Mercadona ha tenido que recurrir a Francia para tener en su stock patatas. Durante las últimas semanas estamos presenciando uno de los hitos de la última década: el éxodo rural de los tractores. Los trabajadores del gremio han dicho basta y han puesto cartas en el asunto conquistando las carreteras de nuestro país y sacando las banderas de guerra ante las medidas del Gobierno dirigido, cual títere, por la Unión Europea. Unas revueltas que han dejado en jaque a las autoridades locales y que han unido a toda la agricultura europea al unísono del grito de basta y de dejar de poner la otra mejilla.
Más allá de las constantes manifestaciones en busca de un futuro estable para el campo español, la realidad es que la vida en las grandes ciudades sigue sin mayor repercusión, lo que se traduce en las personas siguen acudiendo a los supermercados y haciendo sus hábitos cotidianos. Ir al Mercadona es uno de ellos.
La empresa de Juan Roig se ha convertido en el supermercado líder a nivel nacional. La calidad de sus productos, que no tiene nada que envidiar a los de alta gama, sus precios tan asequibles y su marca blanca que domina el mercado, son algunos de los secretos de éxito de la multinacional. Y es que la cadena apostó en el año 1977 por una fórmula que ningún otro establecimiento había explotado hasta ese momento en España: el low-cost.
Mercadona es el rival a batir dentro del sector. No solo eso, sino que uno de los estandartes que más les ha caracterizado- además de Hacendado- ha sido su compromiso con el producto nacional y siempre priorizar los alimentos 'made in' España frente a los importados de terceros países. De hecho, el propio supermercado recalca más del 85% de su surtido, es de origen nacional con productos cultivados, pescados, elaborados o transformados en España.
A pesar de su fiel compromiso con los campos y agricultores españoles, la realidad es que es cada vez más habitual ver en las etiquetas de los alimentos la denominación de origen extranjera. Tal y como explicamos en Vozpópuli, las judías verdes y aguacates que se venden Mercadona, Ahorramas y BM son de Marruecos, mientras que las lentejas proceden de Canadá y las alubias pintas de Argentina.
A esta lista de productos se tiene que incluir las patatas, que en este caso tienen denominación de origen francés. Gracias a las redes sociales, todos los usuarios de Mercadona tienen acceso a un portal para hacer públicas sus quejas, dejando en claro sus preferencias y sus denuncias. Prueba de ello es el caso de A.S. Pérez, un usuario de X que se ha quejado del origen de las patatas que se venden en la cadena.
Mercadona explica por qué no vende patatas de origen español
El usuario de X @agustinsperez ha publicado un tuit este miércoles 21 de febrero en el que preguntaba a Mercadona lo siguiente: "@Mercadona me llevé una gran decepción al recibir mi compra online con patatas procedentes de Francia, sabiendo que nuestra fruta y verdura no llega a su destino porque al pasar la frontera la interceptan y la tiran los franceses. Deberían estudiar esto: Productos españoles SÍ".
¡Hola! Solo importamos patata desde septiembre/octubre hasta mayo aproximadamente. Como todos los años, durante la campaña española, entre mayo y septiembre/octubre, tenemos patata 100% española, procedente de diferentes Comunidades Autónomas. ¡Un saludo!
— Mercadona (@Mercadona) February 21, 2024
Ante la queja del internauta, Mercadona ha tomado cartas en el asunto y ha contestado a su cliente explicando que no vende patatas de origen español porque no es temporada y que volverán a tener a partir de mayo: "¡Hola! Solo importamos patata desde septiembre/octubre hasta mayo aproximadamente. Como todos los años, durante la campaña española, entre mayo y septiembre/octubre, tenemos patata 100% española, procedente de diferentes Comunidades Autónomas. ¡Un saludo!".
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