El Ministerio de Sanidad notificó el pasado 14 de agosto a través de su página web oficial la entrada en la red e-Helth, un proyecto impulsado desde la Unión Europea que permite a los habitantes de los países vecinos europeos acceder a su historial médico y sus recetes electrónicas dentro de nuestras fronteras. Un avance que los de Pedro Sánchez han aplaudido y que abre un nuevo paradigma no solo de cara a los viajes al extranjero, sino que también para los turistas que acuden todos los veranos a las playas de nuestro país.
¿Es una medida realmente efectiva o va a generar más problemas que soluciones? Según lo que explica el Ministerio de Sanidad, el proyecto tiene como objetivo último conectar a todas las comunidades autónomas y que toda la ciudadanía tenga la posibilidad de acceder, a pesar de no estar en su ciudad o país de residencia, a su Historia Clínica Resumida (Patient Summary) y Receta Electrónica (e-Precription/e-Dispensation). Y es que la globalización en el aspecto sanitario no ha sido una tarea fácil. De hecho, se han tenido que firmar un sinfín de acuerdos con otras sedes europeas para que esta idea se hiciera realidad.
"El servicio europeo de interoperabilidad de la receta electrónica se encuentra ya activo en Andalucía, Aragón, Canarias, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad de Madrid, Comunidad Valenciana, Extremadura, Galicia, Navarra, País Vasco, Ceuta y Melilla. Los pacientes procedentes de estas comunidades pueden obtener sus recetas en las farmacias adheridas de Croacia, Estonia, Finlandia, Polonia y Portugal que dispongan del servicio. Además, están en fase de pruebas Asturias y Murcia, así como Italia, Grecia, Chipre, Hungría, República Checa, Irlanda, Suecia, Letonia y Lituania", así explicaba el Ministerio de Sanidad los avances de esta nueva medida y las comunidades en las que se está experimentando.
España es uno de los países pioneros en este aspecto y que se ofreció desde el primer momento como 'rata de laboratorio' para comprobar la efectividad de internacionalizar las recetas y el historial médico. Era más que evidente que tarde o temprano, teniendo en cuenta la digitalización y la conectividad entre países, la Unión Europea iba a confeccionar todo un tejido entre sus países para que los extranjeros tengan la opción de acceder a sus medicamentos en otras naciones.
El Ministerio de Sanidad tiene en cuenta a los extranjeros
Uno de los pilares de nuestra economía es el turismo. Miles y miles de personas acuden a nuestro país con el fin de deleitarse con la gastronomía nacional y disfrutar de los parajes característicos de España. Julio y agosto son los meses que, por normal general, más turistas albergamos y, por consiguiente, esto desemboca en estancias que suelen durara un mes. Más de 30 días que para las personas que padecen enfermedades graves es un verdadero quebradero de cabeza a la hora de abastecerse con las pastillas necesarias para hacer frente a sus problemas de salud.
Ante la disyuntiva que año tras año se presentaba cuando llegaban las fechas estivales, el Ministerio de Sanidad, de la mano de la Unión Europea, ha querido cortar el problema de raíz. Así lo ha aclarado en su portal web, en el cual ha sido muy tajante y ha aclarado que "los pacientes procedentes de los países que disponen de estos servicios, pueden ser atendidos en el SNS español, contando con su información clínica preexistente y accediendo a recetas de medicamentos tengan prescritos en sus países de origen en cualquiera de las oficinas de farmacia de las comunidades autónomas mencionadas".
Un acuerdo pionero y que marcará un antes y un después. Por el momento, no se ha notificado las modificaciones que sufrirán cada comunidad autónoma, ya que el Ministerio de Sanidad solo se ha encargado de pactar con la Unión Europea y ahora la pelota está en el tejado de los servicios autonómicos. Una integración que se realizará de manera paulatina y que tendremos que ver en que puerto acaba este intento de unificar Europa.
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