Saudí, Hungría, India y los Emiratos Árabes Unidos. En la lista de clientes llama la atención la ausencia de Rusia. No figura entre las potencias que utilizan Pegasus para espiar a opositores o rivales extranjeros pero ello no oculta la larga lista de actuaciones de dudosa legalidad contra opositores políticos o periodistas por parte del Gobierno ruso. La clave en cuanto al uso de Pegasus es que Rusia es más productora que compradora de software espía.
El caso catalán
Desarrollado por la empresa NSO Group, fundada en el año 2010 por antiguos miembros de los servicios de la inteligencia israelí, Pegasus se vende a gobiernos y los servicios de seguridad de éstos para combatir, según la propia empresa, el crimen y el terrorismo. Pegasus instala en el móvil de la persona a espiar una aplicación mediante un enlace que el usuario del teléfono recibe vía SMS. Desde ese momento, Pegasus puede acceder al contenido del equipo, así como activar o desactivar componentes del dispositivo como la cámara o el micrófono.
La primera filtración sobre su uso se tuvo en 2017, aunque la primera alerta sobre éste ya se produjo un año antes. Uno de los últimos casos de supuesto espionaje por Pegasus es el revelado por el semanario estadounidense The New Yorker, en abril de 2022, con datos de The Citizen Lab, y según el cual más de sesenta dirigentes independentistas catalanes, en su mayoría, y vascos, habrían sido víctimas del programa. Entre los investigados, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, los expresidentes Quim Torra y Artur Mas, y el entorno de Carles Puigdemont. El supuesto espionaje coincidió con los años más convulsos en Cataluña, cuando el Gobierno catalán convocó en 2017 un referéndum de secesión declarado ilegal por el Tribunal Constitucional.
Jakim_Bor
No hace falta irse tan lejos. Tenemos el CNI en España, que actúa por su cuenta en contra de su mismo gobierno, como primer sospechoso.
Hispanicus
Vaya, VP también al servicio de la difusión de la propaganda, la intoxicación y la desinformación de los trileros de la Moncloaca...
Don_Ogro
El problema del "vasquismo", siempre ha estado en Madrid. Siempre. Se lo dice un vasco. Porque ha sido siempre en Madrid donde se han dado alas al PNV, a Bildu y a su calavera. Porque si al conjunto de España esos pactos les ha costado pasta, a los vascos, a los ciudadanos, nos ha costado libertad y mucho dolor (y no me refiero a las violencia explicita). Yo soy español, y ni los batasunos ni otros cernicalos me van a quitar esa condicion.
juande
Con la construccion de una autopista de 5 carriles por sentido por Panticosa, que los ponga en su sitio y nos abra paso a Francia sin pasar por su casa.